Venezuela y la influencia de un protagonista peculiar
La vinotinto encara su duelo ante Chile con mucha euforia y el aditamento de un elemento poco común.
Por Redacción EG ·
17 de octubre de 2023
VENEZUELA logró un empate histórico e impensado frente a Brasil como visitante en la tercera fecha de las Eliminatorias Sudamericanas. Al duelo de este martes con Chile, en Maturín, llega en puesto de clasificación directa al Mundial de 2026.
Por eso, la expectativa del público es enorme y 52 mil personas poblaron el estadio en el que habitualmente juega como local Monagas bajo una abrasadora temperatura de 36 grados.
Lo llamativo fue el protagonismo de la voz del estadio, que desde una hora antes del choque realizó una potente arenga en la que dejó prácticamente la garganta. En el momento en el que los futbolistas ingresaron al campo para realizar movimientos precompetitivos, presentó con una inusual euforia a todos los integrantes de la plantilla.
El máximo énfasis lo puso en el capitán, Salomón Rondón, que ante Chile cumple 100 partidos con la camista venezolana.
Luego de eso, comenzó a cantar como un hincha más un atronador "Oh, vinotinto soy"y lo hizo sin parar por un lapso prolongado de tiempo. Sin dudas, su influencia no fue la de un jugador, pero le dio a la previa del partido un condimento poco común.
IMAGEN DE PORTADA: AFP
