Martín Palermo, durísimo con Juan Román Riquelme
Fuertes declaraciones del máximo goleador de la historia de Boca.
MARTÍN PALERMO se había ilusionado con convertirse en DT de Boca, algo que estaba claro que ocurriría si en las elecciones del último domingo se imponía la dupla conformada por Andrés Ibarra y Mauricio Macri. Pero el ganador fue Juan Román Riquelme, con quien el Titán tiene históricas diferencias.
No obstante, y luego de haber perdido la final de la Copa de la Liga ante Rosario Central, Palermo decidió renunciar a su cargo como entrenador de Platense, con el que cumplió una campaña histórica. Este miércoles rompió el silencio en Radio La Red y fue bien claro: "No creo que Riquelme me llame para ser DT de Boca. Si lo hace es por algún interés".
Por eso pidió que "no le generemos expectativas al hincha de Boca con algo que no yo no lo veo posible. Tendré que esperar 4 años más", aunque a su juicio, "cuando me toque dirigir a Boca voy a estar mucho mejor, por más que crea que este sea mi mejor momento. Yo me veo ahí sentado, pero no entrando desde el túnel visitante. Todo a su debido tiempo: si tienen que ser 4 años u 8 porque Riquelme gana otro mandato, esperaré".
El histórico goleador Xeneize fue realista en cuanto a lo que podría pasar en el hipotético caso de que le tocara estar al frente del equipo bajo la presidencia de Riquelme: "Me voy a sentar en una mesa con Román y le voy a proponer cosas que él no va a aceptar y yo no voy a tirar de la cuerda para terminar de romper lo que medianamente nos tiene vinculados, si es que existe".
"Como jugadores lo podíamos llevar -amplió-. Pero hay muchas más cosas que te llevan a un desgaste: conformar un plantel, traer jugadores. La gente nos va a ver en una situación en la que cuando las cosas no estén bien, va a haber un quiebre. Y eso va a perjudicar al hincha de Boca".
"Con Riquelme somos distintos. Nos respetamos adentro de la cancha, nos respetamos así. Cuando vos sos distinto, no conectás, por más que quieras hacerlo por Boca", consideró.
También reconoció que durante estos años "yo creía que alguna vez alguien me iba a llamar. Tuve oportunidades como para que alguien me llamara: le tocó al Vasco (Arruabarrena), le tocó a Guillermo (Barros Schelotto), le tocó a Battaglia y a Ibarra y yo me quedé calladito. Yo no tenía que ocultar nada, era mi gran sueño. Lo voy a seguir diciendo y lo voy a seguir esperando".
Y se mostró apenado por una situación vivida en los días previos a las elecciones a través de las redes socialesel último domingo cuando fue a emitir su voto en las elecciones de Boca. La mayoría lo aclamó, pero recibió algunas críticas de gente que lo veía en la vereda opuesta al oficialismo. "Que el hincha de Boca me haya dicho traidor es lo que más me dolió", confesó.
Sobre la actualidad política del club, Palermo analizó: "Macri es el presidente más exitoso de la historia de Boca y que la gente lo insulte es lo que no entiendo. Se vinculó al Mauricio presidente de la Argentina con el Mauricio presidente de Boca. Esa es la grieta que se generó y Boca no puede estar desunido porque es grande desde donde lo veas. De afuera se ve que Boca está partido, hay una desunión que lleva a vivir una situación extraña que no me pasó nunca dentro del club ni estando afuera".