Guillermo Vilas

El recuerdo de una leyenda: "Vilas fue el tenis romántico"

El francés Yannick Noah, contemporáneo del gran tenista argentino, rememoró sus vivencias en la década del '80.

Por Redacción EG ·

26 de mayo de 2023

YANNICK NOAH es una leyenda del tenis por un suceso inédito: es el único campeón francés de Grand Slam desde el inicio de la Era Abierta, en 1968.

Se consagró, 40 años atrás, en Roland Garros 1983: en la final derrotó 6-2, 7-5 y 7-6 al campeón defensor sueco Mats Wilander, que el año anterior le había ganado el último partido a Guillermo Vilas.

Precisamente el mejor tenista argentino de todos los tiempos fue uno de los grandes rivales y amigos de Noah durante los años '80. Si bien apenas ganó dos de los once duelos que mantuvieron entre sí, el francés tiene un recuerdo espectacular de aquella época con Willy: "Era algo más que un jugador".

"Willy es siete años más grande que yo y cuando crecí él era nuestro héroe. Vilas fue el tenis romántico. Se ponía los jeans, tenía el pelo largo…, él, Bjorn (Borg), Víctor Pecci, Vitas Gerulaitis. Era algo más que un jugador. En ese tiempo ser un jugador de tenis era un gran impacto. Vilas fue un amigo cercano, estrecho. Tuvimos muy buenos momentos y el mejor fue cuando viajamos juntos por el mundo jugando el torneo de las leyendas. Cuando nos juntábamos no hablábamos de tenis: hacíamos conciertos, íbamos a cantar… ¡Guillermo amaba a los Rolling Stones!", rememoró Noah.

Y contó una anécdota en particular, en diálogo con La Nación: "Una vez, en Navidad, yo estaba en París preparándome para ir a jugar en Australia y Willy estaba en su departamento de la ciudad. Yo era tímido para conversar con él, era el inicio de mis veinte años, pero le dije: ‘No sé qué vas a hacer hoy, pero es Navidad y podés venir a mi casa’. Me dijo que sí y vino. Podría haber traído un vino, pero llegó con una guitarra de regalo. ¡Una Fender Stratocaster 1962 espectacular! Todavía la tengo, es una joya y suelo tocar con esa guitarra. Guillermo era demasiado generoso".

En marzo de 1982, antes de la Guerra de Malvinas, Noah visitó Buenos Aires para jugar una Copa Davis contra la Argentina en el Buenos Aires Lawn Tennis Club. Francia ganó 3-2, aunque Vilas se había impuesto en un partidazo a cinco sets ante el mejor tenista visitante.

"Fueron días de mucho calor. En mi partido contra Willy me acalambré. Estaba totalmente sobrepasado aquel día. Amé la energía del público en el Buenos Aires, nunca vi nada igual, pero no me alentaban a mí, lo apoyaban a él y hasta me llegaron a tirar algún monedazo. ‘¡Guillermo, Guillermo!’, eran los cantitos, como en el fútbol. Sentí la emoción de ser parte de ese show. En esa época Willy era una bestia y yo formé parte de una gran pelea, de un show enorme. Tengo un gran recuerdo de ese partido porque vi el amor que tenían por Willy en Argentina. Perdí en cinco sets con él, pero tengo un gran recuerdo. Jugué dobles y el último punto con Ricardo Cano, que gané (8–6, 6–1 y 8–6)", recordó Noah.

Imagen de portada: archivo El Gráfico