España va por la gloria tras el conflicto de "Las 15" con la Federación

Si alguien hubiera dicho que España iba a ser finalista del Mundial femenino, pocos lo hubieran creído. No sólo porque había otras potencias que partían como favoritas, sino también por los graves problemas entre las jugadoras, el entrenador Jorge Vilda y la Federación (RFEF) en los meses previos al certamen.

Todo comenzó cuando 15 jugadoras expresaron su malestar ante la RFEF y decidieron dar un paso al costado hasta que se hiciera un cambio, luego de quedar afuera de la Eurocopa 2022 en los cuartos de final ante Inglaterra, el mismo rival al que enfrentará en la gran definición de la Copa del Mundo, 

«Queremos una apuesta decidida por un proyecto profesional en el que se cuiden todos los aspectos para sacar el mejor rendimiento a un grupo de jugadoras con las que consideramos que se pueden conseguir más y mejores objetivos", señalaron en el comunicado grupal.

Jorge Vilda, el director deportivo de las selecciones femeninas,había renovado justo antes del comienzo de la Eurocopa y contaba con el total apoyo de Luis Rubiales, presidente de la RFEF. Por lo tanto, su cargo no estaba en peligro pese al descontento general.

"Las futbolistas que han presentado su renuncia únicamente regresarán en un futuro a la disciplina de la Selección si asumen su error y piden perdón", fue la respuesta de la Federación española. 

 

 

Vilda se hizo eco del famoso dicho "divide y reinarás" y mantuvo reuniones individuales con cada una de "Las 15". A partir de ese momento, se rompió la unanimidad y se generó una división entre las futbolistas, con un grupo liderado por referentes de Real Madrid y otro por las de Barcelona.

Después de meses de negociaciones de manera interna entre las jugadoras y la RFEF, algunas mostraron su predisposición a volver a la Selección, aunque la mayoría no regresó. 

 

 

"No es una decisión que tome a la ligera, pero es algo que tengo que decidir y mi decisión es clara. Tengo una manera de vivir y unos valores... Yo no puedo volver si la situación no cambia", había afirmado a medios españoles Mapi León, defensora del Barsa campeón de la Champions League y una de las pioneras del crecimiento del fútbol femenino en su país.

Sólo tres futbolistas de "Las 15" están presentes en la Copa del Mundo de Australia y Nueva Zelanda, incluida Aitana Bonmatí, una de las figuras del torneo, y también Alexia Putellas, la última ganadora del Balón de Oro, quien cuando estalló el conflicto estaba recuperándose de su lesión de rodilla pero dejó en claro que apoyaba el reclamo de sus compañeras.

Si bien la mayoría de las jugadoras se quedó sin el Mundial al que habían clasificado, sí lograron que La Federación implemente mejoras que ayudaron a construir el gran sueño mundialista español, como la incorporación de una nutricionista o de un fisioterapeuta más a un staff de 30 personas en total. Además, se acordó un plan de conciliación familiar y se creó una sección especial para aquellas que fueran madres de hijos menores de dos años. 

“Tengo a las 23 mejores del mundo, 23 Balones de Oro”, dijo Vilda tras conseguir avanzar de fase. 

Quizás el éxito colectivo y esta final histórica para España tapan lo que fue el trasfondo y la tensión de los meses previos, pero no es tan así. Los festejos al ganar en los cuartos de final fueron ilustrativos: las jugadoras celebraron primero entre ellas. Ninguna lo hizo con el entrenador.