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El ciclo de Guede: dos finales, dos 4 a 0
El entrenador de San Lorenzo vuelve a cruzarse con ese resultado, como ante Boca, por la Supercopa Argentina. Aquella vez, el score fue favorable para el Ciclón.
El ciclo de Pablo Guede en San Lorenzo tuvo de todo: un título, una temprana eliminación de Copa Libertadores, rumores de renuncia y una final perdida por goleada.
En seis meses, el entrenador osciló entre todas las variantes posibles al frente de un equipo grande. En la tarde del domingo, en los vestuarios del Monumental, corrió el rumor de que su etapa al frente del Ciclón estaba acabada a partir de su renuncia. Finalmente, el presidente Matías Lammens lo desmintió. Sigue. ¿Con el apoyo de los hinchas?
E 10 de febrero de este año, su San Lorenzo se impuso 4 a 0 ante Boca, en Córdoba, por la final de la Supercopa Argentina. Un sector de la prensa deportiva instaló el debate en torno al método Guede. A ese nivel de aceptación había llegado la labor de un DT que venía de dirigir a Palestino, de Chile.
Un puñado de meses después, la historia le mostró su contracara. El mismo resultado, pero en contra. Lanús aplastó a San Lorenzo. La paradoja se refuerza: cuando San Lorenzo goleó a Boca, ese triunfo desestabilizó el ciclo de Rodolfo Arruabarrena, que llegaría a su final semanas después. Ahora, el enjuiciado parecería ser el propio Guede, quien otra vez necesitó del respaldo de los máximos directivos.
En el medio de estos dos opuestos, su equipo fue eliminado de la Copa Libertadores en zona de grupos. La aceptación de los hinchas, hasta esta tarde, estaba dividida.
En seis meses, el entrenador osciló entre todas las variantes posibles al frente de un equipo grande. En la tarde del domingo, en los vestuarios del Monumental, corrió el rumor de que su etapa al frente del Ciclón estaba acabada a partir de su renuncia. Finalmente, el presidente Matías Lammens lo desmintió. Sigue. ¿Con el apoyo de los hinchas?
E 10 de febrero de este año, su San Lorenzo se impuso 4 a 0 ante Boca, en Córdoba, por la final de la Supercopa Argentina. Un sector de la prensa deportiva instaló el debate en torno al método Guede. A ese nivel de aceptación había llegado la labor de un DT que venía de dirigir a Palestino, de Chile.
Un puñado de meses después, la historia le mostró su contracara. El mismo resultado, pero en contra. Lanús aplastó a San Lorenzo. La paradoja se refuerza: cuando San Lorenzo goleó a Boca, ese triunfo desestabilizó el ciclo de Rodolfo Arruabarrena, que llegaría a su final semanas después. Ahora, el enjuiciado parecería ser el propio Guede, quien otra vez necesitó del respaldo de los máximos directivos.
En el medio de estos dos opuestos, su equipo fue eliminado de la Copa Libertadores en zona de grupos. La aceptación de los hinchas, hasta esta tarde, estaba dividida.