Primera División

Miguel Merentiel, la bestia azul y amarilla de River

El uruguayo marcó un doblete en el superclásico ante la misma víctima ante la que comenzó su leyenda.

Por Redacción EG ·

22 de abril de 2024

MIGUEL MERENTIEL no era un nombre conocido en el fútbol argentino hasta ese 5 de diciembre de 2021 en el que dejó su marca: "¡Soy una bestia!", exclamó delante de una cámara tras estampar el 2-1 sobre River en el mismísimo Monumental en una noche que terminó con victoria para el Halcón.

El 21 de abril de 2024 la víctima fue la misma, aunque la Bestia -como todos lo apodan después de aquel grito desaforado que registró la televisión- la sometió por partida doble y nada menos que con la emblemática camiseta de Boca en el pecho.

De perfil bajo, el uruguayo de 28 años no resalta por sus declaraciones pero sí por su efectividad. Lo trajeron para hacer goles y, desde el silencio, se ganó la consideración de distintos técnicos. Jorge Almirón le tenía mucha confianza y ahora Diego Martínez lo coloca junto a su compatriota Edinson Cavani para que entre los dos se conviertan el terror de cualquier defensa.

A propósito de su coterráneo, si el Matador celebra sus conquistas con el arco y flecha, Merentiel hace su festejo desenfundando una ametralladora que simboliza el poder de fuego de su eficacia.

Este domingo apareció en momentos clave. En el cierre del primer tiempo estaba en el lugar justo para capitalizar el centro de Luis Advíncula y mandar a la red lo que se convirtió en el empate que le dio tranquilidad a su equipo para encarar el resto del duelo.

 

El primer gol de Merentiel a River en Córdoba.
 

Su segunda daga en el corazón riverplatense fue tras la contra que Cavani no pudo definir y cuyo rebote en Armani le cayó como un imán para mandarla a guardar y decretar el 3-1. 

 

El uruguayo marca el 3-1 para el Xeneize ante River.
 

En los días previos se sugirió la posibilidad de que el oriundo de Paysandú no fuera titular y que en su lugar se desempeñara el juvenil Luca Langoni. Pero Martínez se decidió por su olfato y experiencia, dos atributos que demostró con creces en el partido en que más se lo necesitaba. Y así estiró su buen promedio de efectividad: ya lleva 25 conquistas en 67 partidos disputados con la insignia Azul y Oro.

El propio Langoni lo reemplazó a falta de 5 minutos y su salida provocó la ovación e idolatría del Pueblo Xeneize. Se lo vio muy emocionado y eufórico en los festejos del éxito ante el máximo oponente consumado gracias a los balazos de Miguel Merentiel, la bestia negra (o mejor, azul y amarilla) de River.