JOSÉ LÓPEZ, CORRENTINO Y GOLEADOR
El delantero de Lanús irrumpió en la primera división de Lanús a fuerza de goles. El flaco que admira a Nacho Fernández y Thierry Henry tiene una historia para conocer.
La capital del ladrillo
San Lorenzo es una localidad que se ubica a 75 kilómetros de la ciudad de Corrientes y que lleva su nombre en honor a la batalla que libraron las tropas del General San Martín contra los realistas. Es un pueblo de esos tantos que hay en el interior del país, donde todos se conocen y la siesta es una religión que no tiene ateos. Una vez por año sus habitantes, vecinos y curiosos organizan “La fiesta del ladrillo” en la que se rinde homenaje al trabajo de una industria artesanal que es vital para esta comunidad distante a 80 kilómetros de la capital correntina.
Posee más de cien fábricas de ladrillo artesanal, generando (y genera) mano de obra estable para casi mil personas.
En ese pueblo de trabajo, hornos ladrilleros y manos rojas el 6 de diciembre del año 2000 nació Jośé Manuel Alberto López, como José Sand correntino y goleador.
El inicio del sueño
“Mi mamá es ama de casa y mi papá trabajaba en barcos pesqueros y dividía su labor entre Mar del Plata y Ushuaia, se embarcaba por un mes o a veces mucho tiempo más, de chico lo vimos muy poco a papá por su trabajo, y mamá hizo de mamá y también de papá, pero nunca nos faltó nada y soy un agradecido a ellos”.
En ese contexto José como la mayoría de los chicos a los que les gusta jugar a la pelota, lo hacen en el club del pueblo. El Progreso de San Lorenzo vio cómo el flaquito desgarbado daba sus primeros pelotazos.Poco tiempo después tomó una decisión que le cambiaría la vida: a unos 15 kilómetros en el Club Atlético Saladas, iban a estar unos veedores de Boca Juniors, lo cierto es que en el club de la localidad lo vieron y le ofrecieron jugar allí. Lo hizo por (durante) un año, hasta que el diablo metió la cola.
La decisión
“Mi papá es un hombre muy correcto y siempre nos inculcó estudiar para tener una mejor vida, me acuerdo que me preguntaron qué quería para mi vida, jugar al fútbol implicaba dedicarme a eso y ellos estaban dispuestos a realizar el sacrificio por mí. Fuimos a vivir a Buenos Aires, a mi papá incluso le quedó más cerca para seguir con su trabajo, pero para mamá y mis hermanos era dejar todo para (por) acompañarme a mi”.
El teléfono llama dos veces
Después del cimbronazo que le dio Independiente, Lanús lo contactó para ir a una prueba con Ariel Paolorossi, ex coordinador del fútbol juvenil, y Gabriel Del Valle Medina.
“En Lanús me pusieron de extremo y la verdad (es) que me fue bien y me sentí cómodo, Gabriel Medina fue un técnico que me cambió la cabeza y nos inculcó el trabajo y (el) sacrificio. Desde que llegué al club me encantó la importancia que le(s) dan a los chicos de las divisiones inferiores”.
La pretemporada 2018 lo encontró entrenando con la cuarta división, alternando algunos amistosos y entrenamientos con la reserva. Todo se encaminaba.
El tiempo es veloz
Antes de ser quien empieza a ser se mudó con sus goles a Tres Arroyos; allí jugó a préstamo en el Club Atlético Colegiales, donde consiguió el ascenso a la primera del regional y se consagró goleador del equipo.
El debut en primera llegó el 3 de enero de 2021 en el empate ante Patronato 1 a 1.El primer gol llegó una semana después: el 9 de enero ante Rosario Central jugó de titular y convirtió su primer gol en primera, el segundo de la victoria que fue 2 a 0.
Desde ese momento hasta el presente el pibe de San Lorenzo no es el único correntino que hace goles en Lanús. En lo que va del torneo ya convirtió ocho tantos, dos menos que José Sand, y entre los dos monopolizan gran parte de los goles del Granate en este campeonato.
Los sueños están para cumplirlos, solo se necesitan la decisión, el trabajo y a veces un poco de suerte.José Manuel Alberto López supo juntar esos ingredientes y construir un presente feliz para él, los suyos y los de todos aquellos que gritan sus goles desde Lanús hasta Corrientes.