Personajes

Adolfo Cambiaso, personaje del año

A los 40 años, logró su 12º Abierto de Palermo, fue el mejor de la final, jugó el último partido montado a Cuartetera, su emblemática yegua, y pulverizó la historia del polo con La Dolfina, su organización, al ganar la tercera Triple Corona seguida. ¿Se retira? Aún no lo decidió.

Por Darío Gurevich ·

19 de febrero de 2016
Imagen Dolfi festeja en la cancha 1 de Palermo. La gloria es suya. La imagen queda para el recuerdo.
Dolfi festeja en la cancha 1 de Palermo. La gloria es suya. La imagen queda para el recuerdo.
“Como deportista no puedo pedir más. Voy a tener que encontrar nuevas motivaciones para ver qué hago. No es fácil ganar y ganar a los 40 años, y menos contra personas que son 10 años más chicas, y encima ser el mejor de la final. Todo eso significa llevar tiempo fuera de tu familia, cansancio mental, dolores físicos, y otras tantas cosas. Les agradezco a los que me acompañan. Mi mujer es mi sostén, mi otra pierna. A ella le tiro toda la mierda: mis inseguridades, mis momentos malos. Como no voy al psicólogo, hablo con ella que es muy positiva. También quiero nombrar a mi preparador físico, a mi kinesiólogo, a los petiseros –que se levantan a las 5 y se acuestan a las 10 de la noche–, al veterinario –que duerme con los caballos–, a la gente de Córdoba… Hay un montón de personas detrás de La Dolfina, yo soy solo la cara visible”.

Adolfo Cambiaso sabe por qué no puede pedir más a nivel deportivo. Apenas pasó una hora del triunfo 13-12 ante Ellerstina, de haber jugado el último partido arriba de Cuartetera –su emblemática yegua–, de haber conquistado otra vez el Abierto de Palermo, y, en especial, de haber pulverizado la historia al obtener la tercera Triple Corona consecutiva, un hito en el polo argentino.

“Teníamos mucha presión, pero a mí me jugó a favor. Porque jugué mi mejor partido en Palermo, y La Dolfina hizo el mejor partido de la temporada –anticipa el mejor polista del mundo, que metió seis goles en la final–. Le ganamos a La Dolfina. Nuestro peor rival era nuestra cabeza, el único que nos podía vencer. Por eso, nos enfrentamos ante nosotros mismos, ante la historia, y el equipo se la bancó y es el único en haber logrado la tercera Triple Corona seguida. Mis compañeros (David Stirling, Pablo Mac Donough y Juan Martín Nero), Milo Fernández Araujo (el coach) y yo somos los responsables de esto. Los tres años no fueron difíciles, sí este Abierto. Me pareció el más complicado que jugué”.

El invicto de La Dolfina de 35 partidos, 33 por torneos de la Triple Corona, impacta; como así también que sea el tercero en la lista de los máximos ganadores del Campeonato Argentino, con 9. Sin embargo, los cuatro datos más sobresalientes de Adolfito sorprenden aún más: hace 23 años, conserva su 10 de hándicap en la Argentina; ganó 30 títulos de la Triple Corona (seis de Tortugas, 12 de Hurlingham y 12 Campeonatos Argentinos); es el segundo polista en haber sido premiado con el Olimpia de Oro; y logró un imposible con la organización que lidera: ¡la tercera Triple Corona en fila!

Su 2015 de ensueño, además, había arrancado fenomenal. Por segundo año consecutivo, se impuso en todos los títulos de alto hándicap en el Torneo Internacional de Sotogrande, en España. ¡Bestial! ¿Se retira? “Me tomaré mi tiempo, voy a descansar físicamente y pensar para después decidir”, resume.

“Somos diferentes”, le había dicho Cambiaso a quien escribe en el amanecer de la temporada 2014. Al final, tenía razón: La Dolfina es distinta, y él ni hablar.

Por Darío Gurevich / Foto: Alejandro Del Bosco

Nota publicada en la edición de enero de 2016 de El Gráfico