Lionel Messi

Messi, de PSG al GPS: ¿qué rumbo marca su destino?

Apenas 3 letras activan un juego de palabras que, más que algo lúdico, plantean un serio interrogante: cuál será el destino del mejor jugador del mundo.

Por Redacción EG ·

01 de junio de 2023

 

LIONEL MESSI está a horas de interpretar su último tango en París. Christophe Galtier, entrenador del PSG, firmó este jueves la “crónica de una muerte anunciada” de Lionel Messi en el club francés, al confirmar que el partido ante Clermont, en el Parque de los Príncipes, será la despedida del argentino con esa camiseta.

Con tal confirmación, se abre ahora el abanico de posibilidades para que el mejor jugador del mundo continúe su carrera, con un destino que sería el ídeal pero también muy complejo por la ingeniería económica: el retorno a Barcelona.

 

El fair play financiero, rival del Barça

Dentro del cuadro de opciones existen algunas más acordes con la lógica y están relacionadas con clubes “gigantes” que podrían darse el lujo de contar con los servicios de la Pulga. Uno ya quedó descartado este martes, cuando Javier Zanetti, vicepresidente de Inter de Milán, confirmó que Messi no está dentro del proyecto deportivo del club porque “todos lo quieren pero hay muy pocos que pueden pagar lo que vale. El fair play financiero es un impedimento para traerlo”.

Precisamente ese aspecto es el que le pone las mayores barreras al Barcelona para concretar el “operativo retorno”. Según las reglas de La Liga de España, debe recortar por lo menos 200 millones de euros para cumplir con el reglamento, una cifra que hoy excede el tope salarial que puede abonarle a su plantel profesional.

La idea del club es hacer el ajuste en distintos rubros de la institución, sobre todo por la famosa regla del 40%, el límite porcentual que podrán gastar para reforzar el plantel del total que se ahorra por transferencias de jugadores y otras ventas.

Más allá de las frías reglas de la economía, el clamor para que el capitán de la Selección Argentina vuelva a su casa es generalizado, e incluye al propio entrenador del equipo, Xavi Hernández: “A nosotros no hay ninguna duda de que nos ayudaría”, dijo.

La seducción del mundo árabe

Si de poderío económico se trata, el mundo árabe tiene el dinero necesario para satisfacer cualquier apetencia. Y en ese sentido, Messi ya fue tentado por Al Hilal, el equipo de Arabia Saudita que dirigió Ramón Díaz hasta finales de mayo, con una oferta de 400 millones de euros por temporada.

La campaña comenzó meses atrás, cuando se supo que Cristiano Ronaldo jugaría en Al Nassr, su clásico rival. En la tienda del club empezaron a vender camisetas con el nombre de Lío.

Podría decirse que esta opción permanece en “stand by”, ya que no hubo desde el círculo del jugador ninguna palabra de rechazo.

¿Un crack suelto en Miami?

La Major League Soccer (MLS) de los Estados Unidos tiene la intención de contar con Lionel Messi desde hace varias temporadas. Esa idea que sobrevuela desde hace un tiempo podría materializarse en la realidad, con la misma táctica que, más de una década y media atrás, utilizaron para llevar a David Beckham.

Precisamente el equipo del ex mediocampista inglés es el principal interesado: Inter de Miami, que pretende realizar un enorme esfuerzo económico para concretar la llegada del capitán de la Selección Argentina, con la clara meta de promocionar el próximo Mundial, a llevarse a cabo en Estados Unidos, Canadá y México.

En las últimas horas este club también fue noticia  por una supuesta maniobra en la que entraría en juego para que Lionel concrete la vuelta a Barcelona. La idea sería que firme contrato con el club de la MLS, que compraría su pase y luego lo cedería a los catalanes por un plazo de entre 6 y 18 meses.

En este acuerdo todos ganan: Messi seguiría en plena competencia de nivel europeo, con la mira en la Copa América de 2024, Barcelona disfrutaría de su regreso e Inter de Miami se aseguraría disfrutar de las últimas pinceladas del astro rosarino.

La opción idílica

En medio de tantos cálculos, también puede haber un lugar para posibilidades más idílicas, como el anhelo de Newell’s de conseguir el regreso del hijo pródigo, que nunca jugó en el fútbol argentino. Ese sueño que hoy resulta inalcanzable, sería una verdadera revolución para Rosario y para el país en general.

"Seguramente nuestro pueblo sueñe con tener a Messi. El tiempo lo dirá. Uno se puede llegar a ilusionar, pero es muy distante y hay que esperar", había dicho Ignacio Astore, presidente del club rosarino, a principios de año.

El caldo de las especulaciones está en etapa de plena ebullición. En la olla se cocinan los deseos de Messi y de los equipos que quieren contar con sus servicios. Los ingredientes aguardan la combinación justa para lograr el plato más deseado del menú del fútbol: ver a Messi en plenitud y en el ámbito adecuado para desplegar su inagotable repertorio de trucos mágicos.