2007. MARANGONI 100X100
Con la misma inteligencia y elegancia que tenía jugando en el mediocampo de muchos de los clubes más populares del país, Claudio Marangoni responde las 100 preguntas de El Gráfico.
1 Al final, ¿de qué cuadro eras? De Central. Por lo menos de chico. Yo nací al lado de la cancha, era socio, veraneé en el club hasta los 17 años, viajaba desde la Capital en tren para ver los clásicos, conozco el viejo estadio, conozco el Gigante, y hasta cantaba la marcha del club. Ya de grande, iba a Rosario y me puteaba toda la cancha, entonces dije basta. Ahí putean a todos los que no son de Central.
2 Tal vez porque eras de Rosario no tuviste problemas en jugar en San Lorenzo y en Huracán, y en Independiente y en Boca. Fui hincha del club al que pertenecí en cada momento. Y lo de Huracán fue especial: cuando yo me fui a Inglaterra, había arreglado con San Lorenzo para que tuviera la prioridad por si volvía. Yo me había hecho muy hincha de San Lorenzo. Pero cuando volví, la presidencia había cambiado. Me resistí a firmar para Huracán, pero San Lorenzo no me quiso ni un poco.
3 ¿Con qué club te sentís más identificado hoy? Hoy no siento ni más ni menos por ninguno de los cinco clubes por los que pasé acá.
4 La gente de Independiente dice que la traicionaste. ¿Te importa? Sí, claro que me importa y me dolió que me putearan, aunque peor hubiera sido la indiferencia. Creo que me putearon tanto que se notaba que me querían mucho. Así y todo, hoy la gente de Independiente me sigue pidiendo autógrafos, eh, porque no es tonta, sabe lo que representé para el club.
5 Pero te quiere ver lejos… ¡¿Qué?! Para nada. No siento que tenga las puertas del club cerradas. ¡Clausen dirigió al equipo después de haber jugado en Racing!
6 Les dijiste a los dirigentes de Independiente que si no te vendían a Boca te retirabas. ¿Verdad o mentira? Totalmente mentira, Independiente era mi casa. La realidad es que el equipo empezó a envejecer, y tanto a mí como a los dirigentes nos convenía empezar a hacer algunos cambios. Lo que pasa es que los dirigentes lo ocultaron, y dijeron por lo bajo: “Te vendemos, pero el costo político lo pagás vos”.
7 ¿Molestó más al pase a Boca o que festejaras como un loco la Supercopa en la mismísima cancha de Independiente? Festejé con la gente de Boca porque me parecía genuino hacerlo, pero no di la vuelta olímpica y en ningún momento hice algún gesto de más.
8 ¿En la despedida de Bochini no te insultaron más porque era una fiesta? La gente me chifló hasta que tiré la primera pared con el Bocha, más o menos a los diez minutos de partido. A partir de ahí me empezó a aplaudir. Me acuerdo de que a Islas casi le hago un gol por arriba de la cabeza; entonces todos dijeron: “Che, éste es jugador nuestro, también”.
9 Boca-Independiente, ¿quién querés que gane? Influye mucho quién está al frente del club en cada momento, los dirigentes o el técnico, porque tengo muchos ex amigos. Me pasa hoy con Estudiantes, por ejemplo: siempre pensé que… bueno, que si perdía, era mejor, pero ahora está Simeone y me pone bien que gane. Va a ser un gran técnico.
10 ¿Boca y River cada vez le sacan más ventajas al resto? Sí, Boca sobre todo. Pero no todas las conducciones van a tener un Macri, y ahí habrá que ver. Dos presidencias ordenadas como las que tuvo Boca posicionan un club y hacen que le saque diferencia al resto. Vélez y Lanús también hicieron bien las cosas.
11 ¿Por qué Independiente, más allá de este torneo, ya no impone el respeto de antes? Porque antes Independiente no era solamente un gran equipo, sino también una gran institución como es hoy Boca. Entonces ese respaldo y esa solidez lo sienten los jugadores en la cancha. Hoy Independiente es un equipo de fútbol y nada más.
12 ¿Se sale de ésa? Acá es clave la continuidad: San Lorenzo hoy tiene la chance y la está desaprovechando, se le está yendo de las manos como se le fue a Independiente cuando salió campeón con Gallego.
13 ¿Recordás haber gritado algún gol del Gatito Leeb? Este… ¿no fue el primero que hizo en mi historia de técnico? Sí, sí, en Banfield.
14 Una vez dijiste que era más fácil entrenar a un equipo de fútbol que dirigir 40 escuelas. Pregunta obligada, entonces: ¿por qué no sos DT? Siempre pensé que iba a ser técnico, pero tuve una vocación docente muy fuerte, y encima me picó antes de que dejara de jugar. Eso hizo que lo que empecé como un hobbie creciera de una manera desproporcionada. Y la empresa se comió al técnico.
15 ¿Tu experiencia como DT en Banfield terminó de decidirte? No, bueno, allí estuve tres o cuatro meses, en los que me peleé con los dirigentes. Me fue bien en números, creo que de 22 partidos perdimos sólo uno; recuerdo que estaba Camoranesi. Me fui antes del octogonal porque el presidente del club quería tener injerencia en el equipo. Después no volvió a seducirme la idea de ser DT, en el fútbol argentino la intolerancia es muy grande. Además, para ser técnico hay que dedicarse a full, y para lo que hago yo también. Tenía que decidir.
16 ¿Hoy no hay chances de que seas técnico? No. Hoy sólo podría estar como un secretario técnico, algo como lo que hizo Valdano en el Real Madrid. Pero deberían existir dirigentes que quieran llevar adelante un proyecto renovador. Si no, no.
17 ¿Y si te llama Bochini para hacer una dupla? Es con la única persona con la que lo haría. El quiere, pero no se anima porque es tímido. Lo haría porque es un amigo, y porque a diferencia de lo que cree la gente común, Bochini es muy sabio, lo que le hace falta es alguien que lo acompañe con organización y que le pueda extraer la forma que tiene de ver el fútbol. Es un analista exquisito.
18 ¿Te siguen llamando de los clubes o ya no? Cada tanto hay alguna charla. La última la tuve por estos días. No era para DT, sino para secretario deportivo. Si se dan las condiciones, puede concretarse. Es un club grande y de Primera, no puedo decir más.
19 ¿Sabés cómo forma Independiente? Perfectamente. ¿Te lo digo?
20) ¿Y Boca? También.
21 ¿Hace cuánto no vas a la cancha? Hace bastante, aunque sigo el fútbol por tele. El año pasado fui a ver a Boca, pero no suelo ir por la incomodidad. Tenés que dejar el auto a cinco cuadras y la policía, más que prevenir, hace abuso de su poder… Una vez llevé a unos europeos por un tema particular y los revisaron como si fueran delincuentes. El espectáculo se transforma en algo que te estresa y que rebaja la condición del ciudadano.
22 ¿Sufriste por cómo le fue a Burruchaga como DT de Independiente? Tengo una gran admiración por Burruchaga como jugador, pero como técnico me desilusionó. Siempre priorizó el orden, y la gente de Independiente quiere orden pero también riesgo. Debería haber sido más ofensivo, no se hubiera traicionado. Y no solamente me decepcionó lo que hizo Burruchaga, sino también Trossero. A veces la precaución es prioritaria; el otro día leí una declaración de Mohamed en la que decía que en México, como en Inglaterra, los equipos juegan para ganar, y en Argentina juegan a no perder.
23 ¿Todos? No, todos no. Hay algunos que renuncian a eso: un soplo de frescura es Cagna, que hace jugar a chicos del Nacional B con la seguridad de los jugadores de Primera.
24 ¿Te gusta el fútbol de hoy? No hay un equipo que entusiasme, pero me gusta, es la evolución que propone el deporte; yo no soy de los que dicen que lo pasado siempre fue mejor, esa melancolía no la comparto. Así y todo, digo: si todos los que están afuera jugaran acá, tendríamos la mejor liga del mundo.
25 ¿Alguien juega hoy por la camiseta? Siempre hubo jugadores que tuvieron sentido de pertenencia y ese sentimiento amateur del que se pone una camiseta y que da la vida por ella. Pero ni ahora ni antes los jugadores dejaron de ver el aspecto económico. Verón volvió porque tiene un proyecto personal en Estudiantes, no solamente porque quiere la camiseta.
26 ¡¡¿Y Bochini?!! Bochini nunca eligió quedarse en Independiente exclusivamente. Si hubiese tenido una oferta de la Juventus, se habría ido. Ahora, si el hincha de Independiente se quiere engañar y fantasear con que sentía la camiseta del club, está bueno. El trabajo es así para cualquier persona común, todos quieren progresar. Si a un taxista le ofrecen cinco taxis y, a cambio, dejar de manejar, ¿cómo no va a agarrar? Es parte de la esencia humana. Ahora, que el cuento de Bochini está lindo, está lindo, cierra bien.
27 ¿Se lo puede definir a Bochini con una palabra? Sí: un crack.
28 ¿Fue el segundo mejor jugador argentino de la historia? Es probable. Y cerca de Maradona, cabeza a cabeza. Una vez dije que Maradona era un definidor extraordinario pero que Bochini era mejor pasador, y Maradona lo tomó mal. Yo digo que Bochini daba pases increíbles y que Maradona fue el número uno argentino de todos los tiempos. Sólo quise comparar una cualidad de Bochini contra un jugador entero.
29 ¿Cómo fue marcar al Bocha? Imposible. Una vez lo enfrenté con la camiseta de Chacarita. Yo me estaba yendo al descenso, por eso jugábamos con el cuchillo entre los dientes: le pegábamos a cualquiera que se nos pasara por al lado, hasta a los propios compañeros. Cuando quise hacer lo mismo con Bochini, para marcarle un poco de presencia, el tipo me tiró un caño y siguió como si nada.
30 ¿Qué jugada de Bochini no te la vas a olvidar nunca más? Imposible respuesta: él tenía una por partido. Nadie en la cancha podía predecir lo que iba a hacer.
31 ¿Te dijo Villaverde por qué no hablaba con la prensa? Una vez se tomaron mal una declaración suya y prefirió no tomar más riesgos.
32 Trossero te definió una vez como un tipo hábil para las relaciones públicas. ¿Tenía razón? Lo tomo como un cumplido, no me parece algo peyorativo. Al contrario, comunicarse me parece bueno. Igualmente, creo que lo dijo porque a mí y a Bochini nos entrevistaban más que a él. Enzo es un señor y es frontal, y eso está bien, prefiero los que hablan y no los que esconden.
33 ¿Cuánto influyó en tu cabeza el tema Malvinas en la final con el Liverpool? Muchísimo, tanto que no la festejamos. Fue el primer choque entre argentinos e ingleses después de la guerra. Mientras los hinchas se abrazaban, el vestuario estaba en silencio. Había mucha gente lastimada, o muerta, y festejar algo que todos relacionaban con lo que había pasado, era una falta de respeto. Nadie lo sentía como una victoria deportiva exclusivamente, lo hacían algo nacional, algo que tomaba el envión de la guerra, y en realidad no tenía relación.
34 ¿Por qué dijiste que un año en Boca equivale a diez en cualquier otro club? Porque cuando llegás a Boca no hay más vida privada, y todo se magnifica por diez. Una experiencia allí merece ser vivida por cualquier jugador.
35 ¿Qué imagen se te viene a la cabeza cuando recordás el 1-6 contra San Martín de Tucumán? Desolación y una profunda vergüenza. Cuando terminó el partido nos metimos en la bañadera grande que tenía el club en el vestuario y estuvimos una hora y media sin hablar. “¿Es verdad esto que me está pasando?”, nos preguntábamos todos para adentro. Y no podíamos decir nada, había que dar la cara y bancarnos las puteadas. Un cachetazo de esa naturaleza, a veces, suma; te enseña a no creértela.
36 ¿Aimar te tocó el orgullo mandándote al banco después de 17 años en Primera? No, para nada, no tomo el banco como algo denigrante ni mucho menos. Lo que hizo mal fue que mandó a decírmelo a través del psicólogo, él no se animaba. Y todo porque magnificaba mi influencia en el grupo y con la prensa. Creo que fue un mal manejo, un error de su juventud.
37 ¿Es verdad que en Inglaterra llegaste a ser más buscado que Bin Laden? Bueno, tenía ofertas del Chelsea y del Ipswich Town, pero yo quería volver al país y tenía miedo de que me convencieran de lo contrario. Entonces, para que no me encontraran, me cambié de hotel sin avisarle a nadie. Así fue como me volví. Y lo peor, acá no tenía club. Le dije a mi mujer que se buscara trabajo, jaja… Y yo casi me pongo otra vez de kinesiólogo.
38 ¿En Inglaterra son más qué y menos qué? Más formales, más leales para jugar y más profesionales. Y no tienen el concepto de amistad que tenemos nosotros. Una vez lo toqué a un compañero con el coche para joderlo, como hacíamos acá… y aaaaaahhh, el quilombo que se me armó, el tipo me quería boxear. No están para ese tipo de jodas. Desde lo laboral, tenemos mucho para aprender, pero para vivir, me gusta más el modo de vida familiar que tenemos nosotros.
39 Sin embargo, casi volvés… Sí, fue después de la final de Independiente contra el Liverpool. Yo tenía un ofrecimiento del Southampton, entonces, apenas terminó el partido, me acerqué a Kenny Dalglish y le dije: “Me vuelvo para allá”. El me respondió: “Claudio, mejor quedate en Argentina que ahí hay sol”. Y me quedé.
40 ¿Con el DT del Sunderland se dijeron de todo menos “I love you”? Fue todo medio raro. Creo que se la agarró conmigo porque una vez nos faltó el respeto a los jugadores y yo fui el único que saltó. “Dígame todo lo que quiera, todo lo que se le ocurra, pero de buena manera”, le dije. El tipo se volvió loco, porque era como que me rebelaba delante del plantel. Y eso marcó un poco la relación.
41 ¿Fue más difícil adaptarte al juego rápido o a manejar con el volante del lado derecho? A manejar, claramente, jaja… pero ojo que hay muchos menos accidentes que acá, eh, acá es tierra de nadie.
42 Muchas veces decís que fuiste futbolista por casualidad. ¿Por qué? Yo estudiaba en el Comercial de San Isidro y nuestro profesor, que hacía remo en el club San Fernando, me dijo que tenía físico para remero y me citó. ¿Resultado? El día en que tenía que ir, todo se suspendió, y al día siguiente un amigo me pidió que lo acompañara a probarse a Chacarita. Fui y me quedé afuera, pero Manuel Guerra me vio y me gritó: “Perdón, ¿usted no juega?” “¿Yo? sí”. Entré diez minutos, toqué un par de pelotas y escuché: “Venga hoy a las 18 con su papá, que lo fichamos”. Mi amigo también entró.
43 ¿Qué cosas perdiste por haber sido jugador? Fiestas familiares, el cumpleaños de un hijo... eso dolió. Pero todo lo demás es reemplazable. Si me preguntaban, ¿querés ir a bailar o jugar mañana? ¿Querés conocer el mundo en hoteles de cinco estrellas o jugar mañana? A todo hubiera respondido “jugar mañana”.
44 ¿Eras lenteja para jugar? Era rápido para ejecutar y un poco lentón para trasladarme. Aun así, en Independiente, en ejercicios de velocidad, llegaba segundo o tercero. Lo que pasa es que por mi altura, y mi forma de moverme, a la vista parecía más lento que otros que eran más lentos que yo.
45 ¿Eras bueno como nueve, tu puesto inicial en las inferiores? En Sexta ya no ganaba en velocidad, entonces me bajaron de diez, donde me las rebuscaba más, y después de cinco. Me ayudó ese orden en que se me dio todo, porque como me había acostumbrado a resolver en poco espacio, de cinco me parecía que tenía todo el tiempo del mundo.
46 ¿Por qué no pudiste lucirte en la Selección? Porque no tuve un sostén fuerte. Menotti, por ejemplo, tenía a Gallego, y no quería llevarme a mí para que no le hiciera competencia, eso me lo confesó él mismo. Fijate que en el 82 no hubo un cinco suplente, terminó jugando con Trossero. Y después, bueno, con Bilardo me peleé y él eligió a Batista, que tenía un estilo parecido al mío.
47 Siempre te faltaban cinco para el peso. Si el DT hubiera sido Pastoriza o Basile, el cinco habría sido yo. Y tengo un gran respeto por Gallego y por Batista, jamás fui envidioso.
48 ¿Criticabas a Bilardo porque no te llevaba a sus equipos? No, la crítica mía fue mucho antes de que quedara afuera, y mucho antes del Mundial.
49 ¿Bilardo te sacó de la Selección porque después de un partido con Uruguay dijiste que al equipo lo veías mal adelante, en el medio y atrás? Yo nunca dije eso, siempre fui muy respetuoso.
50 ¿Entonces? ¿Qué pasó? Nada de lo que salió fue cierto, hubo algo personal y listo. Lo único que puedo decir es que yo, en un grupo, jamás saqué los pies del plato. El nunca pudo decirme por qué me sacó, aunque yo lo intuyo. Y no me preguntes qué intuyo.
51 ¿Qué intuís? Shhhhh…
52 ¿Duele o relaja ver a Bielsa en Chile? Bielsa es un monstruo. Si algo me dolió, es que haya dejado la Selección, donde debería haber estado por 20 años. Es un DT que sintetiza a la perfección todo lo que yo pienso del fútbol. Aun sin haber pasado de ronda en Japón, es el técnico argentino más importante del país de los últimos años. Tiene conocimiento, una conducta ejemplar, respeto por el trabajo... hoy no hay una figura más preponderante que él, incluso entre los jugadores.
53 ¿Qué te acordás de cuando tuviste a Basile en Chacarita y en Huracán? Su imagen paterna; él es como un gran padre. Algo así como: “Que a estos muchachos no me los toque nadie porque yo estoy acá”. Si uno espera que agarre cien pizarrones, o que les diga a todos hasta cómo tienen que atarse los botines, no lo va a hacer. Pero es, con el Pato Pastoriza, el técnico que más vuelo le dio al jugador para que sea creativo y que trabaje tranquilo. Ellos dos son los descendientes del mayor filósofo y pensador del fútbol, que fue Adolfo Pedernera.
54 ¿Cuál fue la última revolución en el fútbol? A mí me gustó mucho el Barcelona de Rijkaard y el Chelsea de Mourinho. Por el contrario, me pareció una desgracia que Italia ganara el Mundial, eso fue un retroceso, porque es algo que marca el camino de la especulación en un deporte que es creativo por excelencia.
55 ¿No será lo que se viene? Bueno, pero no escuché que ninguno de los grandes equipos de Europa quisiera comprar a Gatusso, que fue el mejor jugador de Italia. Y eso por algo es. Gatusso te ayuda a ganar un torneo, pero la gente no se acuerda de Gatusso, hay muchos Gatussos en el mundo y pocos Kaká, Messi o Ronaldinho. Hubiese preferido que Argentina o hasta alguna mala versión de algún equipo brasileño saliera campeón antes que Italia.
56 ¿Alguna vez rompiste el fair play? En el fútbol profesional, el que dice que nunca rompió el fair play, miente. No podría asegurar que nunca fui a trabar mal o que nunca tiré un codazo. Muchas veces es por la generación de violencia que provoca el juego mismo.
57 ¿Alguna vez te faltaron el respeto en una cancha? Eran idas y vueltas, vos me la pusiste hoy, la próxima te la pongo yo. No voy a dar el nombre, pero una vez, cuando estaba en Boca, un tipo me metió un planchazo mal, pero mal mal. ¿Ah sí? Ok, ya te voy a agarrar. En el partido siguiente, en cancha de Huracán, hubo una jugada en la que estábamos corriendo a la par. Entonces me dije: no me mira el árbitro, no me mira el línea, ésta es la mía. Pero no: no sé cómo hizo, el tipo sacó un cortito y me fracturó una costilla. El vivo sabía que lo buscaba. Me ganó 2 a 0. El fútbol tiene esas cosas, pero hoy me muero de risa. Si me lo cruzo, todo bien.
58 ¿En qué orden leés el diario? Deportes, política y economía. No leo ni policiales ni espectáculos.
59 ¿Quién es el culpable de la muerte de Acro? Creo que todo empieza en la dirigencia, desde la institucional hasta la nacional. No se toman decisiones de fondo porque hay gente que se beneficia. Que hoy haya barrabravas es increíble. Y están en todos lados, eh, la diferencia acá es que a River le explotó y en el resto de los clubes conviven, pero son una bomba de tiempo.
60 ¿Los dirigentes de hoy roban pero hacen? Eso es muy fuerte, creo que no se puede generalizar. Lo que sí hay es una cultura de depredación de la institución que no se ve solamente en los dirigentes. Se ve también en el jugador de inferiores que se lleva algo, en el canchero que vende las camisetas, en el encargado de mantenimiento... Si en los clubes, que son instituciones civiles sin fines de lucro, el ejemplo del dirigente no es absoluto, da piedra libre para el resto. Piensan entonces los componentes de la institución: “Si los de arriba tienen beneficios, ¿por qué yo, que soy tan hincha y colaboro tanto, no?”. Y entonces pasa lo que pasa con las barras.
61 ¿Si los clubes no son gerenciados, se muere todo? Ya está muerto todo.
62 ¡¡¡¿What?!!! Pensá: una industria que en todo el mundo ha crecido de manera desproporcionada acá sigue manteniendo la misma estructura. Yo no digo que dejen de ser asociaciones civiles sin fines de lucro ni Boca ni River. Pero lo único que limita a un club chico para que deje de ser algún día un equipo de la B es el poder económico. Entonces, el día en que se permita que sean asociaciones civiles sin fines de lucro o sociedades anónimas, todo va a cambiar. Que se gerencie la parte de fútbol, lo otro no hace falta. Por 99 años, no sé. Ahí el capital privado va a aparecer y se va a hacer responsable. Eso hará crecer la competencia. Así, por ejemplo, Temperley podría tener una gran cancha para 45 mil espectadores.
63 En Racing no parecen chochos de la vida. En Racing el gerenciamiento fue una mentira. Fue algo así como: “Te doy un club que no puede más, ponele plata, ponelo al día, pagá mis deudas, y dentro de diez años vuelvo con todo en cero, vos andate, y dejame ver si ahora puedo hacer algo bueno”. Eso no es serio.
64 ¿Cuántas décadas pueden tardar los argentinos en aceptar que los clubes sean sociedades anónimas? Y… mirá: en Chile se dieron cuenta de que fueron el país con mayor asistencia de público en las eliminatorias, y cambiaron inmediatamente: ahora son todas sociedades anónimas. Y ya venden jugadores a Italia y a España en 7 u 8 millones de dólares. El fútbol allá estaba muerto, eh, era lo único que no había crecido en un país en el que había crecido todo. Acá está todo mal: los equipos de Primera se salvan porque venden algún jugador. ¿Y los de abajo?
65 Una vez dijiste que clubes como San Lorenzo y Huracán deberían fusionarse, ¿lo sostenés? Por supuesto, para dividir costos; un estadio único y listo. Que compitan me parece genial, como hacen ahora, pero competir no significa odiarse. Si en definitiva uno necesita del otro, ¿por qué no construyen juntos?
66 ¿Fue un fracaso lo de Acassuso? Firmaron por diez años, rescindieron a los cinco. Acassuso estaba por desaparecer, entonces me vinieron a pedir si los podía ayudar. Yo sabía en ese momento que el Grupo IRSA quería meterse en el negocio. ¿Qué pasó? En el primer año se salió campeón y en el segundo se estuvo cerca. Pero, claro, las necesidades de un club de la D o de la C hacen que todo lo que se pone sea a pérdida, porque no hay recaudaciones. En ese momento daba la sensación de que todos los clubes iban a ser sociedades anónimas, y estaba la posibilidad de que los ascensos y descensos fueran de 3 o 4 equipos, y no pasó.
67 Negligencia. No sé, sumale que acá no hay ni la más mínima seguridad jurídica. Lo importante es que así, como están dadas las cosas, los clubes echan a los empresarios. Este escenario es la antítesis de lo que un empresario necesita. Y hoy, a contramano del mundo, la palabra “empresario” parece mala palabra.
68 ¿Cambiarías alguna regla en el fútbol? Sí, haría córners cortos como en el hóckey y no permitiría en la barrera más de tres o cuatro jugadores.
69 ¿Te dice algo Atlético Villa Regina? Sí, cómo olvidarlo. Fue mi primer rival en Primera. Perdimos 1 a 0.
70 Onzari; Gizzi, Flores, Bordón, Grimoldi; Astudillo, equis equis, Ramón Adorno; Benítez, Salinas, y Ferrero. ¿Te suena? Perfectamente: el primer equipo que integré en Chacarita.
71 ¿Se hubieras sido petiso y morocho habrías sido tan bueno? Eso salió una vez en El Gráfico, cuando estaba en San Lorenzo. Pusieron que Gauna, que era un volante por derecha que corría, iba y venía como un loco, jamás iba a tener éxito porque me tenía a mí al lado, que era rubio y alto, y lo eclipsaba. Pero nadie se sostiene 17 años en cuatro clubes grandes del país.
72 ¿Alguna vez quisiste fajar a algún compañero? Sí, aunque... digamos… mmmmm... nunca lo hice. Ejem…
73 ¿Hubo algún jugador que te haya dado un baile histórico? Sí, cuando volví al país y, con Huracán, jugué frente al Racing de Pastoriza. Pipo Rossi me puso de volante por izquierda y tenía que marcar a Barbas. Yo venía de cinco meses de inactividad y lo sentí: era una diferencia abismal, él estaba en su mejor momento y yo en el peor. La pasé mal. Me acuerdo de que Pipo, para no ser ofensivo, me dijo en el entretiempo: “Pibe, hace mucho calor hoy, ¿no?”. Yo lo único que pude responderle fue: “Pipo, estoy sintiendo el partido”. Me sacó a los 15 minutos.
74 ¿Alguna vez se te pasó por la cabeza divertirte en una cancha? Sí, siempre, jugar al fútbol profesional es muy divertido. Y cuanto más presión, mejor, imaginate jugar un partido sin público. Y cuando la hinchada rival más te putea, mejor todavía, más leña al fuego.
75 ¿Te rejuvenece saber que todavía está en actividad alguien que fue compañero tuyo? No, jeje... ¿Navarro Montoya? Que lo disfrute. Siempre les digo a los muchachos que están por largar que estiren lo que más puedan, porque el fútbol se termina y te parece mentira.
76 ¿Un café no se le niega a nadie? Eso creo.
77 ¿Todo pasa? A mí, decir “todo pasa” como actitud de vida no es lo que más me gusta, porque entonces quiere decir que vale todo.
78 ¿El jugador es lo más limpio que tiene el fútbol o es sanata? No, todo cambió. En los últimos diez años, el deporte tuvo un crecimiento económico monstruoso. Entonces hoy, llevándolo a términos de escala, cada jugador se ha convertido en su propia empresa. Eso le sacó la espontaneidad del amateurismo. Hoy vos le hacés una pregunta a un jugador y él no responde por sí mismo, sino a través del asesor de imagen, del asesor de prensa, del representante, del psicólogo que tiene como apoyo para superar la crisis, del nutricionista...
79 Ergo, ya no son franciscanos… Hay una lucha intestina que hace que, incluso, hasta falte lealtad en el vestuario: fluye información sin que los DT pudieran saber cómo es que ocurre. El jugador perdió lealtad.
80 ¿Motivos? El contexto. Los técnicos no quieren arriesgar porque se ha canibalizado su trabajo, como se ha canibalizado el hincha, y la intolerancia es constante.
81 ¿Eso quiere decir que ya no hay más códigos en el fútbol? Yo cambiaría la palabra “códigos” por “valores”, y digo que se están rompiendo, pero no solamente en el fútbol, sino en toda la sociedad. Hoy el trabajo en conjunto y los valores es lo que diferencia a cualquier equipo. Y si no, respondeme: ¿Qué equipo es mejor hoy? ¿El Chelsea, el Real Madrid, el Bayern, el Liverpool? ¿Qué equipo vale más de 800 millones de euros? Todos ¿no? Bien, uno solo es campeón de Europa. Y la diferencia que tiene son los valores y el trabajo en equipo.
82 Kinesiólogo, fisiatra, profesorado de inglés terminado, culto, ¿no eras una cosa extraña dentro del fútbol? No, porque yo siempre tomé los códigos de mis compañeros, antes que todo era jugador de fútbol. Tenía mis gustos, leía de todo, pero me sentía y era uno más del grupo.
83 ¿Es verdad que te gustaba más estudiar que jugar al fútbol? Sí... Pensándolo bien, tal vez sí era un bicho raro, ¿no? Jaja... Es que me lo pedía mi carrera, y a mí me encantaba. Estudiaba ocho, diez horas por día. Pero no era un esfuerzo, sino un placer, como jugar.
84 ¿Hoy se trabaja mal en inferiores? Se ha mejorado, pero yo disminuiría el número de divisiones, cambiaría cantidad por calidad. Los técnicos de las inferiores saben a la perfección cuál es el único de los seis marcadores de punta que tiene un club en sus divisiones con chances de llegar a Primera. ¿Para qué perjudicar a los otros, entonces?
85 ¿Qué es lo primero que les enseñan a los alumnos en tus escuelitas? A familiarizarse con la pelota.
86 ¿Enseñan táctica? Sí. La escuela no es competitiva, pero es recreativa y formativa. Profundizamos el vínculo entre el chico y el deporte.
87 ¿Hay algún alumno que haya llegado a ser profesional? Nosotros los dejamos a los 12 años, a algunos les perdemos el rastro. Sé que hace poco uno fue capitán de la Selección juvenil.
88 ¿Cuántos de los diez mil chicos que tenés en las escuelitas podrían llegar a Primera? Y... 80 o 90, seguro.
89 ¿Tus preferidos históricos por puesto? El Pato y Gatti; Clausen y Zanetti; Villaverde y Perfumo; Passarella y Trossero; Tarantini; Jota Jota López, Ardiles y Brindisi; Redondo; Babington, Zanabria, Alonso y Bochini; Houseman, Diego y Kempes.
90 ¿El mejor equipo que integraste? Independiente del 84.
91 ¿El que más te gustó? Varios: Holanda del 74, Brasil del 70, algunas cosas de la Selección del 78, algunas de la del 86...
92 ¿Sirve el cinco tapón? A mí me gusta el fútbol dinámico: que el cinco juegue, que el ocho juegue, que el diez juegue... que todos vayan y vengan. Hoy los espacios son muy pocos, por lo que solamente va el que ve el agujero; entonces, el ocho o el diez deberían saber relevar. Todos los del medio deberían tener dinámica y técnica superlativas.
93 ¿Y el doble cinco? Siempre me gustó. Lo hice con Fabián Carrizo en Boca, cuando él jugaba de la mitad para la derecha y yo de la mitad para la izquierda, y con Giusti en Independiente, porque Burruchaga y Bochini no bajaban nunca. Eran 4-2-4.
94 ¿El mejor cinco que viste? Imposible uno. Varios: Gerson del 70, Beckenbauer, Redondo, Telch...
95 ¿El mejor cinco del mundo hoy? Makelele.
96 ¿Redondo? Un grande. Jugó en el mejor nivel con una calidad magnífica.
97 ¿Gago o Mascherano? El Lobo Ledesma, que para mí está en el mismo nivel.
98 ¿Gago o Mascherano? Depende con quién juegan. Si los que tienen al lado van y vienen, el cinco debe ser más creativo y tomar vuelo; si los de los costados son más creativos, el cinco debería ser el que marca. Se dice: “Mascherano quita todo pero no es un crack con la pelota”,y “Gago es muy bueno con la pelota pero no quita”. ¿Y si hacemos una operación y los juntamos?
99 ¿Gago, Mascherano, Ledesma o Marangoni? Noooo, yo no me incluyo nunca, nunca.
100 A Gago lo vendieron en 27 millones de dólares al Real Madrid, a vos en 380 mil al Sunderland. ¿Jugaste en el tiempo equivocado? La parte económica no es determinante en la felicidad de las personas. Además, si yo nací en tiempo equivocado, pobre los jugadores de mi época que eran buenos de verdad, ¿no?
Por David Mintz (2007)