Louis Van Gaal: una enfermedad controlada, pero una herida que no cierra
Las confesiones del ex entrenador de Países Bajos que atravesó un duro momento personal y no olvida la derrota con Argentina en Qatar 2022.
LOUIS VAN GAAL es una suerte de villano para el imaginario del futbolero medio argentino. Antes del duelo con la Albiceleste en el Mundial de Qatar, criticó el nivel de Lionel Messi en el certamen y dijo que lo iban a poder controlar en la semifinal que la Scaloneta ganó por penales. Tras marcar su gol, el capitán festejó delante del banco naranja con el típico gesto del Topo Gigio dedicado al por entonces entrenador neerlandés.
El escándalo que siguió después con las escaramuzas entre jugadores y el famoso "Qué mirás, bobo" de Leo dirigido a Wout Weghorst no hizo más que alimentar el fuego de una picante rivalidad.
Casi dos años después, Van Gaal parece no haber superado el trauma y tiene adentro la espina clavada de la frustración, ya que en declaraciones a Fox Sports, sostuvo sin vueltas que "el árbitro nos robó contra Argentina".
"Los hechos están ahí. Puedo mostrarles los videos. ¿Crees que es normal que un jugador de Argentina pueda golpear el balón contra nuestro banquillo (por Leandro Paredes) sin recibir una roja? Y luego estaba el penal que concedimos", explicó.
Pero hubo otro tema álgido que tocó Van Gaal y que tiene que ver con su vida personal, ya que lucha contra un cáncer de próstata que lo hizo dejar el trabajo luego de la frustración contra el campeón del Mundo.
"¿Mi salud? Estoy bien. Después de 3 años de radioterapia, infecciones renales y cirugía de próstata, finalmente puedo controlarlo. Puedo volver a orinar naturalmente, lo cual es importante. Pero ya no puedo hacer el amor, eso es un problema", bromeó.
También reveló que "Bayern Múnich me pidió que fuera su entrenador, me sorprendió". Pero debido a su situación de salud prefirió continuar con el descanso y dedicarse al restablecimiento total.