Estuvo muerto más de dos minutos y mostró su resucitador

TOM LOCKYER estremeció al mundo del fútbol cuando, el 16 de diciembre pasado, en medio de un partido contra Bournemouth, se desvaneció. El capitán de Luton Town, de la Premier League de Inglaterra, estuvo literalmente muerto durante dos minutos y 40 segundos.

"Me morí", disparó el propio jugador en una entrevista reveladora con Sky Sports. Tras aquella confesión se conocieron detalles del desfibrilador cardioversor implantado en el cuerpo del defensor de 29 años a través de un video.

El relato es conmovedor: “Esa es mi herida de batalla, así que mi desfibrilador está ahí, como se puede ver. Hay un cable que pasa por aquí y llega hasta el corazón, por si alguna vez tiene que apagarse. Monitorea constantemente mi ritmo cardíaco y, si se sale de ciertos parámetros, está diseñado para darme una descarga". El jugador mostró el dispositivo colocado por debajo de su axila.

Y agregó: “Creo que la batería dura diez años, así que sólo hay que cambiarla cada diez años y espero no necesitarla nunca, pero está ahí como precaución”.