Diego Eterno

Napoli campeón después de 33 años: así fue la última gran gesta de Diego Maradona en Italia

El equipo de Luciano Spalletti conquistó su tercer Scudetto en la historia. Repasamos la consagración en la temporada 1989/90.

Por Panqui Molina ·

04 de mayo de 2023

La esperanza de los que menos tienen. La redención del Sur. Los extranjeros en su propio país. Un nuevo milagro de D10S. "No saben lo que se están perdiendo". Todo eso y mucho más fue la conquista del segundo Scudetto de Napoli en su historia, un 29 de abril de 1990.

La temporada 1989/90 comenzó con una crisis interna en Napoli. Corrado Ferlaíno, dueño del club en aquel entonces, dispuso la salida de Ottavio Bianchi como entrenador y en su lugar lo reemplazó Albertino Bigon. Fue un guiño para contentar a Maradona, de 29 años, seducido por Marsella, cansado de la vigilancia permanente y la presión constante en Italia. 

 

Imagen Dale campeón, el grito de toda una región
Dale campeón, el grito de toda una región
 

Napoli incorporó a Massimo Mauro de Juventus y Gianfranco Zola. Además mantuvo a Ciro Ferrara, Fernando De Napoli y Andrea Carnevale, campeones en la temporada 1986/87, a los que les sumó la determinación de Alemao y Careca. 

Maradona se ausentó en el inicio porque prolongó sus vacaciones en Argentina y recién apareció en la fecha 5 contra Fiorentina. Fue suplente, ingresó con el partido 0-2, falló un penal, pero Napoli se impuso 3-2.

Al igual que en la temporada 1986/87, el 10 lideró a un equipo que entró en los corazones de todos los napolitanos. Ídolo indiscutido, totalizó 28 partidos, 16 goles y 11 asistencias. Solamente Marco Van Basten, con 19, y Roberto Baggio, con 17, anotaron más goles que él.

 

Imagen Puño en alto, de cara a su gente: Diego Maradona en el San Paolo, territorio que lo vio brillar
Puño en alto, de cara a su gente: Diego Maradona en el San Paolo, territorio que lo vio brillar
 

La primera ronda la superó a paso arrollador. Llegó a estar 16 partidos invicto y tuvo una recaída en el medio. La fecha 31 fue un punto de inflexión. Napoli igualó sin goles ante el Atalanta de Claudio Caniggia, pero a falta de 10 minutos desde la tribuna le tiraron una moneda a Alemao, quien debió salir con un corte en la cabeza. Si bien el partido terminó 0-0, el Tribunal se le dio por ganado a Napoli por 2-0 en el escritorio. 

Llegó a la penúltima fecha igualado en 47 puntos en la primera posición con Milan, que tenía en su plantel a figuras de la talla de Paolo Maldini, Franco Baresi, Frank Rijkaard, Carlo Ancelotti y Marco Van Basten y que meses después ganaría la Copa de Europa 1989/90. 

La derrota del Rossonero 2-1 ante Hellas Verona le sirvió el título a los del Sur, que tras la victoria 4-2 ante Bologna, en la última fecha solamente necesitaban un empate ante Lazio para coronarse en el San Paolo.

El 29 de abril de 1990, un tempranero tanto de Marco Baroni, luego de un preciso centro de Maradona, le dio el triunfo 1-0 y el título a los del Sur. El defensor de Firenze anotó uno de los goles más recordados en la historia de la Serie A. En 34 partidos, Napoli ganó 21, empató 9 y perdió 4, hizo 57 goles y recibió 31. Dios se detuvo en Nápoles, fue el título de la crónica de El Gráfico de la época.

Más allá de que en diciembre de 1990 ganó la Supercopa de Italia, lo que siguió en la vida futbolística e institucional de Napoli fue una sucesión de tristezas y decepciones, iniciadas con el sospechoso doping de Maradona en 1991, los reiterados descensos, la casi caída a la Serie C, la crisis financiera, la desaparición y la refundación

Recién en la temporada 2006/07 logró su regreso definitivo a la Serie A y si bien obtuvo 4 subcampeonatos (2012/13, 2015/16, 2017/18 y 2018/19) tuvo que contar hasta 33 años para conquistar su tercer Scudetto en la historia y cortar con la hegemonía de Juventus, Milan e Inter, dueños de Italia en las últimas 20 temporadas. 

En tiempos de Maradona, las lápidas de los cementerios de Nápoles fueron marcadas con mensajes para los difuntos: "No saben lo que se están perdiendo". 33 años después de la última gran gesta, la historia se reescribió en honor al 10.

ARCHIVO: JULIÁN MARCEL