La jornada está aquí

SON DECISIONES (EQUIVOCADAS)

Perder sin luchar es peor que cualquier derrota circunstancial. Boca se despidió de la Copa Libertadores, su gran objetivo de la temporada, con pena y sin gloria. Jugó de espaldas a su historia y desperdició la oportunidad de estar presente en la final del 30 de enero en el Maracaná.

Por Agustín Salvemini ·

14 de enero de 2021

Otro golpe a la ilusión. Boca no estuvo a la altura y se quedó afuera de la Copa Libertadores. No tuvo reacción adentro ni afuera y hasta pudo haber sido goleado en el segundo tiempo. Santos lo superó en el plano futbolístico, físico y mental y disputará la final del 30 de enero en el Maracaná.

En líneas generales, Boca ofreció un rendimiento muy flojo en 4 de los 6 partidos que disputó desde octavos de final (Inter como local, Racing en Avellaneda y los 180 minutos vs. Santos). Apenas aprobó en Porto Alegre y demostró chapa de candidato en la revancha contra la Academia. Y así es prácticamente imposible soñar en grande.

De aquel campeón de hace un año quedan solamente los nombres. El Boca de Russo se fue desdibujando con el correr de los meses hasta llegar a su peor versión en Vila Belmiro. La estrategia de apostar todo a una corrida salvadora de Sebastián Villa o de Eduardo Salvio (de pésima actualidad) o a un detalle individual de Carlos Tevez o Edwin Cardona, cediendo siempre el protagonismo, aunque el rival sea Arsenal, Internacional, River o Newell’s, lo terminó pagando caro.

El Consejo de Fútbol, con Juan Román Riquelme a la cabeza, optó casi desde su asunción por el silencio pero sus decisiones fueron desacertadas en los últimos meses. Prescindió en plena competencia de un titular como Pol Fernández y de un suplente como Iván Marcone, se reforzó con Javier García y Pulpo González y extendió el préstamo de Franco Soldano. A propósito del ex Unión, que registra 3 goles en 32 partidos con la camiseta de Boca, cuesta creer que haya sido titular en Brasil, desplazando a Wanchope Ábila.

El lateral derecho fue otro problema sin solución. Debido a que Julio Buffarini, se negó a renovar su vínculo, se decidió reincorporar a Leonardo Jara, que venía de un exilio forzado en la MLS tras la final de Madrid. Como en 2016, aquella vez frente a Independiente del Valle, el ex Estudiantes fue el 4 de Boca en otra eliminación copera, mientras Nahuel Molina Lucero y Marcelo Weigandt, dos jóvenes surgidos en las inferiores, dejaron el club. 

Boca recibió un golpe de nocaut que obligará a un fuerte replanteo interno pero ahora deberá apuntarle a la final de la Copa Diego Maradona del domingo en San Juan. ¿Russo confiará en los suplentes que lo llevaron a esta instancia o le dará otra chance a los titulares que ayer no estuvieron a la altura en Brasil? 

Imagen Boca decepcionó en Brasil y se despidió de la Copa Libertadores.
Boca decepcionó en Brasil y se despidió de la Copa Libertadores.