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Federico Molinari: pim, pum, pam
El gimnasta argentino, especialista en anillas, en respuestas cortas y al pie.
Nota publicada en la edición de marzo de 2014 de El Gráfico
En mi iPod suena... Los Piojos, en especial. También suenan Catupecu Machu, Red Hot Chili Peppers y rock nacional variado.
El mejor lugar que conocí por trabajo... Londres, una ciudad moderna y antigua a la vez. Ahí siempre me fue bien.
Mi deportista favorito es... Federer, un profesional con todas las letras.
En mi tiempo libre... socializo con mis afectos. También hago wakeboard.
No me puede faltar... dulce de leche en la heladera, y el celular en la mano.
Mi bebida preferida es... Fernet con Coca.
En internet me engancho con... Netflix, para ver películas.
Mi peor defecto es... mi carácter. Cuando estoy de malhumor, no me hables.
Pocos saben de mí... que soy fanático del orden y de la limpieza.
No entiendo nada de... cocina.
Detesto... llegar tarde. Me gusta ser puntual.
Amo... a mi novia (Paula Cancio).
Mi lugar en el mundo es... San Jorge, mi ciudad. Ahí están mis seres más queridos.
Le tengo miedo... a la soledad.
No duermo sin antes... ver una película o una serie en la televisión.
Mi sueño es... ganar una medalla olímpica.
Más allá de su talento, también se destaca por su capacidad de superación. En 2005, se recompuso de una doble rotura en el hombro derecho, que casi lo aleja del deporte. En 2008, no pudo clasificarse a los Juegos Olímpicos de Beijing porque se rompió los ligamentos cruzados de la pierna derecha. Pero este rosarino de 30 años soportó la mala racha, reapareció y descolló: es el único argentino que llegó a una final en un Mundial (all around, en Londres 2009), además, se metió en la final olímpica de anillas en los Juegos de Londres 2012. Como si fuera poco, también es el único argentino en ganar una medalla en una Copa del Mundo de máximo nivel (bronce en anillas, en 2013). Este mes competirá en los Juegos Odesur, donde es el abanderado de la delegación argentina. Por otra parte, trabaja en el espectáculo Stravaganza, Estados del tiempo.
Molinari anillas
El mejor lugar que conocí por trabajo... Londres, una ciudad moderna y antigua a la vez. Ahí siempre me fue bien.
Mi deportista favorito es... Federer, un profesional con todas las letras.
En mi tiempo libre... socializo con mis afectos. También hago wakeboard.
No me puede faltar... dulce de leche en la heladera, y el celular en la mano.
Mi bebida preferida es... Fernet con Coca.
En internet me engancho con... Netflix, para ver películas.
Mi peor defecto es... mi carácter. Cuando estoy de malhumor, no me hables.
Pocos saben de mí... que soy fanático del orden y de la limpieza.
No entiendo nada de... cocina.
Detesto... llegar tarde. Me gusta ser puntual.
Amo... a mi novia (Paula Cancio).
Mi lugar en el mundo es... San Jorge, mi ciudad. Ahí están mis seres más queridos.
Le tengo miedo... a la soledad.
No duermo sin antes... ver una película o una serie en la televisión.
Mi sueño es... ganar una medalla olímpica.
Más allá de su talento, también se destaca por su capacidad de superación. En 2005, se recompuso de una doble rotura en el hombro derecho, que casi lo aleja del deporte. En 2008, no pudo clasificarse a los Juegos Olímpicos de Beijing porque se rompió los ligamentos cruzados de la pierna derecha. Pero este rosarino de 30 años soportó la mala racha, reapareció y descolló: es el único argentino que llegó a una final en un Mundial (all around, en Londres 2009), además, se metió en la final olímpica de anillas en los Juegos de Londres 2012. Como si fuera poco, también es el único argentino en ganar una medalla en una Copa del Mundo de máximo nivel (bronce en anillas, en 2013). Este mes competirá en los Juegos Odesur, donde es el abanderado de la delegación argentina. Por otra parte, trabaja en el espectáculo Stravaganza, Estados del tiempo.