Wanchope Ábila y la profunda autocrítica por la fallida definición contra Vélez
El símbolo Huracán y una realista visión en retrospectiva tras no poder obtener la Liga Profesional.
RAMÓN ÁBILA es más bien Wanchope, así lo conoce el futbolero de ley y los hinchas de Huracán que le prodigan mucho cariño por la identificación con esa divisa por parte del delantero cordobés. "Me tratan muy bien, me quieren y yo a ellos. Es mi segunda casa y la disfruto. Tengo dos años de contrato y espero que podamos lograr cosas", manifestó.
Sin embargo, el delantero conoce las leyes del fútbol y con realismo dijo que "esto es a cambio de goles: la gente te ama y te idolatra cuando les das lo que ellos quieren".
En plena preparación de la temporada 2025 y mientras sueña con ser campeón, hizo una mirada a la distancia de lo que ocurrió en la última fecha de la Liga Profesional, cuando el Globo llegó a Liniers con posibilidades de vencer a Vélez y ser campeón. Sin embargo, el Fortín se impuso con claridad por 2-0 y dio la vuelta olímpica.
"No estaba con ánimo de hacer un análisis, pero mirándolo después y pasando la amargura de ese día, fue uno de nuestros peores partidos en cuanto a juego y todo lo que requiere ese tipo de compromisos. Fallamos en todo, fuimos superados ampliamente en el juego y en todos los aspectos, no le encontramos la vuelta. Nos dolió y nos molestó porque teníamos para hacer un mejor partido, pero fue uno de esos días en los que no encontrás respuestas", analizó con crudeza en ESPN.
Agregó que "nos quedamos dolidos y amargados por cómo terminamos pero no dejamos de ver todo lo bueno que hicimos durante todo el año y de poder pelear hasta el último día. Teníamos la ilusión de quedarnos con la liga, son esos partidos que marcan, que duelen bastante, pero es todo aprendizaje".
De cara a lo que viene, con la Copa Sudamericana como objeto de deseo, expresó que "tenemos que armar un plantel prácticamente nuevo y esperemos que se adapten a la idea de Kudelka (Frank, el entrenador), que a nosotros nos gusta. Laburamos muy bien, en un buen ambiente, y eso es muy sano".
En cuanto a su faceta de jugador polémico y provocador, Ábila aseguró que "no me mueve la aguja lo que me digan, me tiene sin cuidado. Hago mi juego, viví toda la vida así, jugando de esa forma para hacer goles. Me banco la puteada adentro de la cancha, me alimenta y me divierte. En todas te putean y todas son duras y difíciles. Eso te lleva a un máximo nivel de concentración porque si no, se te hace complicado. Es parte del folclore y a mí me divierte también jugar un poco, hacer gestos y provocar. Soy yo contra todos, así que tengo que devolver un poco, pero siempre con respeto".
INSTITUTO, MESSI, TEVEZ Y LA MONA
Wanchope es un reconocido hincha de Instituto, club del que surgió y al que se esperanza en volver. "Es mi club, lo sigo siempre, voy a la cancha y ojalá que se dé, pero por ahora pienso en Huracán y ojalá que pueda hacer historia acá".
También recalcó su profunda amistad con Carlos Tevez al reconocer que "estamos en contacto permanente. Es una relación muy fiel y duradera, nos respetamos y nos queremos mucho. Ahora se está tomando un semestre sabático y disfrutando de la vida. Siempre le digo que tiene que disfrutar, que se deje de joder. Pero el laburo, la adrenalina y la exigencia le puede más que todo".
En el final subrayó su admiración por Lionel Messi al afirmar que "me da placer, es el que sabe todo desde que empieza el partido hasta que termina. Es un lujo, nos felices hizo a todos siendo campeón del Mundo y él coronó su carrera como tenía que ser".
Y de su idolatría por Carlos Jiménez, el rey del cuarteo cordobés, admitió que "soy extremadamente Monero; estoy triste porque el sábado festeja sus 77 años y no puedo ir, viajamos a Uruguay con Huracán".