Boca: a 5 días de arrancar una nueva era, se retrasa la llegada del DT

BOCA comenzará el 2 de enero una nueva era; una temporada en la que faltará algo fundamental: el incentivo de la Copa Libertadores. No obstante, está obligado a ganar todo lo que dispute: torneos locales, Copa Argentina y Copa Sudamericana, su premio consuelo a nivel internacional.

Será una etapa con nuevo presidente, ya que Juan Román Riquelme asumió su cargo el pasado miércoles. Y también con nuevo entrenador, aunque este último ítem no aparece tan claro como se preveía que iba a estar a apenas 48 horas de terminarse el 2023.

No hay dudas de que Diego Martínez se sentará en el banco, pero los escollos para que ello ocurra se suceden desde hace algunos días. El martes fue anunciada la formalización del acuerdo y cuando todo indicaba que la situación marcharía viento en popa, Huracán, el club con el que Martínez tenía contrato y decidió dar un paso al costado para escuchar la oferta del Xeneize, intimó a su todavía técnico a que se presente a trabajar. 

 

 

La situación que todavía une a Martínez con el Globo es una deuda de 300 mil dólares que le habían sido adelantados y que la entidad de Parque Patricios pretende recibir, más allá de que está firmada la rescisión. Hasta que ese monto no sea transferido a su cuenta, Huracán no liberará al protagonista en discordia.

Su máxima autoridad, David Garzón, había sido claro: "Que se presente, que renuncie o que pague el resarcimiento. Después de eso quedará libre".

 

 

Si bien se descuenta que lo del dinero no será un impedimiento para la llegada del conductor a Boca, lo cierto es que todavía no se destrabó el conflicto y el hombre que ya tuvo pasado boquense cuando dirigió las divisiones infantiles no formalizó su llegada. Su primer contacto podría darse directamente el martes 2, cuando comience la pretemporada, y su presentación sería por la tarde de ese día.

Martínez, que estuvo de vacaciones en el exterior, ya se encuentra en la Argentina desde el jueves y se trabaja arduamente para que la novela de su arribo al club de la Ribera tenga final feliz.