Opinión

“Los Pumas no tienen techo”

Opina Agustín Creevy, el capitán de la Selección Argentina de Rugby, luego de la gran actuación en el Mundial 2015.

Por Darío Gurevich ·

30 de noviembre de 2015
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Soñé muchas veces con que Los Pumas jugaran el Mundial en este nivel. En la Copa del Mundo 2007, se demostró que se podía. Desde que nos metimos en el Rugby Championship, se mejoró un montón a medida que transcurrieron los años; y el equipo cambió. Después, con la llegada de Daniel Hourcade y de este staff, se armó una combinación perfecta entre los experimentados y los nuevos jugadores. A partir de ahí, volvimos a confiar en nuestro juego, a ser más protagonistas con la pelota, a atacar más, a estar más concentrados y, sobre todo, a seguir nuestro instinto. Porque el objetivo inicial siempre es llegar hasta lo más alto.

Tenemos un juego muy dinámico con la pelota en la mano, en el que hacemos diferencia de tries al marcarlos, una cuestión que antes no se veía demasiado. Jugamos bien al rugby, con intensidad y precisión. Crecimos en las formaciones fijas, tanto en el line como en el scrum. ¿Qué debemos modificar? Nuestra indisciplina a la hora de defender. Porque cuando cometemos penales en nuestro campo, nos cuestan mucho. El ideal es repetir la defensa perfecta que hicimos ante Irlanda.

Jamás traicionamos nuestra esencia, nuestro estilo. Al contrario, lo mantuvimos. Nunca perdimos la cabeza, siempre seguimos con nuestro sistema de juego que nos condujo a focalizar el objetivo y a mantener los pies sobre el piso. Yo esperaba que el equipo jugara así; eso sí: no me imaginaba que íbamos a vencer a Irlanda por tanta diferencia (43-20). Eso me sorprendió bastante.

¿Qué momento definió a este grupo durante el Mundial de Inglaterra? La última jugada ante Irlanda. Ganábamos muy cómodos, y el equipo no se relajaba, no quería que le hicieran el try. Más allá de que teníamos el partido liquidado, seguíamos con la misma euforia en el tackle.

¿Cómo lo describo a Daniel Hourcade? El Huevo es una persona con valores marcados, que siempre sigue sus sueños y sus ideales, y nadie se los cambia. Si él piensa una cosa, va a hacer eso. Creo que siempre anda por el camino acertado. Es un trabajador, un luchador, un estudioso que sabe mucho de rugby, y que le gusta innovar en eso. Le encanta arriesgar. Es auténtico, no se traiciona, y me gusta su forma de liderar.

¿Qué puedo contar sobre la intimidad del plantel? Somos un grupo divertido, genuino, y muy unido. En el Mundial, jugamos un campeonato de dados. ¿Quién fue el culpable? Guillermo Botto, el médico, que los trajo. También, nos entreteníamos al tirar los dardos y nos juntábamos para charlar y mirar videos. La anécdota que nos queda es cuando el Diego se apareció en el vestuario. Fue algo loco, inusual, porque él estaba ahí, pasándola bien junto a nosotros.

¿Qué les digo a mis compañeros? A los más grandes, les pido que disfruten, que lideren, que sigan siendo los jugadores que son. A Juan Imhoff, que meta más tries, que crea en él y que nunca baje la cabeza. A los más chicos, les digo que continúen con esa euforia. A ellos se los trata de aconsejar desde un buen punto de vista, más que nada para que les aporte.

Este equipo no tiene techo. Porque es joven, no se conforma, busca más y más, le gusta el volumen de juego, y va a afrontar dos competencias de un nivel de excelencia durante el año que viene: el Rugby Championship, que es el mejor campeonato anual de selecciones del mundo, y el Super Rugby. Por eso, creceremos aún más como equipo.

Por Agustín Creevy, capitán de Los Pumas / Producción: Darío Gurevich / Fotos: AFP

Nota publicada en la edición de noviembre de 2015 de El Gráfico