El día que Jesús amargó a un Cristiano
CR7 lloró en la final de la Copa del Rey de Campeones de Arabia Saudita al caer por penales con Al Nassr ante Al Hilal, el equipo del brasileño Jorge Jesús.
CRISTIANO RONALDO lloró desconsoladamente una vez que se consumó la derrota por penales de Al Nassr en la final de la Copa del Rey de Campeones de Arabia Saudita. Como si nunca hubiera ganado nada, este animal competitivo de 39 años que rompe redes como en el primer día lamentó mucho lo que sintió como un fracaso.
Su verdugo fue Al Hilal, el conjunto que dirige el brasileño Jorge Jesús y que le ganó cuatro finales consecutivas al cuadro de casaca amarilla. Además, coronó el triplete de títulos en esta temporada, que incluyó el cómodo éxito en la Liga Local que se llevó por 14 puntos de diferencia también sobre su rival de este viernes.
El club al que pertenece Neymar, todavía convaleciente de su grave lesión, podría haberlo ganado en los 90 minutos reglamentarios ya que se puso en ventaja de manera temprana, a los 7' del primer tiempo, por el tanto de Aleksandar Mitrovic. Pero casi en el cierre estampó el empate Ayman Yahya y mandó el choque al suplementario.
Como persistió el 1-1, todo se definió por penales a través de una larga tanda en la que CR7 ejecutó de manera impecable su disparo y en la que el arquero marroquí Yassine Bounou se convirtió en héroe: atajó el anteúltimo disparo, cuando si no lo hacía el título se le escapaba, y el último, con el que aseguró una nueva vuelta olímpica de Al Hilal.
La terna arbitral argentina encabezada por Darío Herrera tuvo protagonismo ya que hubo tres expulsados: el arquero David Ospina, en Al Nassr, y Kalidou Koulibali y Ali Al Bulauhi, los dos centrales del elenco campeón.