La durísima confesión de un atleta argentino de elite con sueños de medalla olímpica
Germán Chiaraviglio, destacado garrochista argentino y ganador de la plata en los últimos Panamericanos, contó su cruda realidad.
Por Redacción EG ·
23 de julio de 2024
GERMÁN CHIARAVIGLIO es uno de los deportistas más destacados de la Argentina, brilla a la carrera con su garrocha en mano y obtiene logros como la medalla de plata en los últimos Juegos Panamericanos de Santiago 2023.
Esa presea también la había obtenido en la misma competencia pero en 2015, en Toronto, al lograr su mejor marca personal hasta el momento: 5,75 metros. Posee el récord sudamericano con un registro de 5,52 y además es el único atleta nacional en llevarse el oro en un Mundial de atletismo.
Sin embargo, en medio de la inminencia de los Juegos Olímpicos de París que comenzarán en pocas horas, el santafesino de 37 años hizo una cruda confesión a través de las redes sociales.
"Luego de ganar mi medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Santiago 2023 y vivir uno de los momentos más hermosos de mi vida, comenzó uno de los peores momentos que me tocó vivir", comenzó su relato.
Debido a unos dolores de cabeza que sufría, decidió hacer una consulta médica "y con estudios complementarios me indican que tengo una insuficiencia renal grave", explicó.
"Se me vino el mundo abajo, los escenarios que venían eran inciertos, complejos, y de repente, de sentirme un atleta fuerte y 'sano', pasé a sentirme alguien con una patología y débil físicamente (y claro, a partir de ahí también emocionalmente). Como si en un segundo me transformara en otra persona", relató con amargura.
Chiaraviglio reconoció que los últimos meses "fueron muy duros, con muchas consultas médicas, conceptos nuevos y una nueva vida intentando entender qué me pasaba, con mil preguntas y dudas".
Tras una biopsia pudo confirmar que padece una enfermedad autoinmune que le afecta la función renal: "un nuevo compañero de vida, no deseado, pero que a partir de ahora será parte de mi equipaje cotidiano", señaló.
Eso no lo amilanó y trató de continuar con los entrenamientos "a veces más, a veces menos", aunque "era muy difícil enfocarme, estaba muy afectado y no podía rendir como pretendía. Lo único que si tenía claro era que moverme fue siempre mejor a no hacerlo. Aún así, costaba mucho".
Ahora realiza un tratamiento que consiste en "muchas pastillas y algunos efectos secundarios lógicos que me anticiparon".
"¿Qué vendrá? ¿Cómo será? No solo desde la salud sino desde lo profesional, esa actividad que me acompañó y atravesó completamente durante más de 20 años", se preguntó el garrochista. Aunque"no hay respuestas aún, o hay algunas, pero tampoco es momento para exigírmelas".
"Es momento para transitar lo que me toca y reconocerme en este nuevo lugar. Como cada desafío que me tocó vivir a lo largo de mi vida, ahora es momento de encarar uno nuevo", concluyó el atleta que participó en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, Río 2016 y que no pudo estar en Beijing 2022 por sufrir de covid, dijo que este "no es un final ni un comienzo" sino "un capítulo más" de una historia que sigue "escribiendo día a día".
