Las Crónicas de El Gráfico

1988. Newell´s: un gran campeón

“Rosario sigue siendo la Capital del fútbol criollo”. Juvenal destaca la conquista del Torneo 87-88 de Newell’s, el único campeón con un equipo formado íntegramente con jugadores de las inferiores del club.

Por Redacción EG ·

06 de junio de 2019

No hay vuelta olímpica de Newell's en la cancha. Simbólicamente, ese festejo se inició una fecha atrás en el estadio de Ferro, cuando millares de hinchas rojinegros celebraron su terminante victoria sobre Argentinos Juniors. Pero este glorioso sábado de mayo, la hinchada no ha podido esperar que la consagración culmine con la vuelta triunfal de los campeones. Con el cuarto gol de River que las radios portátiles gritan en miles de oídos y miles de gargantas multiplican en el Parque Independencia, la impaciencia de la espera derriba todas las murallas. Y en vez de los jugadores, desnudados, abrazados y paseados en andas, da la vuelta olímpica una enorme bandera de Newell's.

Imagen Rossi puso el pase de "zapatilla" por encima de Wiktor. Llegaron Almiron y Balbo. Penal de Islas. Lo pateó Rossi a la izquierda del arquerito lrusta. Inatajable. Ganaba Newell's y perdía San Lorenzo...
Rossi puso el pase de "zapatilla" por encima de Wiktor. Llegaron Almiron y Balbo. Penal de Islas. Lo pateó Rossi a la izquierda del arquerito lrusta. Inatajable. Ganaba Newell's y perdía San Lorenzo...

Es mucho más que el momento esperado ansiosamente durante catorce años. Desde aquel inolvidable 2 de junio de 1974, cuando una volea magistral de Marito Zanabria surcó el aire y se estampó en la red de Rosario Central para darle a los viejos muchachos de Newell's su primer gran alegría en el profesionalismo. Aquella vez también estuvimos en Rosario y vivimos esa consagración rojinegra. Marito, el Mono Obberti, el correntino Berta, el desaparecido Capurro —autor del primer gol, el que inició la gran reacción cuando Central ganaba 2-0— el uruguayo Carrasco. "Cucurucho" Santamaría, el "Chivo" Pavoni, todos los hombres de aquel Newell's Campeón, estaban homenajeando esa tarde a los viejos y queridos próceres. A René Pontoni, a José Canteli, a Morosano, al Piojo Yudica, a Roberto Puppo, a ese bravo zaguero que era Jorge Griffa, a todos esos varones que le dieron a Newell's un estilo de juego, una fisonomía propia, un sello de distinción, una marca de fábrica. Esta celebración de hoy es la consagración de una línea de conducta futbolística.

Imagen El sexto de un 6-1 histórico para una tarde histórica. Lo convierte Abel Eduardo Balbo superando la oposición de lrusta, Ríos y Enrique. Fue otra gran entrega de Almirón como la del tercer gol de Alfaro.
El sexto de un 6-1 histórico para una tarde histórica. Lo convierte Abel Eduardo Balbo superando la oposición de lrusta, Ríos y Enrique. Fue otra gran entrega de Almirón como la del tercer gol de Alfaro.

El concepto abarca por igual a todos los  que terminan poniendo en la cancha un espléndido equipo de fútbol... A una política directiva que sigue la misma huella, desde Armando Botti al actual presidente Eduardo María Gallo. Esa huella es la que hoy culmina con un plantel campeón hecho íntegramente en el club, caso único en 58 temporadas de profesionalismo argentino. El gran artífice de ese trabajo que ya lleva quince años, como lo remarca José Yudica sin perder la calma ni el equilibrio en la hora del gran festejo, es Jorge Bernardo Griffa, el hombre que elige y conduce, año tras año, a los futuros cracks. Pero esa enorme, esa casi milagrosa capacidad de autoabastecimiento, no se agota en los jugadores y el director del Departamento Amateur. También el técnico y sus colaboradores nacieron y crecieron en Newell's. El Piojo Yudica y su ayudante, Roberto Jesús Puppo, eran compañeros en el equipo infantil del Evita Morning Star de los años cincuenta. Entraron juntos a Newell's y jugaron juntos en primera. José Yudica junior, el hijo del técnico, preparador físico del plantel, jugó en las inferiores rojinegras con el Tata Martino y con Víctor Rogelio Ramos. Hasta el utilero, Elio Barro, fue jugador de la primera del club a fines de los arios sesenta.

 

Imagen Con la camiseta alternativa, en el vestuario después del partido.
Con la camiseta alternativa, en el vestuario después del partido.
 

Tuvo razón Benito Pujol, veterano rojinegro que no olvida su condición de consignatario de hacienda, cuando proclama que Newell's es un club de "marca líquida". Se les dice así a los establecimientos de campo que sólo trabajan con productos propios. Nos contaba su vicepresidente Luis Boselli que, cuando arreglaron las condiciones contractuales de Yudica y le preguntaron por el premio del campeonato, el Piojo les contestó: "¡Qué premio puede ser mejor que salir campeón con Newell's... ".

Imagen Las tribunas rebalsadas y los hinchas invadiendo el campo de juego para celebrar la conquista.
Las tribunas rebalsadas y los hinchas invadiendo el campo de juego para celebrar la conquista.

Por eso, este fútbol alegre y serio a la vez, rebosante de responsable creatividad e inteligente dinamismo, basado en el respeto por la pelota y el espectáculo, este fútbol que acaba de coronar a un estupendo campeón, es algo que a todos les viene de adentro. Juegan así porque así lo sienten. Lo sienten así porque de esa manera se los inculcó Grilla, se los repitió ayer el Indio Solari y se los viene machacando, desde julio de 1987, José Yudica.

Imagen En andas, sí, aunque mucho no le gusten los festejos. La sonrisa ancha para recibir el gesto de Roque Alfaro y Sergio Almirón. Yudica recibió una ovación, Newell's por fin pudo dar la vuelta olímpica y vibró.
En andas, sí, aunque mucho no le gusten los festejos. La sonrisa ancha para recibir el gesto de Roque Alfaro y Sergio Almirón. Yudica recibió una ovación, Newell's por fin pudo dar la vuelta olímpica y vibró.

¿Qué le faltaba a Newell's para consagrarse vencedor a dos fechas de la terminación del torneo? Sentirse ganador en todos lados. Archivar el mal recuerdo de las recientes frustraciones. No seguir llorando más por haber sido segundo de Rosario Central en el último torneo. Superar los complejos de la única manera que sabe y siente: jugando al fútbol. Tener un entrenador que ya mostró su fibra de triunfador en Quilmes, San Lorenzo o Argentinos Juniors, era otro motivo para sentirse seguro y confiado. Contar con el retorno de Roque Raúl Alfaro después de haber conquistado todo con River, también. Los hinchas de Central, los "canallas" que son tan fanáticos como ocurrentes, pueden seguir desparramando su última humorada: 'La cancha de Newell's es la más grande del país porque se tarda 14 años en dar la vuelta olímpica...". Esas cargadas ya no amargan a los rojinegros. Este momento que están viviendo tapa todo lo anterior.

 

Imagen La emoción de Gerardo Martino al conseguir el título.
La emoción de Gerardo Martino al conseguir el título.
 

Este último sábado, el Campeón le pasó prolijamente por encima a Independiente y lo despachó con una goleada histórica. La expulsión de Islas y la necesidad de reemplazarlo con un arquero de quinta división le facilitó el trabajo de demolición. Pero Newell's ya venía demostrando que era, lejos, el mejor de todos. Porque debió ganarle a Independiente en la primera rueda y no pudo, debido a una gran noche de Islas. Les pintó la cara a Racing, a Boca las dos veces, a River como visitante igual que a Vélez y Deportivo Español. Los números que damos en otras páginas demuestran la excelencia de su campaña. "Cuando un equipo señala tantos goles más que el resto, está todo dicho. Y cuando saca 44 goles de diferencia entre convertidos y recibidos, eso le da la pauta de su equilibrio y su potencia. Lo dice Yudica. Y es tan incontrastable como el fútbol que nos regaló Newell's. El mismo que nos viene obsequiando desde 1939, cuando ingresó a los torneos de la AFA para aportar su cuota de exquisitez, alegría y buen gusto. El que practicó en las épocas buenas y malas, insobornablemente.

Imagen El equipo campeón, conformado íntegramente por jugadores surgidos de la cantera leprosa.
El equipo campeón, conformado íntegramente por jugadores surgidos de la cantera leprosa.

Rosario sigue siendo la Capital del fútbol criollo. Los próceres descansan en paz.

 

 

Por JUVENAL

Fotos: NORBERTO MOSTEIRIN, HUMBERTO SPERANZA y ENRIQUE y MARCELO BOERI.