Las Crónicas de El Gráfico

1925. Conversando con Pedro Ochoa

“Hemos querido proporcionar la oportunidad de que nuestros lectores conversen con Ochoa”. En 1925 El Gráfico entrevista a quien denomina el mejor forward argentino, “Ochoita”, el crack de Racing.

Por Redacción EG ·

10 de enero de 2019
Imagen Semblante hosco, estampa típica del arrabal porteño, espíritu inquieto y mente vivaz caracterizaron a Pedro Ochoa, el gran delantero de Racing, que fue uno de los más hábiles dominadores de la pelota.
Semblante hosco, estampa típica del arrabal porteño, espíritu inquieto y mente vivaz caracterizaron a Pedro Ochoa, el gran delantero de Racing, que fue uno de los más hábiles dominadores de la pelota.

 

 

 


NUESTROS GRANDES JUGADORES DE FOOTBALL

PEDRO Ochoa es, incuestionablemente, el mejor forward argentino. Cuando se hace una afirmación como la que antecede, es porque el que la formula no tiene en cuenta el concepto de la responsabilidad de sus afirmaciones o porque, como en este caso, tiene la íntima convicción de lo que afirma. En football quizá más que en otros deportes, difícilmente se puede decir hoy lo que se dijo hace dos meses respecto a la capacidad de los jugadores. Hemos visto muchas veces descollar a un jugador en un partido, y en el siguiente, cuando decimos al que nos quiere oir, antes de iniciarse la lucha, que ese jugador es un verdadero crack, éste se encarga de dejarnos poco menos que en ridículo al realizar una performance mediocre o detestable. Respecto de Ochoa, ese temor desaparece, Hace muchos años que el inside derecho de Racing juega en forma sobresaliente. Tiene todas las cualidades que pueden consagrar a un forward si exceptuamos la de la fuerza; su complexión física está muy lejos de ser atlética: diminuto, delgado, de tórax mezquino y ligeramente encorvado de espaldas, su figura no dice, realmente, cuando hablamos con él, que tenemos enfrente a un jugador que en los campos de juego entusiasma a las multitudes por sus acciones hábiles y brillantes. Suspicaz, ágil, veloz y de spot regularmente potente, juega a su antojo; obliga a concentrarse o abrir a la defensa contraria; hace jugar a sus compañeros a voluntad, facilitando su labor, pues rara vez pasa la pelota a quien no se halla en condiciones de recibirla libremente; a veces, muchas veces, perseguido por su rival, amaga que se dirige a la izquierda y lo elude por la derecha, engañándolo invariablemente, aunque éste sepa de antemano que su adversario utilizará la maniobra que tanta fama le diera. Tiene un dominio único sobre la pelota, y es esta cualidad, sin duda, el secreto de sus éxitos asombrosos; pasa e impulsa la pelota desde cualquier posición y a la dirección deseada, esté libre o acosado por sus adversarios; pocas veces señala tantos, pues prefiere dejar esa tarea a sus compañeros de línea, pero cuando los obtiene. generalmente llevan lo que podríamos llamar su "marca de fábrica": son magníficos y por su concepción y forma en que los ejecuta, por lo común, de manera inesperada te hemos visto señalar goals en circunstancias en que, al iniciar la lucha, él mismo no creyó terminaría por su sola acción ; avanza con la pelota acosado por un defensor contrario y disminuye su velocidad; de pronto, cuando parece que va a efectuar un pase, se desprende velozmente del rival y de los que le salen posteriormente al encuentro, para terminar su acción con el tiro definitivo, certero y rápido, al goalkeeper.

Imagen En esta fotografía histórica del Racing glorioso aparece Ochoita entre el arquero Devoto y el half Alfredo López, delante de los zagueros Barreto y Reyes. En primer término, con el sombrerito en la mano, Alberto Ohaco, el "anagrama" de Ochoa,
En esta fotografía histórica del Racing glorioso aparece Ochoita entre el arquero Devoto y el half Alfredo López, delante de los zagueros Barreto y Reyes. En primer término, con el sombrerito en la mano, Alberto Ohaco, el "anagrama" de Ochoa,


Reconocemos en Ochoa no al crack del momento, sino al definitivo, al de siempre; al que nació con la intuición del juego y que hace pensar, si aprendió a jugar o si nació sabiendo. Los datos y opiniones de jugadores como éste, resultan en todo momento de interés indudable y hemos querido proporcionar la oportunidad de que nuestros lectores conversen con Ochoa breves instantes. Lo interpelamos en circunstancias que se hallaba en el vestuario de River Plate, antes de iniciarse el partido que su club jugaba contra Defensores de Belgrano.

— ¿Cuántos años tiene usted? — le preguntarnos.

—Veinticuatro — nos contestó.

— ¿Hace mucho tiempo que practica el football? —Desde mi infancia. Me inicié, sin embargo, en 1914 actuando en una cancha de juego en condiciones reglamentarias, en un equipo del Club Independiente que, aunque sin categoría, podría llamarle de quinta división.

— ¿En qué puesto? —En el mismo que ocupo actualmente; de insider derecho; formaba ala con Pascual Garré; y según dicen, nos entendíamos muy bien, En el mismo equipo jugaba Ventureira que fué en sus tiempos, uno de nuestros mejores halves izquierdos.

—Después de Independiente, ¿en qué club actuó? —En Racing. Pasé a mi actual club para jugar en cuarta división e hice carrera rápida. Cuando Alberto Ohaco decidió abandonar la práctica del juego activo, ocupé su plaza y creo que, aunque no tan bien como mi antecesor, me desempeño satisfactoriamente.

— ¿Se entiende con Perinetti? —Ustedes lo pueden apreciar mejor que yo; creo que nos entendemos admirablemente; por otra parte Perinetti es ágil, veloz y muy conocedor de su misión, de manera que por poco que yo juegue debemos entendernos convenientemente.

Imagen Perinetti y Ochoa, una dupla letal de la Academia.
Perinetti y Ochoa, una dupla letal de la Academia.


— ¿Qué opina usted del encuentro que va a jugar? —Que será muy reñido y difícil, pero ganaremos; tengo la convicción de que ganaremos; nuestro equipo es más completo y aguerrido que el de Defensores de Belgrano.

— ¿Piensa usted dejar de jugar? —Serían mis deseos continuar jugando, pero no todos los domingos; aunque quisiera hacerlo así no me lo permitirían.

— ¿Cambiará de club?— Eso no; me encuentro muy cómodo y satisfecho en el Racing Club.

— ¿De qué proviene su actitud de no intervenir en los partidos de teams representativos? —Les diré: mis propósitos son los de responder al honor que se me hace y algunas veces presté mi concurso, pero por lo general, cada vez que hubo partidos internacionales o Campeonato Argentino y fui designado, no me encontraba en condiciones; yo estoy continuamente lesionado; los backs y halves me dejan tranquilo; cuando estoy lastimado no quiero actuar porque no deseo fracasar en partidos de importancia; a veces juego en Racing en malas condiciones pero lo hago porque en antecedentes de mi estado no me exigen que de más de lo que puedo dar. Sólo recuerdo haber renunciado a un equipo representativo estando en perfectas condiciones y fué cuando se realizó la última lira a Chile; pero mi club necesitaba de mi concurso; me lo pidieron personas a las que no puedo negar un servicio y me quedé, crean que con todo sentimiento.

Si fuera designado para ocupar otra vez un puesto de responsabilidad en partidos internacionales, y me hallo en forma, aceptaré con todo entusiasmo, pues sé bien que es un honor que se me hace.

Imagen Ochoa nació en 1900, debutó en Racing en 1916 y se retiró en 1931. En la Selección ganó el Sudamericano de 1927 y la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de 1928.
Ochoa nació en 1900, debutó en Racing en 1916 y se retiró en 1931. En la Selección ganó el Sudamericano de 1927 y la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de 1928.


— ¿Qué opina usted del reciente Campeonato Argentino? —Que se ha demostrado que los jugadores del interior son tan buenos como nosotros; sólo les falta un poco más de picardía para sacar provecho de sus habilidades. Bien pronto ganará el campeonato algún team de provincias, vean sino cómo jugó el de Santiago del Estero que pudo ganarle a Capital.

— ¿Cuál es a su juicio el mejor guardavalla argentino? —Dicen que Tesorieri; yo no puedo asegurarlo porque a los jugadores de la Asociación Argentina los tengo perdidos de vista; a mí me gustan Croce e Isusi; el vasco es, a veces, insuperable.

— ¿El mejor back? —Entre Recanatini y Ucar; para mí me resulta más difícil de pasar Ucar; es muy tesonero y seguro.

— ¿El mejor half? —Derecho, Napoleoni y Tassara: de centro, Monti y después Zumelzú y de izquierda Célico.

— ¿Los forwards más hábiles? —Perinetti y Zoilo Canaveri en wingers derechos; Caldas, corno centre forward y Orsi y Luna, el santiagueño, de wingers izquierdos, aunque Orsi casi me gusta más de insider por su recio tiro.



— ¿Tiene alguna anécdota que contar? —Sí, tengo muchas, pero lo que causó más gracia es una broma que hicimos recientemente. Nos entrenábamos para jugar contra Platense y debíamos ir a la cancha de noche con un frío de mil demonios. Bussolini se había hecho muy amigo mío y siempre íbamos juntos. Un día combiné con tres amigos darle un susto a Bussolini; cuando íbamos llegando con éste a la cancha se nos aparecieron los tres amigos con revólver simulando un asalto; Bussoliní, lívido de terror, les ofreció 1 peso y centavos que era lo único que tenía; aquellos lo obligaron a entregarles el sombrero y el saco y con el frío que hacía Bussoni tuvo que ir en mangas de camisa hasta la cancha muy contento, sin embargo, de haberse salvado el pellejo.

 

El Gráfico 1925