¡Habla memoria!

El entrañable recuerdo de Mirko Saric

El joven volante de San Lorenzo decidió ponerle fin a su vida en el año 2000. Tenía apenas 21 años.

Por Julián Marcel ·

04 de abril de 2024

"Hay que ponerse un poco del otro lado y pensar cómo es un mundo en el que a los 32 años, en algunos casos menos, uno se jubila. Es inimaginable saber lo que pasa cuando uno sale a la cancha a cumplir con los deseos de otra mucha gente. Toda esta es una presión enorme y es un milagro que no destruya más chicos de los que ha destruido". Son declaraciones de Osvaldo Soriano en la Feria del Libro de Buenos Aires, en 1995.  

Imagen Mirko Saric en una producción para El Gráfico, año 1998
Mirko Saric en una producción para El Gráfico, año 1998
  

"Mirko, el desayuno está listo", le dijo Ivana Saric a su hijo, pasadas las once de la mañana del 4 de abril de 2000. Al verlo durmiendo decidió volver al comedor. Una hora después la madre volvió a la habitación que compartían los hermanos en la casa de la calle Fabre al 1200, en el barrio de Flores. Y la imágen que encontró fue la de su hijo ahorcado con una sábana, a la que había atado sobre una barra que su hermana Mirna utilizaba para hacer ejercicio. Inútiles fueron los esfuerzos de ellas y algunos vecinos para tratar de reanimar el cuerpo. Para cuando la ambulancia había llegado el veredicto era definitivo: Mirko Saric estaba muerto. Tenía 21 años. 

El día que Mirko Saric nació, Argentina jugaba su segundo partido por la zona de grupos del Mundial 78 contra Francia, el 6 de junio, pero su bautismo con el fútbol profesional fue el 22 de diciembre de 1996, cuando en la derrota de San Lorenzo contra Unión en Santa Fe por 2 a 0, ingresó a los 41 minutos del segundo tiempo en reemplazo de Pipo Gorosito.

Si bien tuvo una continuidad a partir de 1998, desde ese partido vistió la camiseta azulgrana durante 52 partidos, marcando cinco goles. El primero de ellos fue en la derrota contra Racing el 22 de febrero de 1998, y el último también contra Racing por el Clausura 99, el 20 de junio cuando su club goleó 4 a 0. Su último partido fue el 3 de diciembre del mismo año, en el triunfo contra Vélez por 2 a 0 cuando ingresó a los 15 minutos del segundo tiempo en reemplazo de Walter Erviti.

Imagen Mirko Saric y Oscar Ruggeri miran San Lorenzo - Ferro el 31 de marzo de 2000, cuatro días antes de la muerte de Mirko.
Mirko Saric y Oscar Ruggeri miran San Lorenzo - Ferro el 31 de marzo de 2000, cuatro días antes de la muerte de Mirko.
Los datos fríos no mostraban lo que realmente ocurría con Mirko: él era víctima de una depresión que era conocida dentro del plantel, como también en el cuerpo técnico y dirigentes del club de Boedo, pero a su vez su familia ya contaba con un profesional de la psiquiatría para su tratamiento. Su perfil público lo mostraba risueño, incluso estuvo mirando la victoria de su club contra Ferrocarril Oeste, cuatro días antes de su decisión.

La nota de El Gráfico del 11 de abril de 2000, titulada "Recordando a Mirko", contenía declaraciones de sus compañeros y amigos del club que mostraban a su amigo como una persona amorosa y llena de bondad. Entre otros jugadores, el Chupa López, Bernardo Romeo, Oscar Passet, Albano Bizarri y Guillermo Franco decían, además, que Mirko era una persona curiosa: "Lo que me llamaba la atención era su interés por hablar con los grandes para aprender de fútbol", decía Passet.

Una de las declaraciones más emotivas de la nota fue una frase que destacó Roberto Mariani, quien fue su técnico en las divisiones inferiores: "Un día, mientras charlábamos de fútbol, me dijo algo que hoy me conmueve: 'Yo voy a tratar de llegar, pero si no llego,  voy a tratar de ser algo en la vida'".

En diciembre de 1999, mientras disputaba un partido de reserva contra River, sufrió la rotura de sus ligamentos cruzadosque, sumado a un pase fallido al Real Madrid por 10 millones de dólares y que San Lorenzo rechazó por ser baja la oferta, agravaron su cuadro depresivo. Lo que determinó su desenlace fue un conflicto personal que tuvo con la que era su pareja en aquellos años, tras enterarse que el hijo que esperaba no era suyo. Oscar Ruggeri declaró once años después que el mismo Saric le dijo, pocos días antes de su suicidio, que no le encontraba sentido a la vida, más allá de todo lo que estaba logrando siendo tan jóven. "No pasa por ahí", le dijo el volante. 

La noticia se esparció rapidamente, y la misma dirigencia azulgrana se encargó de todo lo referente a su velorio. El equipo debía disputar dos partidos en esa semana: uno, el 6 de abril contra Cerro Porteño por la Copa Libertadores y que, por presiones del equipo paraguayo, se debió jugar (el equipo argentino perdió 3 a 1 y quedó eliminado), y otro, el domingo 9 contra Boca en el Nuevo Gasómetro: más allá del resultado (Boca ganaría 1 a 0 con gol de Riquelme), en la previa del partido la hinchada de San Lorenzo le demostró su afecto a los familiares de Mirko que ellos recibieron emocionados

Imagen La familia de Mirko Saric recibe el afecto de la hinchada azulgrana, el 9 de abril de 2000.
La familia de Mirko Saric recibe el afecto de la hinchada azulgrana, el 9 de abril de 2000.
 

LA DEPRESIÓN EN EL FÚTBOL 

Si bien este caso generó impacto no solo por el nombre si no por la edad de Mirko, no sería el último: la depresión es uno de los temas sobre los cuales se habla poco dentro del ambiente futbolístico, como así también el machismo y su homofobia, entre otros. Pero lo que no es menos importante, es que la depresión en el fútbol es más común de lo que se cree. Un informe llevado a cabo por la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro) en 2015 mostró un dato preocupante: un 38 % de los jugadores profesionales en activo notificaron síntomas de depresión en 2015. "Eso significa", dice el informe, "que hasta nueve futbolistas profesionales de un grupo de 25 personas podrían estar padeciendo síntomas de trastornos psíquicos comunes como el estrés psicológico, la ansiedad o la depresión".

La práctica profesional o semi profesional del fútbol ejerce sobre sus protagonistas una carga de presión sobre los resultados a obtener, y también sobre ocupar un lugar dentro de los equipos. El mismo Saric había sido chiflado en más de una oportunidad por la hinchada de San Lorenzo. Este tipo de presiones son peores en los jugadores retirados, que a la edad de 40 años ya son "jubilados" para el mundo del fútbol. El mismo informe de la FIFPro indica que en ellos el 28% tiene problemas para dormir, y la depresión y la ansiedad afectan, respectivamente, al 13% y al 11%. Hasta el año pasado, ni un tercio de los equipos profesionales de nuestro país cuenta con un psicólogo deportivo dentro del plantel. Y antes de Saric, y después de él, la lista de nombres de jugadores que decidieron poner fin a su vida aumentó, solamente en Argentina: Julio César Villagra, Alberto Vivalda, Oscar Shulmeister, Santiago Morro García, Julio César Toresani, Samuel Rebollo, Mariano Alberto Gutiérrez, Héctor Larroque, Ramiro Castillo, Claudio Apud, César Borda, Leandro Cogrossi, Alexis Ferlini y Leandro Latorre son algunos de esos jugadores. 

Imagen Una de las banderas colgadas en el Nuevo Gasómetro el 9 de abril de 2000.
Una de las banderas colgadas en el Nuevo Gasómetro el 9 de abril de 2000.
 Todo problema de salud mental requiere de una atención urgente, y en la ciudad de Buenos Aires, el 0800-333-1665 es la línea en la que se pueden comunicar para el tratamiento de la salud mental. Con el mismo fin, el 0800-999-0091 es el número pára llamar a nivel nacional. }

Foto de portada e interiores: Archivo El Gráfico.