Selección Argentina

Band of brothers, versión futbolera: el placer de jugar con amigos

Para Lionel Messi y los símbolos más salientes de la Scaloneta, unirse a la Selección Argentina va más allá de ganar partidos y campeonatos.

Por Adrián Wowczuk ·

07 de septiembre de 2023

LA SELECCIÓN ARGENTINA está en su bunker de Ezeiza a la espera del primer partido de las Eliminatorias Sudamericanas frente a Ecuador, rumbo al Mundial 2026. Pero al margen de las obligaciones que genera la competencia, no es una espera tensa. Es una espera agradable en la que viejos amigos y camaradas de mil batallas vuelven a encontrarse. Recuerdan cuando debían lamerse las heridas y celebran que hayan cicatrizado a través de un proceso en el que pasaron de ser villanos a héroes. Pero siempre juntos.

El total y absoluto abanderado de esa metamorfosis que les hizo comer mierda primero y saborear la gloria después no es otro que Lionel Andrés Messi. Y a su alrededor un séquito de soldados que siempre lucharon espalda con espalda con su general, gozan de su bien ganada posición de líderes en un grupo armonioso y monolítico.

Band of Brothers, la recordada serie de principios de los 2000 que narraba las historias de la Easy Company, un grupo de paracaidistas que encarnó épicas batallas durante la Segunda Guerra Mundial, es un poco el espejo en el que se miran estos guerreros otrora despreciados y alabados en la actualidad por todo un país que enarboló las banderas del arrepentimiento al estilo de aquella consigna convertida en trapo: "Perdón, Bilardo".

Hoy, el predio de la AFA que lleva como homenaje en vida el nombre del héroe al que alberga para que genere muchas más buenas que hagan olvidar tantas malas, es una suerte de Gran Hermano futbolero que funciona como epicentro del ansiado reencuentro. Los soldados bastardeados por las finales perdidas en 2015 y 2016, y por el inexplicable fracaso del Mundial de Rusia, recorren con gusto miles de kilómetros para refugiarse detrás de las mismas paredes que supieron funcionar poco menos que como un centro de rehabilitación y hoy son los aposentos del Palacio Real Albiceleste.

Hoy es tiempo de disfrutar y, por qué no, de compartir con la gente esa felicidad. Con las redes sociales como instrumento, el propio Leo se encarga de mostrarle a sus 450 millones de seguidores en Instagram esa foto que es resumen de hermandad cocinada al fuego lento de los fracasos y de los éxitos. Hay, es cierto, un par de jóvenes reclutas que se ganaron el cariño de los veteranos y que les mostraron respeto cuando comenzó su tiempo en la Selección y entendieron que la sabiduría de los patriarcas sería fundamental para encarar el futuro con sangre joven.

 

"Nadie nos va a quitar todo lo que conseguimos", afirmó Rodrigo De Paul en sus redes sociales al integrarse al grupo, y acaso no se refiera sólo al éxito deportivo transformado en medalla y Copa, sino a otras vivencias que enriquecen el alma y fortalecen como persona, hechas realidad a través de una pelota de fútbol.

 

Imagen Lionel Messi y Rodrigo De Paul, una amistad de la que el 10 se enorgullece en Instagram.
Lionel Messi y Rodrigo De Paul, una amistad de la que el 10 se enorgullece en Instagram.
 

Leo Messi, Nicolás Otamendi, Ángel Di María, Leandro Paredes y Rodrigo De Paul son mucho más que el quinteto sonriente de una imagen viral que refleja su alegría por otro día de trabajo en la oficina rodeado de amigos. Son el fuego nuevo y ardiente que resurgió de las brasas casi hechas ceniza en la hoguera del desencanto. Porque la llama de la amistad, como la del ansia de gloria, nunca se apaga.

 

Imagen Otamendi y Di María, la amistad de la Selección y en el día a día de Benfica.
Otamendi y Di María, la amistad de la Selección y en el día a día de Benfica.