Las Crónicas de El Gráfico

1939. Justo fue el triunfo de Gimnasia sobre Estudiantes

Gran crónica de Sobrepique –Frascara– sobre el apasionante clásico platense de 1939, donde Gimnasia resultó vencedor por 2 a 0 a Estudiantes, el fútbol no fue lo más destacado, sino la pasión de ambas hinchadas.

Por Redacción EG ·

17 de julio de 2019

Colmado el estadio como en las grandes épocas — la del 31 para Estudiantes, la del 33 para Gimnasia, — el ambiente había sido preparado de modo muy propicio por el interesantísimo partido de las cuartas, en el que correspondió el triunfo a los pinchas. Aunque este año ninguno de los dos equipos superiores reunía un poderío extraordinario, el fervor popular se manifestó igualmente, porque en la tabla los separaba un solo punto y — razón poderosa superior a todas las razones — porque iba a discutir... se una vez más la nunca definida primacía local. Estos partidos entre los rivales de La Plata tienen aspectos distintos a los de otros clásicos. Son más "clásicos".

Conservan el mismo carácter de otras épocas. Y contagian. Es poco menos que imposible sentirse ajeno por completo a la cuestión.

Imagen Ante un pase de Zozaya, el puntero Taboada se cerró sobre el arco visitante y shoteó. Yustrich detuvo con seguridad, en tanto Taboada se caía espectacularmente, rodando por el césped, con lo cual daba la impresión de que Blanes le hubiera hecho foul, pero no existió en realidad esa infracción.
Ante un pase de Zozaya, el puntero Taboada se cerró sobre el arco visitante y shoteó. Yustrich detuvo con seguridad, en tanto Taboada se caía espectacularmente, rodando por el césped, con lo cual daba la impresión de que Blanes le hubiera hecho foul, pero no existió en realidad esa infracción.
 

DOMINIO... DE CAMPO

El marco popular de estos matches suple muchas veces, en ocasiones con ventaja, la ausencia de calidad en el juego. Este defecto es común a los partidos llamados clásicos. La responsabilidad junto al ferviente deseo de ganar colocan a los nervios en primer plano. Se repitió el caso en esta oportunidad. No fue un buen partido, pero sí un espectáculo interesante. Y del espectáculo formaron parte las tribunas, especialmente la de los visitantes. Corno sucede en Rosario, donde la hinchada de Central es más expansiva que la de Newell's, en La Plata cuenta Gimnasia y Esgrima con un apoyo popular de mayor volumen. Desde que se inició la lucha, Estudiantes tomó posesión del campo adversario. Sus líneas se tendieron hacia adelante. La defensa de Gimnasia — donde hacía su debut el centre half uruguayo Scarone — empezó a trabajar con ahinco, destacando las figuras de los zagueros y, entre ellos, la de Delovo. Los ataques del conjunto local eran desorganizados, pero — cosa peor aún —resultaban además inofensivos porque los insiders retardaban el juego. Pronto se advirtió que el dominio era sólo aparente. Y la sensación de que Gimnasia podría ganar cundió con el primer avance de sus forwands. Era la táctica inversa: juego rápido, pases largos y búsqueda del arco.

Imagen El back Palma acaba de adelantarse a la intervención de Pérez, centre forward visitante, echando la pelota a corner.
El back Palma acaba de adelantarse a la intervención de Pérez, centre forward visitante, echando la pelota a corner.
  

 

Imagen El winger Rocha, autor del primer gol de Gimnasia y Esgrima.
El winger Rocha, autor del primer gol de Gimnasia y Esgrima.
  

 

EFECTIVIDAD

Cada vez se hacía más difícil admitir que Estudiantes pudiera ponerse en ventaja. El adversario, en cambio, estaba brindando una lección de práctica. Con todo, los mejores valores de ambos teams figuraban en sus respectivas defensas. El dominio "pincha" fue decreciendo. La línea media se cansaba de apoyar sin resultado. Los punteros de Gimnasia, veloces y decididos, colocaron centros que la zaga local rechazó bien. Era evidente, sin embargo, que por el camino recto, por el de la efectividad, los "mens sana" iban a llegar a la meta antes que los de la casa. Así, aunque hasta ese momento había atacado más Estudiantes, no extrañó el gol de Rocha. Llamó la atención, sí, por su dificilísima y extraña factura.

 

Imagen Blanes trata de impedir que Zozaya alcance la pelota, enviada hacia el centro por Pellegrina. Fracasó la delantera local.
Blanes trata de impedir que Zozaya alcance la pelota, enviada hacia el centro por Pellegrina. Fracasó la delantera local.
 

Imagen Un gol magnifico fue el primero de Gimnasia y Esgrima, sorprendido en esta escena. Rocha recibió el pase de Farías, eludió a De Angens y despidió un tiro alto de extraordinaria precisión.
Un gol magnifico fue el primero de Gimnasia y Esgrima, sorprendido en esta escena. Rocha recibió el pase de Farías, eludió a De Angens y despidió un tiro alto de extraordinaria precisión.
 

Imagen Evaristo Delovo, el veterano zaguero de Gimnasia, volvió a demostrar su gran calidad.
Evaristo Delovo, el veterano zaguero de Gimnasia, volvió a demostrar su gran calidad.
 

MEJORA GIMNASIA

El primer período había sido interesante. Con tácticas distintas, ambos teams desplegaron un juego vivo y entusiasta. Al segundo tiempo entró Estudiantes con evidentes ansias de lograr el empate a corto plazo. Los halves volvieron a constituirse en protagonistas. Pero Gómez, Cirico y Pellegrina defeccionaron lamentablemente y Zozaya tenía que andar a la pesca de la pelota, sin que le llegara un solo pase bueno, sin que sus compañeros de línea atinaran a atraer la defensa contraria para procurarle al centre forward la ocasión de entrar libre en juego. Tranquilo en cuanto al riesgo que pudiera correr su propia valla, Gimnasia mejoró su actuación, cobró más aplomo y evidenció una superioridad que se hizo efectiva, con otro espléndido gol, logrado esta vez por Pérez.

La espléndida tarde fue de fiesta completa para la tumultuosa hinchada "tripera". El triunfo quedaba asegurado.

Imagen Gimnasia y Esgrima, que venció por 2 a 0 en el clásico match platense. De izquierda a derecha, de pie: Blanes, Bechio, Scarone, Yustrich, Delovo y Tombell. Agachados: Rocha, Pérez, Fidel, Cerioni y Arreghi. Rocha y Pérez fueron los scorers; Delovo y Blanes, las mejores figuras del equipo.
Gimnasia y Esgrima, que venció por 2 a 0 en el clásico match platense. De izquierda a derecha, de pie: Blanes, Bechio, Scarone, Yustrich, Delovo y Tombell. Agachados: Rocha, Pérez, Fidel, Cerioni y Arreghi. Rocha y Pérez fueron los scorers; Delovo y Blanes, las mejores figuras del equipo.
 

Imagen El team de Estudiantes de La Plata, clasificado de acuerdo con nuestra opinión. De izquierda a derecha, de pie: Sbarra, De Angelis, Ledesma, Blotto, Farías y Palma. Agachados: Taboada, Gómez, Zozaya, Cirico y Pellegrina. Lo mejor del equipo fue la línea media y De Angelis.
El team de Estudiantes de La Plata, clasificado de acuerdo con nuestra opinión. De izquierda a derecha, de pie: Sbarra, De Angelis, Ledesma, Blotto, Farías y Palma. Agachados: Taboada, Gómez, Zozaya, Cirico y Pellegrina. Lo mejor del equipo fue la línea media y De Angelis.
 

 

UNOS Y OTROS

La victoria de Gimnasia y  Esgrima, lograda en mérito a una actuación más homogénea y a una táctica más acertada, se justificó también en el aspecto individual. Muy bueno el triángulo defensivo, donde sobresalió ese alto valor de nuestro fútbol que es Evaristo Delovo; aflojó la línea media, en la que sólo actuó realmente bien el half derecho Becchio, y tuvo sus mejores figuras del ataque en el insider izquierdo Cerioni, cordobés muy joven con excelentes aptitudes, y en Rocha. Blotto, Farías y Sbarra fueron, en conjunto, quienes formaron la mejor línea del team perdedor. Ledesma estuvo sólo discreto en el arco, De Angelis superó en la zaga a Palma, muy indeciso, en tanto que el ataque fue de una ineficacia casi absoluta. Por su afán de hacer, más que por lo que hicieron, merecen citarse Taboada y Zozaya. Si el gran centre forward jugó con este su último encuentro oficial, como él lo asegura, es realmente lamentable que no haya de despedirse con una performance digna de sus prestigios.

Imagen Los hinchas "triperos" habían llevado banderas y estandartes. Después del match los pasearon en triunfo por las calles platenses.
Los hinchas "triperos" habían llevado banderas y estandartes. Después del match los pasearon en triunfo por las calles platenses.
 

 

 

Por Sobrepique.