Rival: Brasil. Lugar: Buenos Aires. Motivo: Eliminatorias 2006. En ese contexto, Sorin, con su zurda, la pisó dos veces hacia atrás y con la derecha le metió un caño hermoso a Ronaldinho. Así era Juampi: pese a su profesionalismo, entendía el juego como un espectáculo. Se brindaba al máximo, tanto para recuperar un balón como para atacar o exhibir alguna joyita. Un distinto. Era lateral izquierdo, pero tenía una técnica similar a la de un enganche. Jugaba de 3, pero con sus diagonales parecía pisar el área rival más veces que algunos delanteros, sobre todo durante su mejor etapa en la Selección: la era Bielsa. Con su melena negra al viento y con sus múltiples pulmones, jugó dos Mundiales: 2002 y 2006. En el último fue el capitán del equipo. En 1995 también se había puesto la cinta en el brazo: ocurrió en el Mundial Sub 20, en Qatar, donde levantó la Copa del Mundo en aquel primer juvenil de Pekerman. Pruebas evidentes de que desde el principio se llevó bien con la albiceleste. En Brasil, la tierra de los laterales, es considerado uno de los mejores 11 jugadores de la historia del Cruzeiro.
Carnet de ídolo
Nombre y apellido: JUAN PABLO SORIN.
Nació: 5/5/1976 en Capital Federal
Jugó: 75 partidos entre 1995 y 2005
Goles: 11
Mundiales: 2002 y 2006
Títulos: 0
