Romario liquidó a la actual Selección de Brasil

LA SELECCIÓN DE BRASIL transita uno de los peores momentos de su historia, lejos de los brillos que la llevaron a ser la pentacampeona del mundo y en una crisis de identidad que la lleva a estar acéfala y hasta con la extraña intención de incorporar a un entrenador foráneo, algo impensado para la idiosincrasia de la Verdeamarela, como ocurrió cuando arreciaron los rumores de que Carlo Ancelotti podría hacerse cargo del equipo.

Romario, uno de los más legendarios delanteros que hayan vestido esa camiseta, hizo un duro diagnóstico y le cayó con todo a los futbolistas que hoy llevan el peso de defender el prestigio bien ganado.

"Veo a estos chicos jugando mucho más para sus clubes que para la Selección. No sé si quitan el pie, pero la entrega es diferente. En mi época jugábamos en ambos, eso también es una diferencia", manifestó sin vueltas.

Y profundizó al asegurar que "mi generación tenía más hambre de ganar. Si entienden que este hambre de ganar es importante, tal vez ganen".

 

 

En diálogo con Ge Globo, el artillero que marcó 55 goles en 70 partidos con Brasil y ganó un Mundial, una Copa Confederaciones y dos Copas América aseguró que "la Selección es muy diferente a todo el resto. Estoy muy contento con los partidos que jugué y, principalmente, con los títulos. La Selección marcó mi carrera, siempre he dado la vida por ella".

Romario había estado en el centro de la escena en la antesala del clásico con Argentina, cuando entrevistó a Raphinha, uno de los baluartes del conjunto actual, y este aseveró que le daría "una paliza" a la Scaloneta "dentro y fuera de la cancha", aunque el resultado final fue una de las peores goleadas en contra de la historia brasileña: 4--0 y con baile.

 

 

Después, el jugador que brilló en Vasco da Gama, PSV, Barcelona y Flamengo sostuvo que "el resultado contra Argentina fue pésimo y Raphinha no estuvo a la altura".