Boris Becker, en prisión: cómo es la cárcel en la que cumple su condena
El legendario tenista alemán se encuentra en Wandsworth, a sólo cuatro kilómoetros de Wimbledon, donde se consagró tres veces en sus años de gloria.
BORIS BECKER es, sin dudas, uno de los más grandes tenistas de todos los tiempos. Sin ir demasiado lejos es uno de los 27 jugadores masculinos capaces de alcanzar el puesto número uno del mundo. A lo largo de su fructífera carrera ganó nada menos que seis títulos de Grand Slam: Wimbledon (1985, 1986 y 1989), el Abierto de Australia (1991 y 1996) y el US Open (1989).
El legendario alemán, sin embargo, afronta los momentos más duros de su vida: fue condenado a dos años y seis meses de cárcel por cuatro delitos financieros relacionados con su quiebra del año 2017. El tribunal británico lo encontró culpable por colocar fondos fuera del alcance de los acreedores de forma "deliberada y deshonesta" para evitar saldar sus deudas, que datan de aquel año en el que declaró su propia bancarrota.
El ex número uno del mundo se aloja en la histórica cárcel de Wandsworth, edificada en el lejano 1851 y con una capacidad asciende a 1500 personas. Caprichos del destino, Becker cumple su condena de dos años y medio -con prisión efectiva de la mitad; el resto con libertad condicional- a sólo cuatro kilómetros del All England de Londres, donde tocó el cielo con las manos tres veces en Wimbledon.
La primera noche entre las rejas, según contaron los medios alemanes, le permitieron hacer una llamada. La prisión donde está Becker, situada en Wandsworth, al suroeste de Londres, es una de las más emblemáticas de Gran Bretaña. Fue construida en 1851 y se inauguró dos décadas después.
La sentencia se conoció después de que el pasado 8 de abril el jurado del tribunal de Southwark, de Londres, probara que ocultó activos y préstamos por unos tres millones de euros para evitar devolver lo que debe, una cifra cercana a los 60 millones.
El ex número uno del mundo se enfrentaba a una pena máxima de siete años de prisión, pero al cabo recibió menos de la mitad. De los dos años y medio, estará un año y tres meses en la cárcel y el resto de la condena en libertad condicional.
Becker transfirió cientos de miles de euros cuando según él mismo estaba en quiebra. Los envíos fueron hacia las cuentas de su primera mujer Barbara Feltus y las de su segunda ex esposa Sharlely Lilly Kerssenberg. La condena también le cabe por no declarar una propiedad en su ciudad natal de Leimen, en Alemania, y ocultar un préstamo bancario de 825 mil euros, además de acciones en una empresa del rubro tecnológico.
El ex entrenador de Novak Djokovic negó todos los cargos y alegó que había colaborado con el proceso de quiebra, instancia en la que ofreció hasta su propio anillo de casamiento. También sostuvo que las ganancias de su carrera se agotaron en su primer divorcio y en los costosos compromisos por su estilo de vida.