Las Entrevistas de El Gráfico

¿QUÉ HACÍA EL NEGRO ENRIQUE ANTES DE PARTICIPAR EN MASTER CHEF?

Repasamos el imperdible 100x100 con el campeón del mundo en 1986. La Selección, Bilardo, su amistad con Diego, por qué le decían Pelé, Passarella, las lesiones, la pobreza en su infancia.

Por Redacción EG ·

21 de noviembre de 2021

   Nota publicada en la edición de Abril de 2014 de El Gráfico

Imagen EL NEGRO, hoy, en su casa, con el póster de Diego y la camiseta histórica del triunfo sobre Inglaterra en el 86.
EL NEGRO, hoy, en su casa, con el póster de Diego y la camiseta histórica del triunfo sobre Inglaterra en el 86.

 

1¿Qué hacés de tu vida, Negro?

Hago de remisero de mis cinco hijos, ja, ja. Fernando Adolfo tiene 28 y está en Brown de Adrogué, ya me hizo abuelo de Valentín; Martín Nicolás lo sigue con 26 y es el único que no juega. Después vienen Facundo (16), que juega al rugby en Pucará, y tiene un físico impresionante, Belén juega al hockey y Ramirito, de 12, está en las infantiles de Banfield.

2 ¿No es una traición a Lanús que juegue en Banfield?

Primero, me queda cómodo. Y después, en Banfield encontré un club tan ordenado como Lanús, con el mismo respeto para los chicos que existe en Lanús, pero con respeto para conmigo, algo que me faltó en Lanús. No de los dirigentes, que son de primera. Ramiro estuvo en Lanús, también mi hijo mayor, y tuve problemas con la gente de la puerta. Yo no quiero que me pongan una alfombra roja, pero por lo menos un mínimo de respeto, algo que en Banfield sí he recibido.

3 ¿Qué te pasó?

Fui un par de veces y no me dejaron entrar. Soy el único jugador nacido en las inferiores de Lanús que fue campeón del mundo con la Selección. Y no es por la plata tampoco, sólo un mínimo de respeto, viejo, me cobraban la entrada, me cobraban el estacionamiento, una vergüenza total, y para no pelearme con nadie preferí irme a Banfield y estoy muy contento. A Lanús nunca lo voy a dejar de querer por estos muchachos de la puerta. Tampoco puedo andar molestando al presidente Marón o a Nicolás Russo, a quienes respeto, para decirles que el de la puerta no me deja entrar.

4 ¿Qué fue lo último que hiciste en el fútbol?

Estuve de ayudante del Diego en el Al Wasl, en Dubai, hasta junio del 2012. Acá llegan las cosas malas, pero anduvimos bastante bien: de cuatro campeonatos, peleamos tres y para mí, trabajar con el Diego es un privilegio, porque es un tipo sin misterios, es muy simple trabajar con él y te da libertad.

5 ¿Te pone mal estar sin trabajo?

Y... me gustaría empezar a trabajar otra vez, acá me han ofrecido cosas, pero yo espero al Diego. “Negrito, mirá que no me olvido de tu trabajo”, me dice siempre, pero en el fútbol pasás de jinete a caballo en dos segundos, si acá cuestionan a Bianchi... imaginate el resto.

6 Esperás a Diego, pero Diego parece más metido en problemas de polleras que en otra cosa...

Es Maradona y lo que dice sale en el mundo. Por ahí tiene menos problemas que muchos... pero es Maradona.

7 ¿Es cierto que Ramón era el mejor de los cuatro hermanos Enrique?

Para ser el mejor, lo tenés que demostrar. El tiempo que jugó en Lanús, Ramón demostró que sabía… y mucho, yo tuve la suerte de compartir equipo con él, un lujo. Después, un mala leche le fue de atrás y le rompió tibia y peroné. Gracias a Dios, yo no estaba en ese partido, porque si no lo hubiese corrido y pegado con un palo en la cabeza al mala leche ese. Y Ramón ya no volvió a ser el de antes.

8 ¿Se da seguido que un crack no llegue?

Yo conozco muchos fenómenos que hoy están trabajando 14 horas por día, porque se la creyeron antes. Recuerdo una reunión que hice con Paredes, Brian Ferreyra, Iñiguez, Ocampos, Fede Andrada, cuando yo era técnico de la Sub 15, y les dije que los dirigentes o los representantes podían declarar que eran unos fenómenos, lo que quisieran, pero el único fenómeno que yo conocí en el fútbol se llamó Diego Maradona. Y que el Diego se tiraba a los pies, y dejaba la vida por la camiseta, entonces todos nosotros éramos del montón. Creérsela es lo peor que hay en el fútbol.

9 Ramón era el mejor pero a vos te decían Pelé en el barrio, ¿tan bueno eras?

Me decían Pelé, sí, pero por lo negro (risas)… Hoy voy a la casa de mis viejos y mi mamá me sigue diciendo Pelé.

Imagen SE INICIO en Lanús, en la C, con un ascenso y tuvo una segunda etapa en la que subió a primera.
SE INICIO en Lanús, en la C, con un ascenso y tuvo una segunda etapa en la que subió a primera.

10 ¿Vos también debutaste con un pibe?

Ja, ja, con la pelota, sí, jugaba con los chicos. Creo que el Diego ni sabía que me decían así, si no me hubiera cargado, seguro...

11 ¿Te destacabas desde chiquito?

Empecé a ganar algo de plata en el fútbol de pibe, con 12 o 13 años, en los torneos relámpagos que se hacían en las villas. Me destacaba y eran muchos los equipos que me buscaban para que jugara con ellos. “Yo juego, pero no pongo plata para la inscripción y quiero un sándwich de chorizo después del partido”, era mi respuesta. Ahí había patadas, codazos, cabezazos en la nuca, te descuidabas y te daban una ñapi, el que estaba afuera te metía la pata cuando pasabas… por eso, jugar en Primera División es una papa: están los árbitros, el alambrado, hay policías, el perro, nadie te puede pegar de afuera.

12 ¿De qué equipo eras de chico?

Yo me hice de River por el Beto (Alonso), que era un monstruo, por Jota Jota. Y pensar que después fui compañero del Beto. River me compró como goleador, pero me fue tan mal que a poco de llegar me quisieron dar a Chacarita... pero Chacharita no quiso, ¡a este muerto noooo! (risas). Ni botines tenía en ese momento.

13 ¿No te daban en el club?

Un día me compré unas zapatillas Puma y fui al club a entrenar. Me vio el Tolo Gallego y me preguntó: “¿Vos tenés contrato con Puma, Enrique?”. ¡Qué voy a tener! “¿¡Con Puma!? Tengo un hambre yo, estas zapatillas me las compré para venir y ahora las usaré para entrenar”. Y después de ser campeón con River, en el 86, ni siquiera tenía botines. En la vuelta olímpica me sacaron todo menos los calzoncillos y a la gira de la Selección previa al Mundial fui sin botines, pensé que ahí me iban a dar, pero no me dieron. Me los prestaba Giusti, que calzaba 42, y yo 41. Una vergüenza… No, no, si había un hambre tremendo...

14 ¿Jugaste el Mundial con botines prestados?

No, porque en México estaba en la habitación de al lado del Diego, le comenté del tema y él enseguida habló con la gente de Puma y no sólo me dieron botines, sino que me pagaron unos pesos por usarlos.

15 ¿Tan pobres eran en tu familia?

Yo hablaba mucho con el Sapo Saporiti en River. Una vez se rompió el vidrio en la concentración y pusieron chapas de zinc para tapar el agujero. “Esto lo hacen a propósito, para que yo esté cómodo, se parece al chaperío que hay en casa”, le comentaba. “¿Sabés lo que pasa, Sapo? El otro día entró un chorro a casa y le afanamos lo que venía robando”, la seguía. Y el otro se mataba de risa.

16 ¿En México 86 usaste la camiseta 12 por algo en especial?

Me cayó ese número, o me vieron cara de arquero, qué se yo (risas).

17 ¿Por qué te sumaste sobre la hora al Mundial?

Es que en River tenía un nivel impresionante. Y sé que el Beto Alonso, que me tenía de compañero, le habló muy bien de mí a Bilardo. Carlos ya me había querido llevar a Estudiantes en 1982, pero River le ganó de mano y me compró a Lanús. Apenas asumió en la Selección me llevó al torneo de Toulón. El primer día me dijo: “Enrique, mire que usted vino acá a aprender, a ver cómo entrenamos y cómo comemos. Va a ir al banco y no va a entrar nunca”. Me mató. Y cumplió: no entré ni un minuto. En el Mundial no me dijo nada y contra Corea no fui ni al banco y le dije a Tapia: “Si en el próximo partido no me pone en el banco, me voy para mi casa”.

18 No te ibas a ir…

Sí, me iba, estaba que volaba, yo era re calentón. En River, con Veira, una vez en la práctica se la pasaban sólo entre Tapia y Francescoli, yo estaba pintado, y en un momento agarré la pechera, la tiré y me fui al vestuario. El Bambino me preguntaba qué hacía. “Me voy a mi casa, mañana traigo una pelota a ver si puedo jugar un rato”. Una locura, en realidad.

Imagen DEJA EL ALMA en la final contra Alemania.
DEJA EL ALMA en la final contra Alemania.

 

19 Al final no te volviste del Mundial.

Nooo, por suerte no. Bilardo me puso de suplente contra Italia, en el segundo partido, y entré un rato, después 45 minutos con Bulgaria y mi primer partido como titular fue contra Inglaterra. Me tocó entrar justo por Pasculli, que le había metido el gol a Uruguay en octavos. Bilardo pensó que si me ponía a mí para manejar el medio, como yo corría para todos lados, liberaba al Diego, que ya no iba a tener que preocuparse demasiado por volver. Maradona metió dos goles ese día, después dos más contra Bélgica y quedó así el equipo. Carlos se la jugó con ese cambio, porque si nos iba mal contra Inglaterra, las primeras puteadas iban a ser para él y las siguientes para mí: “¿Cómo va a poner a Enrique en lugar del tipo que nos dio el triunfo? No sabe nada”.

20 Vos y Olarticoechea fueron titulares recién contra Inglaterra, ¿la importancia de la preparaciónes es un verso?

Yo entré casi sin experiencia de Selección, ¡y contra Inglaterra, nada menos! Ojo, tampoco me mandó a dar una charla en inglés, eh, sino a hacer lo que yo sabía. Pero repito una de mis frases de cabecera: en el fútbol no hay misterios, lo que está lleno es de misteriosos.

21 ¿Cuándo empezaste a cargarlo a Diego con que lo habías dejado solo en el segundo gol con los ingleses?

Después del partido nos tocó el antidoping con Diego. Estábamos en el vestuario y lo venían a saludar uno y otro y otro y yo decía: “¿Y a mí, que le di el pase, nadie me dice nada?”. Ahí nació esa historia de que le dije “tomá y hacelo”. Pero en el Mundial hice mucho más que ese pase.

22 ¿Cómo estaba Diego ese día, en el antidoping, era consciente del gol que había metido?

Estaba normal, no hablábamos mucho del partido, no le dimos tanta trascendencia, así nos manejamos entre los jugadores. Después, tampoco nos sorprendió tanto el gol, porque en los entrenamientos Diego metía muchas veces goles así: yo jugaba para los suplentes y nos dejaba tirados por el piso. Algunos dicen que si los rivales hubiesen sido uruguayos o paraguayos, lo bajaban antes, pero los ingleses quisieron tumbarlo y no pudieron, que es distinto. Y me gustaría que destaques un detalle de esa tarde: mientras esperábamos el antidoping cayó una inglesa lastimada al consultorio para que la atendieran. Se acercó y me pidió la camiseta. A mí me la pidió. Te repito: estaban Maradona y Enrique, y la señorita le pidió la camiseta a Enrique. O sea.

23 No tenía idea…

No sé, pero me la pidió a mí. Le dije que sí, pero que ella me diera las cadenas de oro que llevaba. Todo por señas porque yo no hablo inglés. Ahí nomás empezamos con el intercambio. “Tengo como tres lucas en oro”, le decía al Diego. Y justo golpearon la puerta y cayó un tipo gigante, que se ve que era el novio de la mina, y le tuve que devolver todo. Le estaba vendiendo la camiseta… si éramos tan pobres... (risas).

24 ¿Llegaste a ver el gol con la mano?

No, pensé que había sido de cabeza.

25 ¿Fue mejor el pase tuyo a Diego o el de Iniesta a Messi en el gol con el Getafe?

Hay una gran diferencia. Primero, yo soy mucho más fachero que Iniesta. Segundo: el Diego hizo el gol en un Mundial y el pase mío, por lo tanto, fue de Mundial.

26 ¿Volviste a cruzarte con Enzo Scifo?

No. Yo no soy mal intencionado, es la verdad, pero él se quería quedar con algo nuestro, con algo mío, era el mejor de Bélgica y veía que nos iba a complicar. Scifo jugaba por otro sector, pero al comienzo me acerqué, le di una buena patada, se cayó, me miró y le terminé pisando la mano y creo que con eso medio que lo saqué del partido. No está bien, lo sé, pero era mi plata, era mi camiseta, y no tengas dudas de que si yo hubiese estado en el 0-4 con Alemania del 2010… alguna mano pisaba. Tampoco me iban a llevar preso, ¿no?

27 Vos querés decir que en el 0-4 faltó rebeldía.

Y… faltó una buena murra, un mensaje de “acá estoy yo, esto es Argentina”, Dios quiera que tengan la suerte ahora.

28 ¿Cuánto les pagaron por ser campeones del mundo?

Unos 30 mil dólares. Los que cambiaron después, recibieron menos.

29 ¿Por qué no quisiste ir a la Casa de Gobierno como campeón mundial?

Quería ver a mi hijo, así que en Ezeiza agarré el auto y me escapé, nadie se enteró. Yo ya había cumplido jugando. En el 90 fui a la Casa de Gobierno, pero de boludo: me subí al micro para saludar a los jugadores y cuando quise bajar no podía por la cantidad de gente que había y me tuve que ir hasta Plaza de Mayo. A mí me preguntaron si estaba contento por ser campeón del mundo y contesté: “Sí, sí, estoy contento pero ya empieza la Libertadores y apuntamos a eso”. Y es un error, la verdad. Hay que saber disfrutar los títulos, se lo recalco siempre a mis dirigidos, porque ganar se da de vez en cuando. Y un título mundial, ¡ni te digo!

30 Leí que no quisiste ir porque el presidente era Alfonsín…

Sí, la verdad es esa: soy peronista y no quería ir a ver a un presidente radical. Me sincero.

31 ¿Qué hiciste al día siguiente de ser campeón del mundo?

Me fui a River, golpeé la puerta del vestuario y dije: “Me quiero entrenar”. Como la Primera no estaba, creo que le quedaban unos días más de vacaciones, me puse a correr con los chicos de la Reserva. Mi cabeza ya estaba en la Libertadores. Por eso siempre les digo a mis hijos: “Mucha Play, no puede ser 4 horas de Play y 20 minutos de entrenamiento. Tiene que ser al revés, 4 horas de entrenamiento y 20 minutos de Play si querés lograr cosas importantes”. Yo agarro un equipo hoy y los hago hacer fondo. Vos le decís esto a un profe y te contesta: “No, Negro, te quedaste en el tiempo”.

32 ¿Qué sería hacer fondo?

Correr 10 o 12 kilómetros una vez por semana. No se muere nadie, eh. Parece que hacer eso, hoy, es un pecado. Otro mito, como el que dice que el fútbol de hoy es mucho más rápido que el nuestro. ¿Qué tienen los jugadores de hoy: caja de sexta? ¿Qué? ¿Les tocaron el motor? ¿Qué hicieron? Todo verso.

Imagen  CON SU HERMANO, el Loco, como pistoleros de Loma Verde. Sin problemas para disfrazarse.
CON SU HERMANO, el Loco, como pistoleros de Loma Verde. Sin problemas para disfrazarse.

 

33 Me parece que hoy se corre más que hace 25 años.

Se puede correr más… pero al pedo. Tenés menos tiempo para pensar porque no falta técnica, esa es la cuestión. Si yo paro la pelota de un pase y se me va a dos metros, no es que el rival está rápido, yo estoy mal, porque si la paro y me queda al lado del pie, olvidate, por más que me marque Mascherano, no me la saca.

34 ¿Con Batista y Brown, que los sucedieron, quedaron resquemores?

A mí me molestó cuando el Checho declaró: “Ahora los jugadores están contentos”. ¿Qué? ¿Les contaban buenos cuentos? No me gustó y lo hablé con el Checho, con el Tata nos hemos visto, incluso una vez el Tata me llamó a Dubai para hablar con el Diego. Le pasé y hablaron lo más bien. Pero jamás podría tener problemas con el Checho, si él me llevó a trabajar a la Selección. Esas cosas no las olvido.

35 Valdano dijo que no supieron ser felices con el título del 86, ¿coincidís?

De mi lado jamás hubo disputas. Cada vez que te encontrás con un ex compañero decís: “¡Che, nos tenemos que juntar, dame el teléfono y te llamo!”. Mentira, nadie llama. Ya hicimos como 70 millones de asados, todos en el aire. Sería muy bueno que la AFA lo organizara. Y que la gente de River también reconociera las Copas del 86. A veces, por disputas políticas, se han olvidado. Dicen: “No, es que estaba Santilli y bla bla”. No, viejo, nosotros jugamos para River, defendimos el escudo de River.

36 ¿Tu hijo Fernando tiene condiciones para jugar en un club más importante que Brown de Adrogué?

Para mí le sobran condiciones para jugar en la Primera de River. Es ocho, quizás con más técnica que yo. Como técnico del Sub 15 hubiera dicho: “A este jugador, traémelo”. Eso me pasó con el Flaco Ocampos, que jugaba en Quilmes. Lo vi y dije: “Traeme a ese chico para el Sub 15”.

37 ¿Entonces qué le falta?

No sé, ojo que también le digo: “Fernando, mirá que cuando yo tenía 20 años faltó nada más que el técnico me tocara el culo, eh, me hizo lo que quiso”. Apenas llegué a River, más de un técnico me decía “¿Vos qué hacés, nene? Andate de acá”. Me faltaban el respeto. Luis Cubilla fue uno; Varacka fue otro. Mi primer día en River fui al vestuario, golpeé la puerta y me contestaron: “Esperá afuera”. Otra vez, llegué una noche a la concentración, saludé al técnico y no me dio ni bola. Atrás venía Fillol y el técnico le dijo: “Hola Patito, ¿cómo te va?” y yo por adentro pensaba: “No puede ser tan hijo de puta este tipo”. A mí me costó mucho entrar en River.

38 ¿Te costó entrar en la gente, no?

A mí me reputeaban. Un día no jugué, fui a la platea y un tipo se la pasó puteándome todo el partido, como si jugara. Seguramente ese día le dijo a su señora: “Vieja, me tomo unos matecitos, tranquilo, después me como unos fideos y a la tarde me voy a la cancha a putear a Enrique” (risas). Con Enzo también era terrible, se reían de él…

39 ¿Cuál fue tu clic?

A mí me salvó la vida don Adolfo (Pedernera), cuando se fue Cubilla y agarró de interino. Don Adolfo vino con su ropita de gimnasia, irradiando una paz terrible, me agarró del hombro y me susurró: “Enrique, juegue tranquilo, mientras yo esté acá, el 8 de River va a ser usted”. Cubilla me ponía de 9 o de 7. Intenté agradecerle por la confianza. “No me diga nada, Enrique, usted vaya y juegue, porque usted es muy buen jugador”, cerró. A Enzo también le cambió el puesto: don Adolfo lo pasó de 8 a 9. Después vino el Bambino, se dio cuenta de que habían encajado las piezas y no tocó nada. Le puso su alegría, su magia, pero dejó las cosas como estaban. Es una gran virtud eso.

40 No sólo le diste el pase-gol a Diego contra los ingleses, también se lo diste a Funes en el 1-0 de la final de la Libertadores en Núñez…

En realidad, en esa jugada me tiré a partirlo a Cabañas. En el partido de ida, en Colombia, me fue con todo y me lastimó la otra rodilla, la derecha. La izquierda ya la tenía muy mal del partido con los ecuatorianos. Para jugar la revancha me tuve que infiltrar las dos rodillas, y esas cosas te quedan: con los malintencionados yo era muy mal intencionado y en la jugada del gol, la verdad, me tiré a romper. Por suerte no lo rompí, me quedé con la pelota, se la di al Búfalo, el tipo la aguantó y la clavó. Gol y la primera Libertadores de River en la historia. Inolvidable.

41 ¿Cabañas ya era jodido en esa época, seis años antes de venir a Boca?

Sí, era bicho, bravísimo, tenía un físico impresionante. Ojo: un jugador que me hubiese gustado tener a mi lado, eh, ese tipo de compañeros que te transmiten cosas. Como el Tano Gutiérrez, otra bestia.

42¿La barra los apretó para que dieran la vuelta olímpica en la Bombonera?

Nunca nos apretó la barra en River, ¡si ganamos todo! Ahí adentro todos queríamos dar la vuelta, el Beto (Alonso) era el primero. Además, ¡andá a decirle al Beto que mejor no darla!

43 Dieron media vuelta.

No, no, arrancamos por el medio y lo fuimos a disfrutar con nuestra gente, que estaba en la cabecera. Eso hicimos. Tampoco íbamos a ir donde estaba la hinchada de Boca, ¿para qué? Es el día de hoy que el hincha de River lo recuerda.

Imagen RIVER GANA su primera y única continental. Celebran en Tokio: Pumpido, Gallego, Galíndez, Funes y Enrique.
RIVER GANA su primera y única continental. Celebran en Tokio: Pumpido, Gallego, Galíndez, Funes y Enrique.

 

44¿Qué te acordás de la final Intercontinental contra Steaua?

Que estaba hecho mierda y no podía jugar. Después del partido con Barcelona en Ecuador se me llenaba de líquido la rodilla y me sacaban ocho jeringas llenas en el vestuario. Siempre me la jugué, yo, ¿ves? La gente de River debería reconocer eso y darme una jubilación, porque al final tuve que dejar el fútbol a los 32 años, muy joven, por no haber sabido parar a tiempo. Me pinchaban, sacaban, tiraban, me volvían a pinchar, así 8 veces, ¿sabés cómo dolía? Y encima me mandaban corticoides. De eso me enteré después, porque no estudié medicina. Y me explicaron que el corticoide te come las articulaciones, por eso tuve que retirarme tan joven.

45 ¿Qué sentías en los partidos?

Primero: me dolía como la puta madre. Después: no le podía pegar con cara interna, sólo podía meter tres dedos o empeine. Contra Steaua no podía jugar de ninguna manera, fue todo garra y corazón.

46 ¿Cuándo empezó tu calvario?

Yo tuve un choque feo en el 82, con Kuzemka, en un Gimnasia-Lanús, pero después la fui llevando bien, siempre tuve muy buena musculatura en los cuádriceps. Durante la Libertadores, en un partido en Ecuador, no me acuerdo por qué jugada, se me volvió a inflamar mal. Terminé con la rodilla a la miseria. Y desde entonces no me pude recuperar. Un gran problema es que no tuve descanso después del Mundial, volví muy flaco de México, con 68 o 69 kilos, y todo el quilombo en la cabeza, que no podía caminar por la calle, parecía Maradona… Ahora tampoco puedo caminar por la calle, porque debo (risas)…

47 ¿Cuál fue tu mayor error?

No tomarme 20 días después del Mundial. Hoy, a un pibe le recomiendo que no juegue. Ojo: si tiene un dolorcito en el dedo chiquito y no juega por eso, Flaco, dedicate a otra cosa, pero si tiene mal la rodilla, le aconsejaría que no juegue. ¿Sabés por qué? “Porque los dirigentes te van a pegar un voleo en el orto como me pegaron a mí y vas a caer en el fondo de tu casa y ni se van a acordar de que jugaste en la Primera del club”, le diría.

48 ¿Hubo algún culpable en todo esto?

El principal fui yo, porque no sabía, pero si alguien me hubiera informado: “Negro, hacé lo que quieras, pero si te mandan corticoides te come el hueso”, no sé, al menos lo hubiera pensado. Y se juntó con que volví fusilado del Mundial, el cuerpo mío pedía descanso. Pero yo volví y jugué otro Mundial, porque la Libertadores, para River, era un Mundial. Tendría que haberme ido 20 días de descanso al campo… al campo de un amigo porque no tenía… ni tampoco tengo ahora, listo, me olvidaba del fútbol, y hoy estaría perfecto, por lo menos para jugar con mis amigos, cosa que me cuesta horrores, pero la historia fue de otro modo, yo quería estar, quería estar…

49 Viendo la edad hasta la que juegan muchos hoy, ¿no te da bronca haber tenido que largar a los 32?

Yo hubiera jugado hasta los 40, olvidate. Me da bronca el no reconocimiento, eso sí me da bronca.

50 Tu día más feliz en el fútbol

Mi primer partido en Lanús, contra Tristán Suárez, en la C. Vos dirás: ¡qué loco, jugó un Mundial y elige esto! Pero es así. Debuté y metí el gol del triunfo. Ese fue el día más feliz de mi carrera.

51 Tu día más triste.

Cuando Passarella me dijo que me tenía que ir de River, en Tanti, Córdoba, 1990. Ni cuando me retiré del fútbol me sentí tan mal, porque para eso uno se va preparando. Me largué a llorar como si fuese un nene, no recuerdo haber llorado tanto como ese día. Era un nenito al que le habían robado el juguete. Impresionante.

52 ¿Por qué esa reacción?

Antes del Mundial 90, me lesioné la rodilla otra vez, Bilardo me estaba esperando y no llegué. Me salió un sobrehueso y me quedé con la pierna dura en un partido contra Racing, no la podía flexionar. No había más cambios y me quedé en el campo. Así y todo, rengo, le bajé la pelota a Jorge Vázquez, que metió el gol del triunfo. Al día siguiente me operaron, y 20 días después, Passarella me preguntó cómo estaba. “Me duele muchísimo, no tengo fuerzas en la pierna”, le respondí. “Necesito que juegues”, me dijo. “Me da vergüenza, voy a estar rengo en la cancha”, seguí. “No importa, lo único que quiero es que metas una pelota de gol”, me convenció. Jugué y a las semanas salimos campeones. Y a los dos meses, en plena pretemporada, me dijo que me tenía que ir del club. Por lo menos no me eches, hijo de puta, si yo te jugué a pesar de estar mal.

53 ¿No le recordaste que te había hecho jugar con la rodilla lesionada?

En ese momento no, lo pensé después, cuando me enfrié. Yo me tendría que haber hecho el boludo, como se hacían muchos. Les dolía un poco la muela y no jugaban. Yo no. Eso es lo que no me gusta que no reconozcan, no solo a mí. Le dije una vez a un dirigente: “Ustedes tienen que reconocer algo económicamente a los que están más o menos, darles una jubilación a los tipos que le dieron la primera y única Copa Intercontinental al club.”. A un tipo que está mal, 5 mil pesos mensuales le salvan la vida.

54 ¿No volviste a hablar con Passarella?

Sí, y le pedí disculpas porque quizás me excedí en mis palabras. Después me lo crucé cuando se iba a postular para presidente. “Negro, mirá que yo pienso en vos”, me dijo. Menos mal que no me llamó nunca, si no todavía me están pegando.

55 Para estas elecciones apareciste en unos afiches junto a Fito Cuiña, ¿en qué quedó?

Soy muy amigo de Fito, por eso lo hice. River nunca me ofreció trabajo y yo tampoco lo fui a buscar.

56 Si te ofrecieran dirigir en inferiores…

Lo pensaría, pero siento que estoy para dirigir la Primera de River, no las inferiores. Puedo ganar, empatar o perder, como cualquier técnico, pero siento que tengo condiciones como para dirigir una Primera. Es lo que creo…

57 ¿Vas a la cancha?

A mis hijos les encanta ir, son todos fanas de River, pero a mí me gusta ver buen fútbol, entonces me cuesta un poco.

Imagen DISFRAZADOS con Alzamendi. El Negro era uno de los grandes bromistas del plantel.
DISFRAZADOS con Alzamendi. El Negro era uno de los grandes bromistas del plantel.

 

58 La mejor joda de concentración que hiciste.

En la Selección disfrutaba mucho asustando al masajista del Diego, Salvatore Carmando, con una máscara de gorila. El Tano pegaba unos saltos, “Negro va fangulo”, me gritaba. La pasábamos muy bien.

59 ¿Nunca un compañero se calentó con alguna joda tuya?

Sabíamos con quién joder. Enzo era un tipo más serio, el Beto también, entonces nada. Con Gallego, en cambio, nos pasábamos jodiendo.

60 ¿Por qué declaraste una vez que te reservabas tu opinión del Tolo Gallego como persona?

Ya está, no somos amigos, pero debo reconocer que me ha enseñado cosas dentro de la cancha y me ayudó con sus consejos cuando éramos compañeros. Después, cuando fue ayudante de Passarella, tuvo algunas actitudes para conmigo que no me gustaron. De la noche a la mañana puso otra cara y eso a mí me molestó.

61 ¿Nunca pensaste en hacer dupla técnica con tu hermano El Loco?

Al Loco lo adoro pero hacer dupla con tu hermano no es fácil.

62 ¿Podés creer cómo está Lanús hoy comparado con la época en que arrancaste vos, en la C?

Lanús es grande porque tocó fondo y no desapareció. Ahí fue clave don Manuel Guerra, que llegó en una época dificilísima y dijo: “Acá vamos a poner a los pibitos, que juegan bien”. Y nos dio continuidad a mi hermano Ramón, a mí, a Nigretti, Attadía, y formó una base. Lo que hizo don Manuel se siguió repitiendo y desde entonces se trabaja muy bien en inferiores. Luego, hubo dirigentes honestos que hicieron muchísimo. Hoy vas a Lanús un día, volvés a los tres meses y hay algo nuevo, es impresionante.

63 ¿Nunca se dio la posibilidad de trabajar en Lanús?

Una vez me lo propusieron. Me junté con Nicolás Russo en la sede. La idea era trabajar en inferiores, pero justo Brown y Pumpido agarraron Los Andes y me daban la Reserva, entonces decidí ir para ahí. Al final no duramos nada, lamentablemente. Fue un grave error mío.

64 El mejor DT y el peor.

Tuve muchos buenos, pero del que más aprendí y al que más recuerdo es a don Manuel Guerra. Y después, no sé si malos técnicos, pero algunos se portaron mal. Cubilla sabía pero no me gustaba su trato y se equivocó conmigo porque dijo que no podía ser el 8 de River.

65 Tus mejores amigos del fútbol.

El Diego, Pumpido, el Tata (Brown), a pesar de que por ahí tenemos discusiones y nos peleamos un poco, el Checho, el Pato Gómez, otro gran amigo con el que nos hicimos de abajo en Lanús.

66 ¿Te agarraste a piñas alguna vez con un compañero?

En general me llevaba bien con todos, pero nunca me gustaron los maleducados, sobre todo los pibes. No te voy a decir a quién, pero en River le pegué a uno. Yo estaba mal de la pierna, no me pasaba la pelota y cuando le reclamé, me dijo: “si vos no podés”. Me hundió 300 metros bajo tierra. Volviendo para mi casa, pensaba y pensaba: “Mañana, cuando llegue, a este pibe le tengo que pegar”. Y al otro día entré al vestuario y le di. Punto. Ahí se acabó.

Imagen CON DIEGO, durante un entrenamiento en el último Mundial. Luego siguieron en Al Wasi.
CON DIEGO, durante un entrenamiento en el último Mundial. Luego siguieron en Al Wasi.

 

67 ¿Cómo nació tu amistad con Diego? Siempre fue una relación de respeto, nos hicimos más amigos cuando yo dirigía la Sub 15. El Diego estaba en la Mayor y me venía a saludar, los pibes se sacaban fotos. Creo que lo que más le debe gustar al Diego de mí es que no me cuelgo de su cuello para salir en una foto, le chupa un huevo eso. Si mañana tiene trabajo y arma un nuevo cuerpo técnico y no me lleva, no me importa, lo voy a seguir queriendo como siempre.

68 ¿Por qué te eligió para ser su ayudante?

Porque le faltaba uno cuando se fue Lemme. Y no eligió mal, eh, él sabe que no soy un boludo mirando fútbol, me conoce como persona y sabe que jamás lo voy a traicionar.

69 ¿Mancuso lo traicionó?

Eso no lo sé. Desde que fuimos a Dubai, no volví a hablar con él. Si Mancuso hizo algo a las espaldas del Diego, no lo sé, pero no me gustaría un carajo porque Diego te brinda el corazón.

70 Si tuvieras que responder sintéticamente: ¿qué les pasó en el 2010?

Tuvimos la mala leche de que en la jugada que más trabajamos en la previa, a los 3 minutos nos vacuna el jugador del que más dijo el Diego que había que cuidarse: Thomas Müller. Después, jugamos contra una muy buena selección, es la verdad. Pero la culpa es de todos, cuando ganás y perdés. De técnico y jugadores. La única vez en la historia del fútbol que fue sólo la culpa del cuerpo técnico, fue en 2010.

71 ¿En qué se equivocaron?

(Piensa) Y… hoy te diría que habría que reforzar un poco más el medio. Pienso que se puso lo mejor que había y se perdió. Hoy todos hablan de los cuatro fantásticos, pero cuando los pusimos nosotros, ¿qué eran? El esquema era lo mismo, sólo estaba Tevez en vez de Agüero. Lo que me dolió y molestó fue lo que dijo Di María, que no le gustaba jugar por izquierda. ¿Dónde juega ahora? Pero bueno, era pibe, yo también me he equivocado.

72 ¿Por qué Verón jugó tan poco en el Mundial?

Porque merecía jugar poco, Maxi Rodríguez estaba mejor.

73 ¿Cuál fue el verdadero problema con Riquelme?

Yo no estaba. Sólo digo que, como hombre, si me quiero ir de algún lugar no le echo la culpa a mí mamá, a mí tío o a mi hermano. Si no quiero ir a un lugar, soy yo el que no quiere ir. Uno puede tener diferencias con muchos, pero si de verdad querés a la Selección, no te vas.

74 ¿Hablaste con algún jugador después de tu salida de la Selección?

No. Respeto a todos, no tengo nada contra nadie.

75 ¿En el Mundial nunca se sentaron a escuchar qué pensaba Bilardo?

Bilardo estaba todo el tiempo con nosotros, hablábamos de fútbol, el Diego lo escuchaba, jamás le cerramos las puertas. El Diego es muy respetuoso, el que dice lo contrario, o miente o no lo conoce.

76 ¿Terminaron dolidos con Bilardo?

Le agradezco que me llevara a la Selección en el 86, me hizo campeón del mundo, me puso en un momento complicado, lo único que no me gustó es lo que pasó en 2010. Si te dicen: “Si vos te vas, yo me voy”, por más que deje un palo verde acá, yo me voy.

77 ¿Bilardo les dijo que si se iban ustedes, él se iba?

Sí, y también se lo dijo después a Batista: que si se va uno, se van todos. No lo dije yo, tampoco lo dijo el Diego… lo dijo Bilardo. Ahora, Bilardo tendría que estar en su casa. Esa es la verdad.

78 Si te lo cruzás por la calle…

Lo saludo, hablamos. No me escondería ni tampoco lo voy a agredir, me da bronca que no haya cumplido con su palabra, nada más.

79 Si Mancuso se iba, ¿creés que Diego hubiera seguido siendo el DT?

Es imposible que el Diego haga una cosa así.

80 ¿Y si al que te cruzás en la calle es a Roberto Trotta?

Nooo, con ese muchacho no sé qué pasa. Para mí no existe. Si alguien te echa es porque no hiciste las cosas bien. El Diego se mortificaba y yo le decía: “Diego, si vos me traés a Dubai, me das la posibilidad de ganar unos mangos y yo me equivoco, el culpable no sos vos, eh, el culpable soy yo”. Después ese muchacho vino acá y habló pelotudeces, porque si tenía un problema conmigo, vivíamos en el mismo edificio y estacionábamos el auto al lado, lo podríamos haber arreglado ahí mismo.

81 ¿Pensás ir al Mundial?

Ni que me regalen las entradas ni que me den hospedaje. A mí me gusta participar. Como jugador o como entrenador, pero participar. Nosotros fuimos invitados a Alemania en 2006 por la FIFA, algunos estaban buscando entradas, pero yo me quería ir a mi casa. Cumplí y me volví, no me quedé a ver ningún partido.

82 ¿Lo ves a este Messi muy distinto del que dirigieron en 2010?

Lo veo muy bien, este debe ser su Mundial, tiene 26 años, ojalá se le dé, se lo merece.

83 Vos que lo conociste entrenando de cerca, ¿está en condiciones de ser el Diego del 86?

Le sobran condiciones a Messi, pero cuando lo comparan con Maradona, no va, al Diego no lo podés comparar con ningún jugador, para mí no hubo ni habrá otro igual.

84 ¿Le costó mucho a Messi dar la charla técnica contra Grecia en el 2010, que lo pusieron como capitán?

No es fácil hablar en grupo cuando no estás acostumbrado, pero se la rebuscó. Obviamente que Messi gana mucha plata por lo que juega, no por lo que habla. Dejá que juegue a la pelota…

85 Tengo unos mangos para apostar, ¿Tevez va al Mundial?

Apostá que va. Para mí, va a ser el Negro Enrique del 86.

86 ¿Tiene que ir?

Sí, soy un enamorado del estilo de Carlitos: el juego, su garra y deja la vida en la cancha. Es un jugador que hubiese encajado muy bien en la Selección del 86. A donde fue, salió campeón. Es una fiera.

87 ¿A quién sacás para hacerle un lugar?

A nadie. Todos los buenos que están ahí, que sigan. Lo pongo en el grupo de 23. Para mí, es un jugador que no puede estar afuera de la Selección.

88 ¿No lo llaman por haber defendido públicamente a Maradona?

Una vez me puse a pensar eso, pero no creo.

89 ¿Será porque no se lleva bien con Messi y con el grupo en general?

Ese comentario lo escuchaba y lo creía cuando no estaba en la Selección, pero cuando estuve me di cuenta de que nada que ver, porque se llevaban muy bien los chicos. Aparte, en la cancha no cuenta eso. Con Enzo yo estuve peleado 6 meses, no nos saludábamos ni hablábamos por una pelotudez, hasta que un día vino y me dijo: “Negro, dejate de joder, no podemos estar peleados”. Tenía razón, igual dentro de la cancha nos defendíamos a muerte.

90 Si fuera cierto que Tevez no encaja bien en el grupo, ¿está bien que Sabella privilegie el grupo a la calidad de un jugador?

Tevez la rompe y es un señor como persona. Y puede haber roces, claro, si hay roces hasta entre hermanos. “Muchachos, si tienen algún problema, vayan y cáguense a trompadas en el fondo”, les deberían decir. Y listo, eso tiene que pasar. A Tevez lo llevo sin dudas. Que en vez de cuatro fantásticos, sean cinco.

91 ¿La AFA te da una pensión como campeón del mundo?

A algunos les da; yo a veces la voy a buscar.

Imagen LA MIRADA chispeante, la sonrisa como un tic permanente. El Negro, hoy, en el fondo de su casa, esperando volver al fútbol con Maradona.
LA MIRADA chispeante, la sonrisa como un tic permanente. El Negro, hoy, en el fondo de su casa, esperando volver al fútbol con Maradona.

 

92¿Por qué si Diego es tan buen entrenador, no lo llaman de clubes importantes para dirigir?

No lo sé, quizás porque no lo conocen bien o le hicieron muy mala prensa como entrenador, pero yo que trabajé con él sé que es un técnico que la tiene muy, pero muy clara y podría trabajar en cualquier lugar del mundo. Diego merece una revancha en la Selección, y estoy seguro de que la va a tener.

93 ¿Hablás seguido con Diego?

Sí, sí, nos escribimos.

94 ¿Cuál será su próxima estación como DT?

Diego está muy cómodo en Dubai; si estuviera acá, seguro tendría una chance. Aunque no me conviene, me pone contento que Diego tenga este trabajo de embajador deportivo, porque Diego es demasiado grande para estar rodeado de jugadores de fútbol. No les quiero faltar el respeto porque yo fui jugador de fútbol. Creo que está con ganas de dirigir otra vez. Estaría bueno que sea una Selección.

95 ¿Se te hacen muy largos los días o ya estás acostumbrado?

Sí, sobre todo porque en mi casa me cagan a pedos (risas). Nunca me desesperé por nada y mientras mis hijos tengan el morfi y les pueda pagar la escuela, está todo bien.

96 ¿Tenés que seguir laburando o con lo que hiciste en el fútbol podés estar sin trabajar?

Más vale que tengo que trabajar, si nos dieron 30 mil dólares por salir campeones del mundo, ya te dije.

97 ¿Perdiste plata?

Presté mucha plata y nunca me la han devuelto. Ya está, no tengo rencor con nadie.

98 ¿Te bajonea no haber encontrado un lugar en el fútbol?

Y… sí; si le hubiese hecho caso a Nicolás Russo y a Pichi Solito en su momento, seguramente hubiese dirigido la Primera de Lanús mucho tiempo y sería un técnico reconocido, porque de esto entiendo y entiendo bastante, ¿sabés? Me doy cuenta de eso.

99 Siempre fuiste un tipo bromista, ¿seguís siendo igual o el hecho de no poder trabajar en el fútbol te cambió el carácter?

Eso nunca lo voy a cambiar, y la verdad que me cuesta un poco ahora que soy entrenador, porque a mí me gusta joder, hacer chistes, pero por ahí tenés que estar serio porque a tal o cual jugado no le gusta eso.

100 Alguna vez contaste que cuando te retiraste vivías en un piso 12 y mirabas seguido para abajo… Seguro fue algún chiste que hice… Soy demasiado fachero como para pensar en matarme, nunca se me pasó por la cabeza nada raro, es tan linda la vida que hay que vivirla. Tengo hijos, nietos, amigos y hay como 350 minas esperando afuera, en la puerta, vos las viste cuando entraste ¿o no?