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1956. Humberto Selvetti Plata en pesas

Melbourne. Nuestro querido "Gordo" empata el 1er lugar con el mítico Paul Anderson en mas de +90kg, pero por mayor kilaje personal obtiene la medalla de Plata. Histórico.

Por Redacción EG ·

12 de agosto de 2016
En un deporte por esos años irrelevante en el país, Humberto Selvetti fue un caso extraordinario en toda Latinoamérica. Bajo la dirección técnica de Alfredo Pianta, Selvetti  siendo muy joven había obtenido la medalla de bronce en los Juegos de Helsinki en 1952  y llegaba a Oceanía cuatro años después como el único que podía presentarle alguna oposición al norteamericano Paul Anderson, el considerado mejor pesista del mundo. 

El 26 de noviembre de 1956, en el Royal Exhibition Building de Melbourne, en horas de la madrugada, los dos titanes protagonizan el considerado máximo duelo de levantamiento de pesas de la historia del deporte mundial del siglo XX.

Después de los tres levantamientos de los que consistía la prueba, Clean & Press, arrancada de potencia y dos tiempos, el argentino termina con una sumatoria promedio  de 500 kg. y encabeza las posiciones. Secundado, a mucha distancia, por el italiano Alberto Pigaiani, que había levantado 452 kilogramos.

El estadounidense Paul Anderson, que ya era mundialmente conocido con el nombre de  La Maravilla de la Naturaleza, en la prueba final de dos tiempos debía levantar para superar a Selvetti 187,5kg peso que nadie había logrado alcanzar en la historia. Aquejado por una infección del oído desde el principio de los Juegos, con fiebre alta y después de haber perdido mucho peso, Paul Anderson falla en sus dos primeros intentos pero en un momento inolvidable del deporte mundial, tambaleante logra hacerlo en su tercer y última oportunidad, estableciendo el record mundial.

Terminan empatados pero como Selvetti había acusado 143,5 kilos, apenas 5,6 más que los del norteamericano, la medalla de oro quedo para Anderson y el argentino tuvo que masticar la bronca en el podio, como testimonia la foto del podio olímpico que acompaña esta nota.

El argentino entre los juegos olímpicos de 1952 y los de 1956, había aumentado más de 20 kilos.

¡Gloria eterna para el Gordo Humberto Selvetti, un prócer del deporte argentino y latinoamericano!

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