Gimnasia de Mendoza consumó un nuevo episodio de esos que abundan en la historia de la Copa Argentina: un equipo del ascenso elimina a uno de Primera División. En el estadio de Temperley, por los 32vos de final, el equipo que milita en el Federal A eliminó a Quilmes por penales 4-1 después de igualar 0-0 durante los 90 minutos.
Los dirigidos por Christian Díaz, que puso un equipo alternativo, se despiden de la Copa, mientras apuntan todos los cañones a tratar de mantener la cateogría. Los mendocinos aguardan en 16vos del final al ganador del duelo entre Talleres de Córdoba y Defensores de Belgrano.