Cuando las partidas y las llegadas parecían aquietarse, una llamada de Brasil encendió las alarmas de River Plate y Marcelo Gallardo. Del otro lado del teléfono, los dirigentes de Palmeiras, le presentaron al jugador colombiano una oferta imposible de rechazar.
La idea de Borré era la de renovar el contrato (para no irse libre) y de allí en más, negociar con el club que quiera contar con sus servicios.
La urgencia del "Verdao" y la presión del propio jugador colombiano, precipitarían su partida, pero para que los números cierren para todos debe resignar algo de dinero.   
Las próximas horas pueden ser decisivas en el futuro de Borré y River Plate, el máximo goleador de la era Gallardo está cerca de partir, lo cual no es poca cosa.