Deporte motor

Canapino: de la compu al Indy Car, el mail que no creía de la F1 y su admiración por Fangio

Agustín Canapino y una historia autodidacta increíble para llegar a ser multicampeón en el ciclo de entrevistas de YPF que celebra sus 100 años.

Por Redacción EG ·

18 de octubre de 2023

Llevaba el automovilismo en la sangre pero hasta los 15 años no había corrido ni en karting. Desde ese inicio autodidacta a este Agustín Canapino multicampeón y hoy representante argentino en el Indy Car pero con un recorrido triunfador en varias categorías.  “Yo solamente había ‘corrido’ en computadora, en simuladores. Y un día mi papá me vio en el simulador y decidió darme una oportunidad para probar”, contó el piloto en el ciclo Protagonistas, las entrevistas por los 100 años de YPF.

Claro, no se trataba de un “papá” que el automovilismo le fuera indiferente. Alberto Canapino fue un histórico preparador de autos de carreras y un emblema del automovilismo nacional y en ese marco, Agustín se empezó a formar solo. Sí, solo. “Mi papá no me había enseñado nada, yo me metía en internet y buscaba y aprendía, bien autodidacta. Él se sorprendió y por eso decidió probarme en un auto. Pero hasta ahí lo único que manejaba era computadoras. Y la primera vez fue terrible por los nervios que tenía. Arranqué mal porque en la primera vuelta y me estrellé en la tierra. Pude volver a salir, me tranquilicé y empecé a girar y ahí sí mi viejo dijo ‘le voy a dar una oportunidad de que corra’", contó.

 

La nota completa de Canapino.
 

“Mi papá ya sabía que yo quería correr. Un día llegó a la casa de mis abuelos donde yo vivía y vio lo que yo hacía en el simulador que me había armado. Y ahí vio cómo ponía a puntos los autos, como repetía la décima en todas las vueltas, ya analizaba los datos de software…”, recordó Agustín.

Y sobre su crecimiento aprendiendo de autos primero por internet, también contó que en su búsqueda también estaban los viejos corredores. Conocer las características de distintos pilotos que hicieron historia. “Yo veo vídeos de Fangio o de Froilán González y no lo puedo creer, realmente eran verdaderos héroes. Con esos manubrios como le decíamos nosotros, no el volante. Eran como un tractor, sin cinturón, con un casco de tela. A más de 200 kilómetros por hora, eran unos locos hermosos”.

Canapino, formado en un simulador en sus inicios, compite incluso hoy en eSports. Más allá que las carreras en la pista le llevan más tiempo. el argentino fue contratado por Williams como piloto de F1… “En el 2018 competía virtualmente para un equipo español y me iba bien. Y me llegó un mail con el @ William Fórmula 1. Dije esto debe ser spam, no es verdad. Dudé pero lo abrí y era Williams F1 que quería contratarme para su división de esports. Mi respuesta fue obvia: ¿dónde firmo? ¿Cuándo?”.

Mil historias del TC, el dolor de la muerte de su papá en plena competencia, los temores que pueden aparecer a ir a tanta velocidad, las dificultades de manejar en un óvalo y mucho más en una nota imperdible que podés ver disfrutar completa el canal de youtube de YPF.

¿Cómo se puede objetear con ese límite permanentemente? Y pasarlo significa un golpe, un accidente o una ida afuera. Depende del contexto, no es lo mismo irte afuera en un circuito con mucho campo que irte afuera en Indianapolis a 390 km, obviamente. Uno puede buscar ese límite de distintas maneras. Pero uno trata de nunca pensarlo, porque si no, no lo puedes hacer o si no tomas muchos recaudos y no sos rápido. Y uno vive la velocidad y los resultados, así que hay que coquetear con ese límite permanentemente. ¿Hay miedo en algún momento? Miedo, no sé si es la palabra, pero sí respeto. Que me pasaba de chico, después uno lo va asumiendo mucho más. 

 

TC

El TC es una gran pasión, obviamente después del fútbol es la segunda pasión de los argentinos sin dudas y es un lugar que vos donde vas desde Ushuaia hasta La Quiaca, donde vas te llena autódromos y la gente se vuelve loca. Ver un espectáculo de TC es único. Esos más de 50 autos largando al mismo momento con un sonido hermoso, compitiendo rueda a rueda, el Chevy, el Falcon, la mística de las marcas. Es una categoría que genera una gran pasión en todo el país y ofrece un espectáculo único en el mundo, te diría. Es un espectáculo que difícilmente lo vas a encontrar en otro lugar. Porque tiene algo de muy artesanal, por un lado, y por el otro son bestias. Bestia quiero decir, autos que corren, pero que es muy artesanal. Incluso los modelos de autos que corren, lo que vos decís de las marcas y todo, es algo artesanal. El asado al lado de la pista, es todo un show. Es muy argentino, ha cambiado mucho para bien, hoy es muy profesional, hoy todos los equipos y los pilotos son mega profesionales y compiten a la décima de segundo.

En tu pasión por el automovilismo desde chiquito, eras de aparte de la computadora o buscar en la computadora los viejos corredores de turismo carretera, los grandes grandes premios, las carreras en los circuitos semi permanentes, en las rutas. Me he comido libros y libros de TC, vídeos, porque aparte siempre soy de las personas que valoran mucho lo de antes, y sobre todo en el automovilismo, porque los deportes en general no han cambiado mucho, casi nada de hace 50 años acá. El automovilismo cambió por completo. Y hace 50 años, los que corrían en autos de carrera, para mí no eran pilotos, eran héroes, literalmente héroes, porque se exponían a un riesgo tremendamente alto por querer competir y ganar en una pista y eso para mí tiene un valor enorme por suerte gracias a dios porque los paradigmas cambiaron hoy no comprendemos ni aceptamos que un deportista pierda la vida en un deporte tampoco estaría bueno para nadie pero en aquella época era normal y que lo hagan de la manera que lo hacían, corriendo en los lugares que corrían, con las máquinas que manejaban.

Malos momentos a nivel deportivo, cuando tuve los accidentes que tuve en 2011, que me accidenté en Santa Fe con el TC2000 y en Olavarría con el Top Race y en Balcarce con el TC. En las tres categorías tuve accidentes enormes y fue el año después de haber sido campeón del TC y Top Race, como que fue un baldazo a agua fría y una realidad. Yo nunca me había accidentado y como que le faltaba un poco el respeto al riesgo porque se me había quedado en simuladores. Ahí tomé conciencia de lo peligroso que es esto y encima perdimos a Guido Falaschi ese mismo fin conciencia de lo peligroso que es esto y encima perdimos a Guido Falaschi ese mismo fin de semana y fue un golpe de realidad muy grande de lo peligroso y lo complicado que es el automovilismo y después a nivel personal obviamente cuando perdí a mi papá una semana antes de arrancar el campeonato del 2021, ese obviamente fue a nivel personal el golpe más duro. ¿Cómo se sale? Recuerdo perfectamente aquella situación y recuerdo cómo estabas vos, pero cómo se sale, cómo volvés a las dos semanas o bueno cuando se pueda volver a correr, cabeza otra vez.

Imagen Canapino, junto con Daniel Arcucci y Santiago Carreras, gerente de Asuntos Institucionales y Comunicación de YPF.
Canapino, junto con Daniel Arcucci y Santiago Carreras, gerente de Asuntos Institucionales y Comunicación de YPF.
Mi viejo falleció un lunes y yo corría el fin de semana siguiente, corrí el fin de semana anterior y el siguiente, el domingo que a él lo entuban fue la última vez que yo hablé con él y corrí en TC2000, largué segundo y gané la carrera. Totalmente shockeado por lo que me estaba pasando, pero como que corrí por él. Le hablé en el podio, él nunca me llegó a escuchar, lamentablemente, pero como que en el podio le traté de decir que yo había dejado todo en esa carrera por él y que quería que él haga lo mismo. Nunca me pudo escuchar. Y al otro fin de semana fue la carrera de TC, el inicio de temporada del 2021, con la escuadra canapino que habíamos armado y todo eso que estábamos proyectando. Íbamos a presentar el auto ese lunes y no se pudo hacer porque él falleció y tuve que ir a correr el fin de semana, hacerme cargo de todo, absolutamente todo. No solo correr, sino hacerme cargo del equipo, de ayudar a mi hermano, todo lo que pasó. Así que es lo que me tocó, pero pude ir a esa carrera y ganar también. Así que fueron momentos locos. 

Una otra cuestión que tiene que ver con tus orígenes y con cierta parte de tu presente, pero que es alguien formado en simulador, Una otra cuestión que tiene que ver con tus orígenes y con cierta parte de tu presente, pero ¿qué es? Alguien formado en simulador que en estos tiempos modernos compite en eSports, en esto tan habitual y tan en auge. ¿Cómo es eso? Más allá de que ahora le puedas dedicar más o menos tiempo. Sí, ahora no tengo tiempo, pero tuve la oportunidad de que me contrate Williams en su división de eSports. Williams es un equipo de Fórmula 1 Williams en su división de eSports. Williams es un equipo de Fórmula 1 que hizo su división de eSports y lo loco fue que en el 2018 me llegó un mail, yo estaba en mi casa, yo competía para otro equipo español, competía virtualmente, me estaba yendo bien y me llegó un mail aroba William Fórmula 1, dije esto debe ser spam, no puede ser verdad, como me va a llegar un William Fórmula 1, aparte yo tenía Fórmula 1, dije esto debe ser spam, no puede ser verdad, aparte yo tenía Formula 1, es el cielo y lo abrí, no, eran de William Formula 1 que me querían contratar para su división de eSports que estaban creando en base a lo que me habían visto, obviamente te imaginabas, dónde firma el contrato, dónde lo hacemos y bueno, con ellos estuve, sigo siendo piloto de Williams eSports.

 

Indianapolis

 ¿Hay un punto de contacto entre Recife y Indianapolis? Más allá de los tamaños. Con grandes diferencias en muchos sentidos pero se puede decir que sí porque en Indianapolis se respira automovilismo especialmente porque tienen la carrera más mística, la carrera más antigua, la carrera más importante del mundo, que son las 500 millas de Indianápolis. Y Indianápolis es, para los que nos gusta el automovilismo, es el lugar, es el templo. Y bueno, de hecho, el lema que ellos tienen cuando vos llegás al circuito es la capital del automovilismo, que lo es, porque realmente la historia de las 500 millas de Indianápolis es apasionante y sigue vigente al máximo nivel. En el Recife no hay ningún cartel que diga la capital del automovilismo. No, dice cuna de campeones. Bueno, cuna de campeones, pero mira el punto de contacto ahí.

Mencionaste al dueño del equipo que tiene mucho que ver con esto, porque confió en vos porque te conocía mucho, porque conoces mucho de la Argentina y del automovilismo argentino. Así es, Ricardo Juncos, a quien, como siempre lo digo, le voy a estar eternamente agradecido. Hoy podemos aceptar y asumir que fue un gran acto de inconsciencia de parte de él y mío, él haberme ofrecido y yo haber aceptado. Él se la jugó por mí, por un montón de motivos. Hoy que salió todo tan bien y que terminamos como terminamos, estamos superfelices de habernos arriesgado como nos arriesgamos. Pero, bueno, fue una apuesta muy grande. Él se la jugó mucho por mí.

¿Cómo es el impacto en el cuerpo de correr en un óvalo a casi 400 kilómetros, 250 vueltas? ¿Qué le pasa al cuerpo? Es muy extremo, la pasé mal también en ese sentido porque tuve que entrar a otro nivel a nivel físico, si yo estaba preparado y bien para la exigencia local, esto es 10 veces más. Y aparte sentir sensaciones muy extremas que nunca había asimilado. La fuerza G que recibe mi cuerpo es muy grande, entonces me daba muchas náuseas, me descomponía, me mareaba por la cantidad de fuerza G que recibía mi cuerpo y me costó mucho eso. Aparte por ahí pasaban días y seguía estando mal o tenía que ir a entrenar y el entrenamiento es tan exigente que al otro día no me podía ir, ir, ir entonces subirme al auto y toda esa fuerza g y no poder tener el cuello quieto, acalambrarme los hombros bueno, un montón de cosas que me iban a pasar y tenía que pasar pero bueno, en el momento cuando uno arranca les parece que nunca lo va a poder hacer porque es tanto lo que uno sufre y lo que pasa que lo ve muy lejano. Hoy poder terminar haciéndolo, si bien no estoy a mi 100% como están los pilotos top de ese lugar que lo hacen durante tantos años, ver que puedo competir, que en la última carrera peleamos por ganar, peleamos por el podio, que logramos un montón de resultados buenos, sobre todo en la última parte del año, me motiva, me motiva a poder seguir sacrificándome, a levantarme mañana, a ir a entrenar y prepararme fuerte para que si puedo continuar, tener la chance de hacerlo aún mejor. 

Decís que te mareas, ¿esto pasa en carrera? ¿Puede pasar en carrera? Porque te tienes que preparar para que te pase en carrera. Me pasó en el primer óvalo, que de hecho yo venía noveno y termino llegando 12, primero tres posiciones, porque realmente me estaba costando aparte, imagina, 370 kilómetros, no podés equivocarte, y tenía que tratar de terminar la carrera. Pero bueno, fue la primera vez en mi vida que corrí en un óvalo, y bastante, dentro de todo me lo aguanté, el tema fue vez en mi vida que corrí en un óvaro y bastante, dentro de todo me lo aguanté. El tema fue cuando me tuve que bajar, no sé cómo estaba. ¿Bajaste para el lado que girabas? Hay imágenes de cuando me bajé, estaba arruinado y no podía dar dos pasos seguidos, estaba completamente mareado porque obviamente, más de dos horas a tanta velocidad, toda la sangre se te va a la derecha y no hay forma de gobernar dos pasos. Ahora los pilotos que hacen mucho de corny, yo que ya tengo varias vueltas en él, te acostumbras al mareo y te bajas y más o menos hasta que te acomodas te la bancas. Pero la primera vez tuve una hora que no pude caminar. Pero durante la carrera, vos vas girando... No, porque vos estás ahí acostumbrado, como que está toda la sangre acá, tu cuerpo acá y vas. Pero el tema es cuando te querés bajar. Cuando te querés bajar es durísimo.