Team de la Federación Regional Deportiva, de Bolívar, ganador del Campeonato Argentino 1931. Lo integran: A. Gurruchaga, M. Solari, R. García, A. Lampón, R. Escobar, A. San Martín, M. Muiños, J. Junquera, Alfredo González, R. Paraja y G. Arregui.
La sorpresa de Bolívar
Con mucho menos trascendencia, por no disputarlo las ligas más fuertes, se efectuó el Campeonato Argentino sin que por ello perdiera su aspecto simpático y produjera en medio de todo una real sorpresa. Bolívar, un conjunto que hasta ayer no había figurado ni en las segundas ruedas eliminatorias de zona, ha venido a resultar el que se llevó el hermoso trofeo Presidente de la Nación. Es verdad que faltaban los más bravos equipos, pero quedaban varios de los que ganaron la copa o llegaron más de una vez a las ruedas finales en ruidosas campañas. Estos tuvieron por un momento la esperanza de conquistar la copa, pero han tenido que rendirse al empuje avasallador de los nuevos que van surgiendo. Las miradas de los clubs profesionales jamás habían parado en la ciudad del sur de la provincia. De hoy en adelante, los dirigentes de la Liga local van a tener que poner centinelas a la vista.
Una jugada valiente y exitosa del goalkeeper de San Juan, C. Recabarren, quien se ha arrojado a los pies del forward adversario.
Una estirada oportuna, que tuvo la virtud de anular un peligroso ataque de los bolivarenses. Estos últimos demostraron ligera superioridad sobre los forwards del bando contrario.
Por su ala derecha llevan un ataque los ágiles del cuadro perdedor. Esta delantera mejoró mucho en el segundo período.
La palomita y la vincha de Bartolucci, en un futboler del interior, prueban la popularidad de aquellas y la facilidad de asimilación de los muchachos provincianos. Fue justa la victoria de Bolivar, pues resultó el mejor de los dos cuadros.
Otra escena en las proximidades de la valla custiodiada por Gurruchaga. Los backs del cuadro campeón no descollaron por su técnica, sino por su entusiasmo, y en ese sentido Solari fue un valor más bajo que su compañero.
Con la seguridad que demostró en todas las intervenciones, el arquero de Bolivar salva una situación de apremio. No fueron numerosas éstas, por cuanto los forwards sanjuaninos carecieron de peligrosidad, debido en primer término a su falta de armonía. El