Cuando el Benfica se proclamó ganador de la Liga portuguesa por tercer año consecutivo, sus jugadores decidieron precipitarse contra los periodistas que cubrían el entrenamiento después del triunfo 4 a 1 sobre Nacional Madeira.
El club no sólo se coronó tricampéon (desde la temporada 1976/1977 que no sucedía) sino que además consolidó su posición de equipo con más títulos de Portugal, seguido por Oporto y Sporting.