Falleció Carlos García Cambón, goleador récord en el Superclásico e inesperado DT que entró en la historia de Boca
Tenía 73 años y había sido operado de un aneurisma.
Por Redacción EG ·
27 de abril de 2022
Carlos María García Cambón falleció a los 73 años luego de haber sufrido un aneurisma abdominal y pasar por cuatro cirugías en el último año.
Nacido el 29 de marzo de 1949, García Cambón había destacado en la selección nacional juvenil que obtuvo el Campeonato Sudamericano de 1967 y en la formación de Chacarita que dos años después que coronó en el Metropolitano.
García Cambón no era, ni por asomo, el típico delantero centro de área, implacable, dueño de un significativa cantidad de goles. Fino, elegante, dueño de una gambeta difícil de controlar y de un certero remate de zurda, podía jugar con igual pericia como número 10 o número 9 y aunque llegaba seguido al arco rival, y convertía, no era exactamente un goleador.
De hecho, cuando Boca se lo compra a Chacarita, en enero del 74, llevaba siete temporadas en el club de San Martín y había convertido 53 goles, aunque destacaba por anotar en los clásicos con Atlanta.
El 3 de febrero de 1974 protagonizó uno de los episodios más extraordinarios en la historia del Superclásico: en su debut absoluto, y sin haber destacado antes como goleador, hizo cuatro de los cinco tantos que sellaron la goleada de Boca Juniors sobre River Plate por 5 a 2, en la Bombonera.
Por la primera fecha del Torneo Metropolitano, García Cambón devino insospechado hombre récord. "Tuve una ayuda divina, tal vez", supo evocar el héroe del Libro Guinness del Superclásico, al tiempo de confesar, con voz firme y serena, que en realidad ni siquiera había soñado con hacer gol, que en todo caso se contentaba con jugar bien, con dejar una impresión positiva.
¿Cómo fueron los cuatro goles de García Cambón?
Así los recordaba: "El primero fue un mal rechazo de Hugo Pena y yo, que venía a la carrera, definí desde afuera del área. En el segundo, de córner, arremetí, la pelota me pegó en un muslo y me metí adentro del arco. En el tercero, rematé, el Pato Fillo dio rebote y yo cabecee por encima de todos. El más lindo fue el cuarto, tal vez el más gol más hermoso de mi carrera. Hubo una serie de paredes, Potente me la devolvió de toco, eludí a Fillol y definí con el arco vacío".
Aquel 5-2 se completó con un gol de Ferrero, de tiro penal, para Boca, y de Jorge Ghiso y Enrique Wolff, también de penal, para River.
Boca formó con Rubén Sánchez; Vicente Pernía, Roberto Mouzo, Roberto Rogel y Alberto Tarantini; Jorge Benítez, Marcelo Trobbiani y Osvaldo Potente; Héctor Ponce, Carlos García Cambón y Enzo Ferrero.
En su paso por Boca ganó 2 campeonatos locales de la mano de Juan Carlos Lorenzo, el Nacional y el Metropolitano, ambos en el año 1976, como jugador.
Su carrera como futbolista la cerró en 1981, en el desaparecido Loma Negra, de Olavarría, después de haber pasado por Unión de Santa Fe; Olympiakos, de Grecia; el retorno a Chacarita en 1978. Luego jugó en Rochester Lancers y Las Vegas Eagles, de los Estados Unidos.
En mayo de 1998 reemplazó a Héctor Veira como entrenador interino y fue quien le dio inicio al récord de 40 partidos invicto que logró Boca con Carlos Bianchi.
En los cinco encuentros que dirigió registró cuatro triunfos y un empate: 4-2 vs Huracán, 3-1 vs Gimnasia, 2-0 vs Racing, 4-0 vs Gimnasia y Tiro y 1-1 vs Unión. Además, hizo debutar en Primera a Sebastián Battaglia, hoy entrenador, en la goleada contra el equipo salteño.
