Tuchel no se guardó nada y liquidó al juez de línea tras la polémica en el Bernabéu

REAL MADRID derrotó 2-1 de forma agónica y polémica a Bayern Múnich y se clasificó a la final de la Champions League. Sobre la hora, los alemanes habían empatado el encuentro pero el juez de línea cobró de forma apresurada offside antes de la definición de Matthijs de Ligt y el árbitro detuvo la acción.

Szymon Marciniak, el mismo que dirigió la final entre Argentina y Francia en Qatar 2022, acompañó en la decisión a su colega, quien no esperó a la finalización de la acción para levantar la bandera y así no pudo ser ayudado por el VAR para corregir el presunto error.

"Creo que va contra cualquier norma del fútbol moderno lo que ha pasado. El asistente es el primero que se equivoca y levanta la bandera directamente en una situación en la que no podía estar seguro de hacerlo. Hay que tener los huevos, las agallas, de levantar la bandera en una situación así", disparó Thomas Tuchel en conferencia de prensa luego de la eliminación de Bayern Múnich. 

El enojo del DT no se detuvo ahí y continuó su arremetida contra el cuerpo arbitral: "Es un error importante. Y luego el árbitro, cuando ha visto que ganamos el rebote, toma la decisión de pitar. Hemos perdido y no hay nada que hacer, pero esto no habría pasado al revés".

El propio de Ligt reveló que el asistente reconoció su error y hasta le pidió perdón, al respecto Tuchel opinó: "Aceptamos las disculpas, pero no es el momento de pedirlas. Son semifinales de la Champions y no es el momento de cometer esos errores. Los árbitros tienen que estar al máximo nivel, tienen que estar a la altura de lo que hay en juego y no pueden pedir disculpas. Si no son capaces de estar a la altura, no vale con pedir disculpas".