¡Habla memoria!

1998. Cracks de purasangre

En una producción para EL GRAFICO, Saviola, Barros Schelotto, Cambiaso, Contepomi y Andrea González, los 5 deportistas más destacados de 1998, cuentan cómo fueron sus años y que les espera en el siguiente.

Por Redacción EG ·

22 de enero de 2019
Imagen Club La Martina: Guillermo Barros Schelotto, Andra González, Manuel Contepomi, Adolfo Cambiaso y Javier Saviola. A caballo de un año lleno de luces.
Club La Martina: Guillermo Barros Schelotto, Andra González, Manuel Contepomi, Adolfo Cambiaso y Javier Saviola. A caballo de un año lleno de luces.


Suele suceder. El lugar ideal para el encuentro, la llegada puntual de los protagonistas, la riqueza fotográfica que entrega esta tierra llena de verde campo, la hospitalidad de los anfitriones. Suele suceder, entonces, que caiga desde el cielo una maldición hecha diluvio.

Imagen Cambiaso deja atrás a Eduardo Heguy, en la final de Palermo que ganó Ellerstina.
Cambiaso deja atrás a Eduardo Heguy, en la final de Palermo que ganó Ellerstina.


Domingo 20 de diciembre, el año que ya se va, el momento para la memoria y balance del deporte argentino y cinco personajes dispuestos para la charla espontánea y sincera. Se pensó en el club de polo La Martina, donde vive Adolfo Cambiaso, uno de las figuras del '98. En ese paraíso de 200 hectáreas ubicadas en Vicente Casares, a un costado de la ruta 205 y a 50 kilómetros de Buenos Aires, la arboleda, los pájaros y los caballos no invitan a otra cosa sino a disfrutarlos al sol y al aire libre. Pero la inclemente lluvia del mediodía le puso stop al plan inicial. Bah... Lo único que hizo, apenas, fue agregarle nubes y agua a cada foto, porque lo demás nada varió. Ni la sencillez de Adolfito, ni la generosidad de Martina Estrada, madre del polista y dueña del lugar, ni la disposición de sus otros dos hijos, Marcial y Salvador Socas. Domingo, entonces, con un solo ausente pero nada importante: el sol.

Imagen Manuel Contepomi ensaya un golpe de drive. El rugbier fue considerado como el mejor del 98.
Manuel Contepomi ensaya un golpe de drive. El rugbier fue considerado como el mejor del 98.


El primero que llegó fue Manuel Contepomi, manejando una rural Ford Mondeo. Apareció con su metro ochenta y ocho y sus noventa kilos y enseguida encontró caras conocidas: Cecilia Lagos, nuera de Martina Estrada, es amiga de Lía Contepomi, hermana del rugbier. Manuel saludó y se acomodó, hojeó los diarios y esperó al resto. Apareció Adolfito desde su cercana casa, dentro de La Martina, tomó un desayuno de emergencia y se lamentó: "La lluvia nos jodió el asado que íbamos a hacer debajo de una arboleda. Lo mandamos al horno, no hay otra... ¿Ya llegó el Mellizo?"

Imagen La intimidad de la producción. El fotógrafo Juan José Bruzza prepara la máquina, custodiado por el personal canino de La Martina. Atrás los protagonistas.
La intimidad de la producción. El fotógrafo Juan José Bruzza prepara la máquina, custodiado por el personal canino de La Martina. Atrás los protagonistas.


El Mellizo Guillermo Barros Schelotto venía de autopista en autopista, desde las 12 del mediodía en que su padre Hugo lo levantó de la cama de su casa de La Plata. Adolfito no es de Boca, pero quería conocerlo, seguramente para contarle alguna anécdota al Lolo Castagnola, su cuñado y compañero de Ellerstina, fanático de Boca. Ya estaba el dueño de casa, Contepomi, ahí entran el pibe Javier Pedro Saviola y la multicampeona de patín Andrea González...

Ambos llegaron acompañados. El pibe de River cortó sus vacaciones en San Nicolás, donde está de visita en la casa de Roberto Sebastián Fanaro, su mejor amigo en las divisiones inferiores y acompañante en esta tarde de encuentro. Llegó con su carita de apenas 17 años, el mundo por descubrir y esa sensación de llevar sobre sus hombros chiquitos una de las escasas alegrías en este año poco millonario: es la aparición más prometedora del equipo del Pelado Díaz.

Imagen Adolfito le regaló la camiseta de Ellerstina a Saviola y el polista posó con la de River.
Adolfito le regaló la camiseta de Ellerstina a Saviola y el polista posó con la de River.


¿Lo recuerda? Apenas 5 partidos, 2 goles, y el perfil de delantero que empieza a definirse: encaradador, oportunista, la habilidad con sus dos piernas. Apenas 59 kilos pero con peso específico. Hace unos días, el presidente David Pintado dijo que River tenía sólo dos jugadores intransferibles: Pablito Aimar y Saviola.

Imagen Andrea González y sus 14 medallas de oro conquistadas en los Juegos Odesur de Ecuador.
Andrea González y sus 14 medallas de oro conquistadas en los Juegos Odesur de Ecuador.


Andrea González llegó con su novio, Javier Mac Cargo, con su timidez en el bolsito y su ticket de vuelo a Mar del Plata. Está viviendo en la ciudad de su novio, porque allí la entrena Carlos Lugea, técnico de la Selección Nacional. "Vos sos la que ganaste 14 medallas", le dijo Cambiaso. Ella apenas sonrió, asintiendo, y dejando en claro por qué es una de las grandes protagonistas del año: aquel record en los Juegos Odesur de Cuenca, Ecuador, 14 competencias, 14 medallas doradas; el título de Campeona Mundial en 300 metros (pista y ruta) y en 1500 ruta, en Pamplona, España, y ese segundo puesto en el ranking mundial, donde fue elegida la mejor velocista del mundo. Obviamente, como Cambiaso, Contepomi y Guillermo, está ternada para el Olimpia de Plata. Nadie duda que ganará, pero no se anima a declarar su sueño mayor: el Olimpia de Oro. "¿Y, lo vas a ganar?", le pregunta Adolfito. Ella, con una sonrisa, dice ni. Lo esperan los Panamericanos de Winnipeg y el Mundial de Chile, pero también su viaje a Milán, donde desde abril pasará a correr para el equipo Roses. Aunque, claro, a las dos y media de la tarde, todos esperan al Guille. Camisa Lacoste, pantalón marrón, cara de "iCómo estaba la ruta por la lluvia!", entró acompañado por su cuñado Mariano Cataldi. Ya están todos. Se escuchó: "Mamá, poné el asado..." y la segunda frase que alivió a los fotógrafos. "Salgamos a hacer las fotos al parque, dejó de llover".

Los cinco, con sus pergaminos, medallas y sueños. Conociéndose, preguntándose. Allí están en la producción de la tapa. Ahí están... Contepomi es el más hablador. Le preguntó a Saviola, qué hizo este sábado de vacaciones. "Fui a ver un partido a beneficio en San Nicolás, donde jugó Martín Palermo. Estuvo bárbaro, juntó un montón de gente".

-¿A vos ya te reconocen por la calle?

-Sí, más de lo que creía. Cuando me vieron en la platea me pidieron que juegue el partido. Al final, me presentaron a Palermo y me sacaron una foto con él.

Imagen El vino no se abrió, preo el asado fue el broche final para el encuentro. Guillermo Barros Schelotto, Adolfo Cambiaso y Javier Saviola comparten el almuerzo y la charla. El mellizo quedó en pasar por La Martina para rreencontrarse con el dueño de casa.
El vino no se abrió, preo el asado fue el broche final para el encuentro. Guillermo Barros Schelotto, Adolfo Cambiaso y Javier Saviola comparten el almuerzo y la charla. El mellizo quedó en pasar por La Martina para rreencontrarse con el dueño de casa.


Después, Saviola le comentó: "La verdad, de rugby no conozco nada. Sólo a Porta, je je... No, miento. El otro día, caminando por Palermo, me presentaron a Agustín Pichot. Ahora, por lo menos puedo decir que conozco a Porta, Pichot y Contepomi". Hay que recordar, entonces, que Manuel Contepomi lleva jugados sólo 5 test—matches con la camiseta de Los Pumas, pero le alcanzó para ser la figura del rugby argentino. Al fullback, de 21 años, ya se lo quisieron llevar a Francia, pero dijo no: "Me vieron en la gira por Europa y dos equipos —Brive y Agen— me ofrecieron jugar. Les dije que todavía no era el momento. Me cuesta dejar mi club (Newman) y mi familia".

Manuel, con su hermano Felipe, son los Barros Schelotto del rugby. Mellizos, también, están todo el día junto y se llevan muy bien. Como Gustavo y Guillermo, éste que ahora se prende en la charla con Adolfito...

—Guillermo, ¿son aburridas las concentraciones, no?

—Y... Se hace duro. Además, nosotros vamos al hotel Los Dos Chinos, que está en Constitución, pero allí no podés salir mucho. Para mí, no sirven demasiado. Me parece que se hace más para que el periodismo no diga que los jugadores no se cuidan.

Imagen Manuel Contepomi posa con la camiseta Argentina.
Manuel Contepomi posa con la camiseta Argentina.


-La verdad, en el polo es mucho más fácil. Llegamos desde nuestra casa a la hora del partido. Para mí es todo mental... ¿Jugaste al polo alguna vez?

—Sí, taqueé un par de veces, pero tengo problemas en el hombro izquierdo. Se me sale seguido. Además, no quiero arriesgar subiendo a un caballo...

Caballo es lo que sobra en La Martina, de quien se dice tiene la mejor escuela de polo de Argentina. Hay de todos, "hasta estos que parecen de calesita, para que suban los que nunca anduvieron", comentó la dueña de casa, como para darle confianza a dos que iban a debutar como jinetes: Andrea González y Javier Saviola. "Si se mueve, me tiro" amenazó la patinadora. "Ni se mueven", la tranquilizaron. Llegaron cinco petisos al que había que empujarlos para hacerlos caminar, pero Andrea tuvo tanta mala suerte que se subió al único que tenía hambre. El caballo bajó a comer pasto y la jineta tiró la rienda y pegó un grito. "Tiró de la rienda, el caballo tiene que hacer lo que vos querés", le dijeron los instructores de polo desde el piso, como si le estuvieran dando clase. Ella sólo quería bajarse, pero había que hacer las fotos...

Arriba de los montados, Contepomi lo cargaba a Saviola: "Dale, Valdivieso, dale...Que no se te mueva el caballo que sale mal la foto". El pibe entonces recordó: "Es increíble. En los primeros entrenamientos, Berizzo me llamaba Valdivieso. Qué coincidencia..." Pero había algo en la cara de Saviola: emoción, felicidad..." Lo más lindo del día fue esto: haber subido por primera vez a un caballo. Y lo mejor es que está la foto, así que puedo mostrarlo..." Como mostrará, seguramente, la camiseta número 1 de Ellerstina que le regaló Adolfito, y la promesa del pibe de retribuirla con una de River. "En Primera, soy gallina -dice Adolfito- pero mi primer club fue Nueva Chicago. Aunque el único partido que vi en el '98 fue Platense-Belgrano, invitado por Pablito Erbín, que es de la ciudad de 25 de Mayo y amigo de mucha gente de Ellerstina".

Imagen Javier Saviola supera a Arzubialde, de Gimnasia de Jujuy.
Javier Saviola supera a Arzubialde, de Gimnasia de Jujuy.


Ellerstina fue, para Cambiaso, la plataforma de su espectacular año: goleador en Palermo, ganador del Abierto, el mejor de la temporada. Se están conociendo, todos, se preguntan, se escuchan...

-Adolfito, ¿cuál es la lesión más común en los polistas? -le consulta Contepomi.

-Los aductores. Te mata. Es tremendo, pero en Inglaterra, por ejemplo, suele pasar que -en el medio del partido- hay un entretiempo largo, de unos 15 minutos. No te das cuenta, te quedás sentado y, cuando volvés, te podés desgarrar. Y ese músculo es básico para manejar el caballo...

Se mete Guillermo en la charla, el tema es el entrenamiento... "La verdad —dice Adolfito—el único año que entrené, llegué cansado a los partidos. Mi training es subirme a andar a caballo. Vos, Guille, ¿entrenás mucho?"

Imagen Guillermo y la pelota, con la camiseta de Boca campeón.
Guillermo y la pelota, con la camiseta de Boca campeón.


—Para mí lo más beneficioso es tener una buena base y mantenerla. Cuando estaba en Gimnasia, el profesor Valdecantos nos hacía correr 10 kilómetros, después piques y no sé qué más... Y te aseguro que no rendí más que en este año en Boca, donde, a pesar de que tuvimos que jugar la Copa Mercosur, Santella se preocupaba por sostener un nivel.

—Guille, ¿quién te gusta más, Bianchi o Griguol? —le preguntó Salvador Socas, el hermano de Adolfito. Y el Mellizo se lo contestó en el comedor, cuando el asado al horno ya estaba en la mesa...

Martina Estrada ya dispuso una variedad de cinco ensaladas y la carne al horno sobre un costado. En el comedor también almuerzan dos americanos y tres brasileños, alojados en el club —que también funciona como hotel— donde aprenden, entre otras cosas, a jugar al polo. La charla va y viene... Quedó pendiente la respuesta de Guillermo. Saviola escucha, el resto también... "Los dos son muy buenos, pero Bianchi me parece mejor. La diferencia está en el estímulo que te dan ante un partido clave que tenés que ganar. Allí, Bianchi te estimula más...".

Contepomi le pregunta al pibe Saviola si va a ir al Juvenil. Le dice que no. Que el 7 de enero va a entrenar con la Primera de River: "Mi año fue espectacular, no me puedo quejar. Espero que en el próximo pueda estar entre los 16 de Primera". El fullback de Newman cuenta que, en el '98, viajó con Los Pumas por Punta del Este, Hong Kong, Australia, la gira por Italia, Francia, Gales... Adolfito tiene su agenda cargada: Estados Unidos, Australia, Inglaterra, España... "Pero me voy a fin de año a Punta del Este, así veo a papá, que vive allá. Salimos a andar en bici, a hacer surf, allí me desenchufo...". Andrea —está dicho— tiene el Mundial como meta y a Milán como su nueva casa. Pide que le nombren a sus sponsors Laboratorios Roche, Lugea Boot's y la Secretaría de Deportes, "porque me apoyan para hacer lo que más me gusta". Guillermo piensa en los entrenamientos con la Selección, Contepomi en que tiene que seguir dando exámenes de Marketing...

Imagen Los anfitriones, Salvador y Marcial Socas, con sus familias y la madre de ambos y de Adolfito Cambiaso, Martina Estrada.
Los anfitriones, Salvador y Marcial Socas, con sus familias y la madre de ambos y de Adolfito Cambiaso, Martina Estrada.


Se acerca la despedida. "Chau, nos vemos, mucha suerte, ojalá que ganes el Olimpia", le dice Contepomi a Andrea. Mientras que Adolfito le comenta al Mellizo: "Cuando quieras, pasó por acá". Guillermo no dudó: "El martes vengo todo el día".

Cinco personajes del deporte argentino. Jóvenes, ganadores, promesas y realidades. Un domingo de diciembre, cuando el año se está yendo y el sol nunca apareció. Esto último, claro, fue sólo una anécdota.

 

HUGO SUERTE

Notas: MARTIN CASULLO, JUAN PEDRO RECA, MAXIMILIANO NOBILI Y GUIDO GLAIT

Fotos ALEJANDRO DEL BOSCO Y JUAN JOSE BRUZZA (tapa)