Viajes de negocios: fútbol corporativista sin pretemporada

Barcelona en Estados Unidos, Manchester City en Australia y Bayern Munich en China. Tres destinos diferentes en el planisferio son los elegidos por los clubes para realizar sus trabajos de pretemporada. Aunque en realidad, habría que dar vuelta la oración: los clubes son elegidos por los destinos.

No hay demasiada complicación sociológica para entenderlo. Como diría Garganta Profunda en el Watergate, “follow the Money”. Los Galácticos de Real Madrid en el 2005 fueron impulsores de las giras millonarias. Florentino Pérez convirtió a un equipo de fútbol en un producto comercial y el saldo más provechoso, lógicamente, lo consiguió afuera de las canchas.

Ahora, el Real está en Australia y la lupa sobre el presidente ya no pasa por la visión empresarial, sino por las críticas de clientelismo. Un mes después de que se confirmara la gira por el país oceánico, la filial local de la empresa ACS perteneciente a  Florentino Pérez, recibió la adjudicación de un contrato de 1850 millones de euros para la construcción de una autopista en Sidney. Rafa Benítez, nuevo entrenador reemplazante de Ancelotti mostró su disgusto, pero no pudo intervenir los negocios de la Casa Blanca (y de su jefe).

En general, los equipos no juegan más de cinco amistosos en toda la gira. El Real contra la Roma y contra el Manchester City, Bayern-Valencia, Bayern-Inter y Manchester United con Barcelona son algunos de los partidazos que se pueden conseguir en tierras bárbaras de fútbol. La presentación en diferentes programas y publicidades es lo que más le importa a quienes dirigen el tour. El Barcelona presentó su indumentaria oficial y tendrá por organización de Nike, un acto con jugadores de San Francisco 49ers del fútbol americano.

Fuera de los planes, Neymar recibió unos días extra de vacaciones y desde el club afirmaron que se sumaría cinco días más tarde de lo previsto. El problema lo tuvieron que afrontar los directivos con los patrocinadores, quienes recibieron al campeón de Europa sin dos de sus máximas figuras. La ausencia de Messi había sido previamente anunciada. En medio de sus vacaciones, Lio estuvo en Gabón y presenció el acto donde se colocó la primera piedra de la principal sede de la Copa Africa 2017.

Cuando terminó el evento paseó por la ciudad en un auto descapotable junto al presidente del país, Ali Bongo. France Football publicó que la visita fugaz fue a cambio de 3,5 millones de dólares, sin embargo, la información fue desmentida. El vínculo –informaron- había sido Samuel Eto’o, quien consiguió mediante dos ex dirigentes blaugranas, la presencia del 10.   

Hace algunos años, después de una gira por Asia, Barcelona cerró contrato con la televisión china para disputar partidos en un horario beneficioso para Oriente. Los españoles tuvieron que madrugar para ir al Camp Nou, mientras que millones de chinos encendieron la televisión antes de comer. “China se ha convertido en el mayor y más importante mercado con un gran interés creciente en el fútbol”, dijo Karl-Heinz Rummenige, hombre fuerte del Bayern Munich en el fútbol. Hace un año habían visitado Estados Unidos, pero esta vez tomaron el avión en sentido opuesto. El saldo de la visita estadounidense en 2014 fue la apertura de una oficina en New York. En China, no se espera menos que eso.

Para la preparación del equipo, no es lo más recomendado. De todas maneras, la idiosincrasia del fútbol europeo se encargó de legitimar las giras comerciales. “Es normal que los clubes grandes vayan por todo el mundo para presentarse. Viajamos cómodos y jugamos tres partidos, no hay ningún problema”, dijo Guardiola, quien recorrerá 19 mil kilómetros con el plantel.

Sucede lo mismo con la pretemporada, eje central en todos los debates futboleros argentinos. La preparación física para Pep, por ejemplo, no existe. “Te lleva la mente, los compañeros, los apoyos en el campo, muchas cosas que, cuando funcionan el equipo va bien”, dice. Aunque en varios aspectos se encuentra en las antípodas, Mourinho reveló su libreto en 2004: “Para mí no existen los jugadores que están en forma o no lo están. Existen jugadores adaptados o no a una forma de jugar”.

Entonces, ¿los entrenadores europeos amoldan su perspectiva sabiendo que los viajes de negocios son inherentes a los grandes clubes o realmente no los creen tan perjudiciales? De una forma u otra, julio y agosto entregan fútbol en lugares remotos y durante dos meses ponen al deporte al servicio del marketing. Los viajes de negocios, ya no son sólo para empresarios. 

Por Pedro Molina.