“Simeone y 10 más” podría haber dicho Maradona cuando asumió como DT de la Selección. Pero el Cholo ya se había retirado, con gloria y sin pena. Al 10 lo tuvo como compañero en el Mundial 94, cuando Argentina pintaba para campeón y se desinfló. Entonces, el equipo parecía contar con 12 jugadores, porque Simeone corría de un lado hacia el otro. Jugaba “con el cuchillo entre los dientes”, como patentó. Tiene el honor de haber pasado los 100 partidos con la celeste y blanca; solo lo superan Javier Zanetti y Roberto Ayala. Ese amor incondicional, mutuo, empezó en 1988, cuando Bilardo lo convocó por primera vez. Luego, con Basile en la conducción, ganó dos veces la Copa América: 1991 (gol en el partido decisivo) y 1993. En esos años, el equipo se mantuvo invicto durante 33 partidos. Además de la Copa del Mundo de 1994, también protagonizó los Juegos Olímpicos 96 (medalla de plata), Francia 98 (con una picardía hizo expulsar al inglés Beckham en octavos de final) y Corea-Japón 2002. Un volante todo terreno que integra ese grupo selecto de hombres que están más identificados con la Selección que con algún club argentino o europeo.
Carnet de ídolo
Nombre y apellido: DIEGO PABLO SIMEONE
Nació: 28/4/1970 en Capital Federal
Jugó: 104 partidos entre 1998 y 2002
Goles: 9
Mundiales: 1994, 1998, 2002
Títulos: 4 (Copas América 1991 y 1993, Rey Fahd 1992 y Artemio Franchi 1993)
