Peligro sin codificar: la reacción de Racing a una amenaza latente de River
De Núñez a Avellaneda: ¿se rompe un "pacto de caballeros"?

RIVER Y RACING han tendido puentes últimamente alrededor de una frase grandilocuente: "un pacto de caballeros". Se acuñó a raíz de la salida de Juanfer Quintero de la Academia para recalar en Colombia por problemas personales y la sustensación de una suerte de acuerdo tácito para que el talentoso volante no regrese a la Argentina para jugar en el Millonario, el club con el que está tan identificado, en el futuro inmediato.
Ahora parece resurgir ante el interés que habría expresado la Banda Roja por una de las grandes figuras de los de Avellaneda: Maxi Salas, considerado una pieza fundamental e imprescindible por Gustavo Costas.
De hecho, se habla de un encuentro entre miembros del cuerpo técnico de Marcelo Gallardo, a quien le encanta el delantero, y Sebastián Saja, director deportivo racinguista. Pero lo cierto es que cualquier equipo que quiera contar con los servicios del socio ideal de Maravilla Martínez en el frente de ataque deberá abonar la cláusula de rescisión que asciende a 8 millones de dólares.
Y ahí es donde entra en juego el mencionado "pacto de caballeros": hay una ley no escrita que hace que ese procedimiento no ocurra entre equipos argentinos, aunque la excepción que confirma la regla fue lo ocurrido entre Estudiantes y Boca, con el pago de 18 millones para que Cristian Medina pase a las filas Pincharratas.

A lo largo de un año y medio, Salas disputó 76 partidos, convirtió 13 goles y brindó 9 asistencias, además de convertirse en una especie de "todoterreno" por sus aportes tanto en ofensiva como en la presión y la recuperación de la pelota, características que son muy preciadas para el Muñeco.