Fumata azul y amarilla: "Habemus technica"
Desde las entrañas de Boca aseguran que el cónclave Xeneize ya eligió al sucesor de Gago.

BOCA ES UNA RELIGIÓN para millones de feligreses futboleros que le prodigan su alabanza domingo a domingo, sea en el templo de la Bombonera o a través de la televisión cuando la misa se traslada a terrenos visitantes.
En plena búsqueda de entrenador tras la salida de Fernando Gago y haciendo un parangón con la reciente elección papal, podría decirse que en las primeras horas de la tarde del jueves 22 de mayo hay fumata azul y amarilla no en el Vaticano pero sí en las oficinas de Brandsen 805.
Por las ventanas de la sede, si existiera un cardenal camarlengo identificado con la pasión Xeneize, saldría para afirmar: "Habemus technica", en el latín que utiliza la Iglesia católica o "Tenemos técnico", en el coloquial lenguaje de la tribuna.
Según el periodista Augusto César, de ESPN, la decisión por parte del presidente Juan Román Riquelme y su consejo de fútbol ya está tomada. Pero el nombre se conservará bajo sigilo sacramental absoluto y sólo será dado a conocer cuando ya estén cerradas las negociaciones.

Los candidatos parecen ser solamente dos: Miguel Ángel Russo, actual entrenador de San Lorenzo que está concentrado en la semifinal con Platense que puede depositarlo en la final del Torneo Apertura, y Gustavo Quinteros, libre tras su errático y corto paso de apenas tres meses por Gremio, luego de su exitoso concurso en Vélez.
De parte de Quinteros, que se encuentra en Roma en pleno viaje vacacional por Europa, habría total disposición a aceptar el cargo una vez que se produzca un llamado que desde su enterno niegan que se haya concretado hasta el mediodía de este jueves.

También se sabe que al final de la tarde podría haber una reunión, incluso de carácter virtual, con el elegido para conducir los designios futbolísticos de Boca a partir nada menos que del Mundial de Clubes, donde debutará ante Benfica.
El desenlace entonces es inminente y el ungido se hará cargo del plantel desde el próximo martes, cuando se reintegre de la licencia concedida una vez sufrida la eliminación contra Independiente, el Diablo que metió la cola para que el credo boquensa entronice al próximo responsable de encauzar de sus destinos futbolísticos.
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