La primera Bombonera de Fernando Gago como DT de Boca
La radiografía de Pintita durante su debut detrás de la línea de cal en el templo Xeneize.
FERNANDO GAGO Y LA BOMBONERA tuvieron su esperado reencuentro, aunque desde otra perspectiva. El templo que lo idolatró como futbolista de Boca y que disfrutó de sus virtuosas cualidades con la pelota en los pies ahora le ofrendó su cariño y apoyo para darle el espaldarazo como entrenador, ese que sueñan con que se convierta en el que les devuelva la gloria añorada.
Su porte de futbolista con la cabeza erguida se mantuvo tal como cuando emergía del túnel para hacerse dueño de la mitad de la cancha. Este domingo caminó hasta el banco con la misma prestancia y serenidad, tirando algún beso hacia el palco desde donde su familia vivía el momento tan ansiado.
Lo recibió una espectacular bandera que bajaba desde la zona de cabinas hasta casi el ras de la cancha con una gigantografía de sus épocas de jugador Xeneize y la leyenda "Bienvenido a tu casa", firmada por El Jugador Número 12.
Sin embargo, su primera experiencia en el Alberto J. Armando como conductor se topó con otras situaciones álgidas, como la recepción a Sergio Romero después de aquel incidente con el hincha al que quiso agredir y que mereció este domingo silbidos de una parte del público cuando se dirigió a ocupar su lugar al banco de suplentes, el que parece ser su nuevo destino.
El gol de Riestra fue un verdadero baldazo de agua fría para Gago y todo su cuerpo técnico. Fue apenas a los 15' minutos e hizo incómoda la primera estadía en casa detrás de la línea de cal. Con tranquilidad pero energía, comenzó a dar indicaciones mientras el ambiente se enrarecía al ritmo del "Movete, Boca, movete" entonado por gran parte del estadio.
El gol de Cavani sirvió para aliviar la olla a presión que estaba a punto de explotar en la Ribera, pero Gago no lo gritó. Mientras el uruguayo celebraba en forma de desahogo, el DT se limitó a pedir más esfuerzo a sus jugadores: "¡Dale, dale!", fue la expresiva arenga que reemplazó a cualquier festejo.
Con el 1-1 ya consumado se vivió un momento poco común ya que hasta se sintió una suerte de "sublevación" del público hacia la barra una vez concluido el partido cuando se entonó con vehemencia el "Jugadores, no rompan las pelotas, a ver si se dan cuenta, que están jugando en Boca", no avalado por La 12.
Así, en medio de la bronca de los hinchas con los intérpretes y los silbidos, la salida del conductor fue sin la impronta de felicidad y conformismo que había soñado en la previa.
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