BOCA ya está instalado en Río de Janeiro, donde se entrenó por primera vez a pocas horas de la final de este sábado ante Fluminense en busca de su séptima conquista en la Copa Libertadores.
El sendero del Xeneize rumbo a su 12ª definición en el certamen más importante del continente se habrá extendido durante 212 días: debutó el jueves 6 de abril ante Monagas en Venezuela y luchará por el título el sábado 4 de noviembre en el Maracaná.
Aquel primer partido de Boca en la edición corriente de la Copa, en el estadio Monumental de Maturín, tuvo dos particularidades: el Xeneize fue dirigido de manera interina por Mariano Herrón y, además, terminó con 9 jugadores tras las expulsiones del paraguayo Bruno Valdez (40') y de Facundo Roncaglia (86').
Por la inferioridad numérica en el entorno de Boca tomaron el 0-0 de visitante como un resultado aceptable, más allá de la escasa jerarquía del rival.
Aquella noche Boca formó de la siguiente manera: Sergio Romero; Nicolás Figal, Facundo Roncaglia, Bruno Valdez, Frank Fabra; Pol Fernández, Alan Varela, Juan Ramírez; Luca Langoni, Darío Benedetto y Sebastián Villa.
Más de 200 días y 13 partidos después, con incorporaciones y salidas, habrá apenas cuatro sobrevivientes en el probable equipo titular para la final respecto del que formó en el estreno: Romero, Figal, Fabra y Pol Fernández -Benedetto no será titular-.
Sergio Romero; Luis Advíncula, Nicolás Figal, Nicolás Valentini y Frank Fabra; Cristian Medina, Guillermo Pol Fernández, Ezequiel Equi Fernández y Valentín Barco; Edinson Cavani y Miguel Merentiel.