El 21 de agosto de 2004 en los Juegos Olímpicos de Atenas, la platense Patricia Tarabini y la oriunda de Pergamino Paola Suárez, baten a la dupla japonesa y consiguen la medalla de bronce en doble femenino de tenis. Reponiéndose así de la dura derrota que en semifinales habían sufrido ante las chinas por 6-2, 2-6 y 9-7 donde arañaron la posibilidad de acceder a la final.
Las dos son, tal vez, las mejores doblistas de la historia del tenis nacional. Patricia es la hija del ex-jugador de la Selección argentina de fútbol, Aníbal Tarabini.