En Alemania existe un jugador austríaco de origen bosnio que es un demonio con la pelota. Se llama Junuzovic juega en el Werder Bremen y es el "Loco Houseman" de la Bundesliga. Hizo una genialidad al cubo. La pobre víctima es un jugador del Dortmund de apellido Papastathopoulos (le dicen Cacho) que está aún hoy bajo tratamiento psicológico por esta jugada llamada en Argentina túnel, caño o simbólicamente sotana.