Son, y probablemente continúen siendo, días convulsionados en Italia en materia futbolística. Todavía se viven los coletazos de la no clasificación al Mundial, que ya se llevaron puesto al entrenador Gian Piero Ventura. Pero no será el único ya que los cambios también tendrán que ver con la renovación generacional del plantel para encarar lo que se viene.

En las últimas horas, medios italianos han señalado que desde la Federación están siguiendo a Sebastián Driussi, delantero del Zenit ruso, surgido de las inferiores de River. Tiene pasaporte comunitario gracias a antepasados nacidos en el norte del país, más precisamente en Friuli. Por esto, analizan sumarlo en las próximas convocatorias.

El delantero oriundo de San Justo no vistió la camiseta de la Selección Argentina en mayores, pero sí lo hizo a nivel juvenil: estuvo en la Sub 15, Sub 17 (jugó el Mundial de la categoría en Emirato Árabes en 2013) y también la Sub 20 donde fue campeón del sudamericano y luego se quedó afuera de la Copa del Mundo de Nueva Zelanda 2015 por una meningitis.

Italia tiene una larga tradición en convocar lo que denominan "oriundis", descendientes de italianos, y los nacidos en Argentina destacan dentro de esta categoría. Casos resonantes fueron los de Enrique Guaita, Luis Monti y Raimundo Orsi, campeones del Mundo en el Mundial de 1934, o Néstor Sívori y Humberto Maschio, históricos del fútbol argentino. Más acá en el tiempo, Mauro Camoranesi, con título en 2006 o las citaciones de Daniel Osvaldo y Gabriel Paletta.