VÉLEZ Y SU PASO A LA FINAL DE LA COPA DE LA LIGA estuvieron teñidos de un tono épico debido a las circunstancias que hicieron que desde los 12 minutos de juego se quedara con un hombre menos por la expulsión de Braian Romero. Más allá de la contingencia, el equipo supo sobreponerse y llevó muy bien el desarrollo con dosis parejas de voluntad, coraje e inteligencia.
Una vez consumado el 0-0 y con los penales por delante, el entrenador Gustavo Quinteros, que supo levantar a un grupo anímicamente lastimado luego del 0-5 con River en la tercera fecha para transformarlo en el conjunto que más puntos sacó a partir de ese momento, hizo gala de su capacidad motivacional.
Reunió a sus jugadores ante de la ejecución y les dijo: "Muchachos, escuchen: estoy emocionado y orgulloso de verlos jugar, correr y meter, tienen unos huevos impresionantes. Esto es fútbol y han ganado, muchachos. No importa el resultado final. Ustedes cumplieron con todo, pero vamos a meter todos los penales, los vamos a meter todos. Se lo merecen, se merecen ganar. ¡Vamos, vamos!".
Entonces tomó la palabra Santiago Cáseres, uno de los referentes del grupo y con ADN netamente fortinero, quien reforzó el mensaje: "Tranquilidad, muchachos. Vamos, pateamos fuerte, seguros. No hagamos boludeces. Nos vamos a llevar el partido porque (Tomás) Marchiori va a atajar penales, muchachos. Lo vamos a llevar y vamos a clasificar a la final, ¿eh?, ¡dale!".
El DT remató la fuerte arenta y reveló al pasar, que Vélez se preocupó por ensayar en la semana ante la posibilidad de la definición desde los doce pasos. "Hemos entrenado un montón de penales. No quieran hacer nada raro y cambiar sobre la marcha. Eligen un lugar y le pegan con confianza. Eligen un lugar y le pegan. Seguros, ¡vamos convencidos, eh!".
El resto ya se sabe: Marchiori cumplió la profecía de Cáseres y Lenny Lobato selló el triunfo con el quinto penal de la serie que depositó al club de Liners en la final contra Boca o Estudiantes.