PLATENSE comenzó mal este 2024 y desde la llegada de la dupla conformada por Favio Orsi y Sergio Gómez ha encauzado el rumbo: sumó 6 de 12 puntos ante rivales duros como Racing, Estudiantes, San Lorenzo y Newell's y pasó de ronda por penales en la Copa Argentina ante Olimpo.

Ambos entrenadores se formaron como jugadores en el Calamar y al recordar su pasado, Gómez se emocionó. "Quizás las nuevas generaciones no nos conocen, a mí Platense me ayudó a salir del lugar en donde estaba y me dio la posibilidad de jugar en Primera", marcó.

Sobre su difícil infancia en Grand Bourg, el entrenador reveló: "Pude guiar a la gente de mi barrio. A mí me mataron un hermano ahí y el club me sacó cuando no podía vivir más allí, me llevó a vivir a Villa Urquiza. Yo no podía dormir los fines de semana y por esa situación se me endurecieron las piernas, tenía un partido y no pude jugar".

Además, subrayó las diferencias de su presente y su pasado, sin olvidarse de todo lo que vivió. "A los 12 años me tomé el tren solo y me fui a probar a Platense, pero para eso tenía que caminar mucho porque no tenía plata para el colectivo, hasta que un dirigente me empezó a dar distintos cortes de carne como mercadería, para que pueda seguir jugando. Es la vida que te toca y uno tiene que elegir qué hace con eso, por eso luché hasta alejarme. No me voy a olvidar nunca de dónde salí", confesó en ESPN F360.

Por último, le agradeció a Favio Orsi, su ladero. "Después de dejar de jugar me encontré con él. Fue mi hermano mayor, me compraba ropa para revender y así pagué el curso de técnico. Salíamos a las seis de la mañana a entrenar e íbamos para todos lados, me invitaba a almorzar. Somos de situaciones económicas totalmente distintas, no sé que hubiese sido sin él", cerró. 

Imagen de Portada: Prensa Platense