"No escapa a la realidad social que vivimos, de cuando una situación no gustosa se acerca a la violencia. A lo largo de la trayectoria, uno se acostumbra. La ve con otros y nos pasó. No quiero darle demasiado asidero porque no me puede sacar energías para que el equipo juegue bien y gane", señaló Kudelka en conferencia de prensa.
Kudelka, en principio, desconoció la acción, pero luego dio una opinión al respecto sobre el acto que encendió las alarmas en Lanús. El entrenador no quiso hablar más del tema durante la conferencia de prensa.
"Hay que mejorar y ganar. Lo emocional a veces te hace poco racional en las actitudes. Tengo que estar con la firmeza necesaria para equilibrar esto. Nunca vine con una receta mágica. El hecho de no ganar repercute emocionalmente. Uno advierte frustración, pero también deseo salir de esto. En el fondo estamos todos en la misma", agregó el entrenador.
"Elegí venir acá porque sabía la situación y no me arrepiento. Estoy convencido de que vamos a salir, pero con trabajo, no con recetas mágicas. Hay que creer porque sino el barco va para cualquier lado en zona de tormenta".
Tres pasacalles, uno de ellos con tono amenazante, aparecieron cerca del estadio de Lanús. "Jugadores: ganen o caminan", fue la leyenda acompañada por la imagen de una llama de fuego y un automóvil.
El segundo mensaje para los futbolistas recriminaba que "Lanús les queda enorme" y el último instaba: "Vallanse (sic) todos".
El Granate ocupa la última posición en la LPF con 7 unidades en 14 fechas durante las que fue dirigido por tres entrenadores: Jorge Almirón, Rodrigo Acosta -interino- y Frank Kudelka. La mala campaña deterioró sensiblemente el promedio para el descenso a partir de la próxima temporada.